A pesar de todo, Salgado Macedonio será candidato de Morena
Miguel Ángel Rivera lunes 1, Feb 2021Clase Política
Miguel Ángel Rivera
En agosto de 1988, el entonces joven político de oposición (postulado por el Frente Democrático Nacional, entonces encabezados por Cuauhtémoc Cárdenas) Félix Salgado Macedonio (31 años) conmocionó a los medios políticos del país, al presentarse en la tribuna de la Cámara de Diputados y vaciar un costal repleto de boletas electorales semiquemadas que al parecer fueron sustraídas ilegalmente de las urnas para privarle del triunfo que le habían otorgado sus conciudadanos de uno de los distritos electorales de Guerrero, con sede en Iguala.
El beneficiario del supuesto fraude sería el entonces líder de la Confederación de Trabajadores de México, la poderosa CTM, en el estado de Guerrero, Filiberto Vigueras Lázaro, quien al igual que su dirigente nacional, Fidel Velázquez Sánchez, se había erigido en mandón absoluto prácticamente desde la fundación de esa central, en 1936, y que inclusive extendió su dominio al vecino estado de Morelos. En lo político, fue dos veces diputado local, dos veces diputado federal (1979–1982) y senador por Guerrero (1982–1988).
La impactante presentación de Salgado Macedonio le valió que el Colegio Electoral de la Cámara de Diputados (entonces no había Instituto Federal Electoral) anulara la constancia de triunfador que la entonces Comisión Federal Electoral (CFE), dependiente de la Secretaría de Gobernación, la había entregado al supuestamente poderoso líder cetemista de Guerrero.
Para cumplir con el dicho que advierte que “para la cuña apriete, tiene que ser del mismo palo”, el presidente de ese Colegio Electoral era el también dirigente sindical cetemista Juan José Osorio Palacios, por entonces líder nacional de los músicos. Extraoficialmente se decía que había otros poderosos políticos interesados en acabar con el poder de Vigueras Lázaro, quien a partir de esa derrota electoral inició un notable declive.
Además de regar cenizas en el salón de sesiones del Palacio Legislativo de San Lázaro, Salgado Macedonio sustentó su derecho a ser nombrado diputado en un discurso en el cual destacó ser un político novel que deseaba cambios positivos en el país y que no se eternizaba en los cargos de elección popular.
Más de tres décadas después (33 años) el entonces debutante Salgado Macedonio, ingeniero de profesión, pero empezó a ser conocido por ser fundador de un diario en Iguala (Acción), ha sido dos veces diputado federal, dos veces senador, presidente municipal de Acapulco y dos veces frustrado candidato a gobernador de Guerrero y, temporalmente, volvió a la actividad periodística, como director de La Jornada de Guerrero. La mayor parte de sus actividades políticas las realizó como militante del PRD, pero a partir de 2017 se convirtió en organizador y dirigente estatal de Morena que, como en otros muchos estados, arrasó en las elecciones de 2018 con Andrés Manuel López Obrador como candidato presidencial.
En esos comicios, en fórmula con Nestora Salgado, logró su segundo ingreso al Senado, posición que dejó pronto para buscar su tercera postulación como candidato a gobernador de Guerrero, proceso en el cual tuvo como principal contendiente a Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, hermano de la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira de los mismos apellidos.
Desde un principio, las encuestas, a la que tan aficionados son en Morena, indicaron que Salgado Macedonio era el candidato más popular, tanto que sus simpatizantes olvidaron los malos resultados de su gestión como presidente municipal de Acapulco, periodo en el que se intensificó la presencia de grupos de delincuentes vinculados sobre todo con el narcotráfico y también de la extorsión conocida como cobro de “derecho de piso”. Uno de los críticos del potencial candidato “moreno” fue el esposo de Irma Eréndira, el académico de origen estadunidense John Ackerman, quien entre otras revelaciones aseguró que el dirigente nacional del partido, Mario Delgado, iba a nombrar a Pablo Amílcar como candidato el 17 de diciembre, pero “sorpresivamente y de última hora se echó para atrás frente a presiones de parte de sectores mafiosos incrustados en Morena”.
Otras versiones de supuestos conocedores de los interiores de Morena aseguran que el principal punto a favor del senador con licencia es la simpatía del fundador y líder moral de su partido, el presidente López Obrador.
La feministas aseguran que no aceptarán un presunto violador como candidato
La presiones de los “sectores mafiosos” no fue lo peor para Salgado Macedonio, pues como parte de la guerra en su contra, se revivieron acusaciones por violación y acoso sexual que cometió durante su mandato como alcalde de Acapulco y como director de la edición local del diario La Jornada.
Las denuncias no son nuevas, pero al parecer el poder judicial de Guerrero las archivó como resultado de presiones. El ex fiscal Xavier Olea aseguró que no procedió contra el “moreno” a petición del gobernador priista Héctor Astudillo, al parecer por temor a las protestas que podría haber ocasionado el combativo legislador, quien en su primera incursión como diputado federal se ostentaba como “El toro sin cercas”.
A pesar de la inacción judicial, organizaciones feministas y hasta diputadas de su mismo partido, Morena, se lanzaron contra Salgado Macedonio.
Por ejemplo, las integrantes de la “Red Nosotras Tenemos Otros Datos”, formada por legisladoras y feministas, aseguraron en redes sociales que no es ético ni moral que Morena lance a un hombre señalado como agresor sexual y pidieron a la Fiscalía de Guerrero dar continuidad a la denuncia penal.
También circularon versiones en el sentido de que más de un centenar de diputadas de Morena firmaron una carta conjunta dirigida a la dirigencia nacional de su partido para cancelar la candidatura de Félix Salgado Macedonio.
Según esta protesta, en las filas del partido del gobierno no hay lugar para los abusadores y destacaron que existen dos acusaciones penales en contra del senador con licencia, una en 1998 contra una joven menor de edad y otra en 2016 contra una trabajadora del periódico La Jornada de Guerrero, cuando el político era director del diario.
Hubo versiones de una tercera denuncia y supuestamente había otras mujeres ofendidas que habían preferido no hacer públicas los ataques de que fueron víctimas y también se dijo que el caso era examinado por la Comisión de Honestidad y Justicia de Morena y se mencionó que el aspirante a candidato tenía de plazo para comparecer antes esa instancia el pasado viernes 29.
Nada se convirtió en argumento válido para impedir que Salgado Macedonio fuera el elegido por Morena.
Medios locales informaron que en una sesión efectuada en la capital de Guerrero, Chilpancingo, a la cual no asistió el dirigente nacional Mario Delgado Carrillo, el Consejo Estatal de Morena decidió ayer domingo 31, ratificar al senador con licencia Félix Salgado Macedonio como candidato a gobernador, aunque oficialmente su nombramiento es de coordinador estatal de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación en Guerrero.
El Consejo Estatal de Morena sesionó con asistencia de 47 de los 90 consejeros, con lo cual se cumplió el quórum legal.
La asamblea la encabezó el secretario general en funciones de presidente, Marcial Rodríguez Saldaña, y por el delegado del comité ejecutivo nacional, Salomón Jara Cruz.
El registro oficial de Salgado Macedonio como candidato a gobernador está programado para el venidero 15 de febrero en las oficinas del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC).
En las filas de Morena, con el antecedente de las elecciones federales de 2018 se da por seguro que ganarán no sólo el gobierno estatal, sino las principales plazas, como Acapulco, Zihuatanejo y la capital, Chilpancingo, pero del lado de la oposición se considera que no están derrotados.
Para empezar, en ese estado se consolidó la alianza entre el PRI y el PRD, que fue el primer partido en derrotar precisamente al tricolor y que todavía tiene importante presencia en varias regiones.
El candidato de esta alianza saldrá de entre los abanderados del PRD, el ex alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre y del PRI, el ex secretario de Secretario de Desarrollo Social, Mario Moreno Arcos, quien ya recibió el respaldo de su principal contendiente interno, el senador Manuel Añorve Baños.