Chávez Chávez, a la báscula
Francisco Rodríguez viernes 8, Abr 2011Índice político
Francisco Rodríguez
Se equivoca quien piense que el ex ocupante de la PGR, Arturo Chávez Chávez, ya estará tranquilo en las oficinas donde es dependiente indirecto de Diego Fernández de Cevallos y directísimo de Antonio Lozano Gracia.
El también ex procurador chihuahuense debe estar a dieta de té de tila, porque junto con Arturo Germán Rangel, su segundo de a bordo en las oficinas que recién heredó a Marisela Morales, está en la mira de las autoridades por su presunta participación en un fraude que podría llegar a los 10 mil millones de pesos. Poco menos de mil millones de dólares, sí.
Se trata de las fraudulentas desapariciones de no pocas Sofomes, cual se conoce a las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple o cajas de ahorro que, no obstante haber sido reconocidas formalmente en el 2006, cuentan con escasa o nula supervisión de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), por lo que en ellas se ha repetido el ciclo de siempre conocido: fraudes, malas operaciones, quiebras y millares de ahorradores burlados, sin posibilidad alguna de recuperar sus aportaciones.
No hace mucho, apenas hace un año, la economista por la Universidad de Columbia, Patricia Armendáriz Guerra, opinó que en el país existe un sistema financiero “sombra” que no está suficientemente regulado y supervisado, como es el caso de las Sofomes y muchas entidades de ahorro popular.
Comentó que la autoridad se ha percatado de que no ha sido adecuado dejar fuera de la regulación a dichas entidades.
El problema radica ahora en que, si se incorporan a la regulación serían muy difíciles de reglamentar, pues son demasiadas entidades y de muy diversos tamaños, aunque es grande el riesgo de dejarlas fuera de la regulación.
Al evaluar la función de la CNBV como órgano regulador, apuntó que existe un “subsistema de captación no bancario” que no está siendo controlado por esta entidad.
Y que con este “sistema paralelo” no regulado, en México podría ocurrir lo mismo que en Colombia, donde quebraron las cajas de ahorro y otras instituciones de depósitos, que equivalían a 30 por ciento del Producto Interno Bruto de esa nación en términos de sus activos totales.
Sucede ya en México. Periódicamente conocemos de la fuga de accionistas de este tipo de “bancos paralelos” que se dan a la fuga dejando a los ahorradores con un palmo en las narices. Yucatán, Oaxaca, Veracruz, pero también en Guanajuato, Jalisco, Sonora o Nuevo León cuentan con millares de defraudados por este tipo de negocios no supervisados por la fallida autoridad federal.
El caso es que, de acuerdo a informes fidedignos, Chávez Chávez y Arturo Germán Rangel habrían sido tentados por algunos accionistas de Sofomes hipotecarias que recibieron recursos federales y, ya se imaginará usted, las casas prometidas en muchos casos ni siquiera han sido construidas y, en todos, no entregadas a quienes fueron pillados por los truhanes asociados a los más recientes ex ocupantes de la PGR.
Se habla, sí, de un Chávez Chávez que no escuchó el canto de las sirenas permanentemente ahogadas en Los Pinos. Que no pecó judicializando a la política cual desde ahí le demandaban.
¿Lo hizo por ético, íntegro, leal a sus principios?
O ¿quizá porque ya con la “bronca” de las Sofomes tenía suficiente?
Índice Flamígero: Me pide el psicoanalista social, José Antonio Lara Peinado, que le comparta su opinión sobre las palabras del ocupante de la Secretaría de Seguridad Pública, el señor García Luna, pronunciadas en su conferencia “Amenaza mundial de las drogas”. Dice el colaborador del Índice que en cuanto a “que la narcoviolencia durará todavía 7 años, que un criminal ahora se hace criminal en un mes, su desacuerdo en pactar con un criminal y que el narco boicotea las acciones de gobierno… al paso que vamos dentro de 7 años habrá más de cien mil muertos, ¿qué persona sana mentalmente hablando, ante tal cantidad de niños, jóvenes, mujeres y hombres asesinados, podría pensar que lo que hace por la seguridad está bien y que seguirá así 7 años más? Para García Luna la amenaza son las drogas. La idea delirante aparece cuando le otorga a la palabra ‘drogas’ características de ente maligno. ¿Por qué no habló del porqué la gente se droga?, ¿por qué no habló de las armas que los estadounidenses venden y con las cuales se asesina en este país?, ¿por qué no habló de los grandes negocios, incluyendo campañas políticas, alrededor del narco? Dice el secretario de Seguridad que un criminal se hace en un mes ¿y un político en cuanto tiempo se hace?, ¿por qué no habló de la responsabilidad que tiene el gobierno federal en la falta de oportunidades, estudio y trabajo de los jóvenes que según él se hacen criminales en este país? Dice que no está de acuerdo en pactar con un criminal ¿quiénes son los criminales?, ¿los narcos?, ¿los políticos que viven como reyes a costa del pueblo mexicano?, ¿la televisión que amputa emocionalmente a los mexicanos?, ¿el IFE?, ¿los jueces?, ¿los senadores que están estrenando edificio multimillonario, mientras la gente se mata en las calles?, ¿quiénes son los criminales?, ¿los soldados que disparan contra la sociedad civil en un retén?, ¿los políticos en campaña que ignoran que la gente se está muriendo y que no puede tener casa, coche ni siquiera un pequeño negocio para vivir?, ¿los verdaderos responsables de la guardería ABC?, ¿los dueños de la mina Pasta de Conchos?. Dice que no le gusta pactar con los criminales, pero al menos con varios de los mencionados el secretario de Seguridad ha pactado. ¿Por qué no habló de los huérfanos, de las viudas, de los miles de inocentes que han muerto por su guerra?, Simple y llanamente porque para una persona delirante los muertos no son sino cifras, estadísticas y números. Bien nos demuestra el psicoanálisis que para el sociópata el tiempo está al servicio de sus muy desequilibradas fantasías”.