Continúan abusos de distribuidores de oxígeno en el Valle de México
Salud martes 26, Ene 2021
Crece el mercado negro
Se ha incrementado de forma exagerada el costo de los tanques de oxígeno medicinal y sus recargas en los centros de distribución de la zona metropolitana del Valle de México, ante el aumento de personas contagiadas de la Covid-19.
Ante la saturación en los hospitales por la pandemia, miles de familiares de enfermos han optado por mantener en casa a sus pacientes, por lo que eloxígeno medicinal se ha convertido en un bien de primera necesidad.
Sin embargo, en la Ciudad de México y el Estado de México, así como en el resto del país, este insumo ha escaseado por la alta demanda derivada del aumento de contagios.
Los sobreprecios se detectaron sobre todo en centros de distribución intermediarios, muchos de ellos minoristas e incluso clandestinos que surgieron ante la pandemia.
Según usuarios, un tanque portátil con capacidad de 682 litros, cuyo costo en la empresa Infra es de 5 mil 999 pesos, lo han adquirido con intermediarios hasta en 20 mil pesos, y un cilindro de 3 mil 450 litros, que originalmente cuesta unos 19 mil pesos, se revende hasta en 60 mil.
Francisco Cuevas Dobarganes, director de la Unión Industrial del Estado de México (Unidem), afirmó que Infra, empresa adherida a esa agrupación, ha mantenido prácticamente los mismos precios en sus centros, pero que el sobreprecio lo aplican los minoristas.
“Infra está rebasada por la demanda, pero vende a los mismos precios; hay algunas empresas que son distribuidores grandes y más o menos lo venden igual, sólo incrementaron 10 por ciento; los que han subido mucho son las compañías de distribución; los minoristas lo venden más caro, lucrando con la necesidad de los ciudadanos.”
Cuevas Dobarganes comentó que, además de inflar precios, estos establecimientos no entregan los tanques llenos. “Profeco (Procuraduría Federal del Consumidor) no puede hacer nada porque si lo clausuran estaría peor, pero sí pedimos que los multen”, reprochó.
“Algunas empresas procesan oxígeno, pero sus máquinas no se dan abasto. El gobierno debió prever hace cinco meses la situación que se vive porque en febrero viene otro pico”, alertó.
La Unidem llamó a la Profeco a supervisar los centros de distribución para que multe a quien lucre con la emergencia sanitaria; exhortó a las personas que tienen tanques que los presten o regalen porque en ocasiones el problema no es el oxígeno, sino la falta de cilindros.
“La gente que tiene dinero es la que tiene oxígeno aunque no lo necesite, y hay quienes no tienen dinero, tiempo o los medios para rellenar el tanque porque a veces son filas que pueden durar dos, tres, seis horas, y cuando se pone el tanque en un nivel alto no dura ni siquiera seis horas; tardas más tiempo en ir por el tanque que en el uso”, explicó Francisco Cuevas.
Otro problema que enfrentan quienes necesitan el gas son los fraudes en línea.
“Hay individuos que dicen tener tanques de oxígeno medicinal en unas tiendas virtuales, pero cuando solicitan el pago no existe certeza de que van a entregar el producto”, destacó Alicia Tajonar, asesora de la Organización Movimiento de Escuelas y Centros Comunitarios, que ayuda a ciudadanos a conseguir tanques.
Afirmó que además hay quienes están instalando centros de recarga sin los permisos correspondientes. “Infra nos ha dicho que hay que tener cuidado porque no existe garantía que se trate de oxigeno medicinal, sino industrial, por lo que se debe adquirir en establecimientos acreditados”.
Se han detectado centros que piden 15 mil pesos de depósito por un tanque de nueve metros cúbicos, la renta es de 800 pesos mensuales y el rellenado va de 800 a mil 200 pesos, según el lugar. “Hay días que suben el costo. Hay pacientes que necesitan llenarlo dos veces al día”, apuntó.
El problema de estos aditamentos es que no todos son funcionales para los enfermos de Covid-19. Gran parte de los concentradores que se comercializan no son de uso médico y producen oxígeno con una pureza menor a 82 por ciento, insuficiente para un paciente con coronavirus.
Ante la escasez del oxígeno, algunos ayuntamientos han hecho convenios con empresas para ofrecer el llenado de tanques de manera gratuita.
En el Valle de Toluca llenar un tanque de oxígeno cuesta entre 500 y 2 mil pesos. El problema es que hay que esperar hasta ocho horas para hacer la recarga. En esta región sólo existen seis establecimientos que ofrecen oxígeno, por lo que siempre están llenos.