Creciente inestabilidad política y social en Durango

¬ José Antonio López Sosa martes 5, Abr 2011

Detrás del Poder

José Antonio López Sosa

Llegó Jorge Herrera Caldera, gobernador constitucional de la entidad después de un ríspido conflicto electoral con su adversario (que curiosamente, también creció en el seno del PRI). Los ánimos no estaban nada tranquilos en Durango especialmente porque la gente de la capital en su gran mayoría votó contra Herrera Caldera.

Comenzaron pues los días de la nueva administración, parecía ser una entidad estable con todo y la permanente violencia como consecuencia del crimen organizado.

Los escándalos han venido, uno tras otro, desde la investigación en torno a la directora del penal de Gómez Palacio que permitía a los internos salir por las noches como sicarios, hasta la presunta injerencia que el gobierno de Herrera tuvo en la Universidad estatal durante el proceso de sustitución de rector.

Cada semana la violencia crece en Durango, el gobernador difícilmente da la cara al respecto, la culpa se endosa tácitamente al gobierno federal en un estilo más o menos parecido a como lo hiciera durante su sexenio Zeferino Torreblanca en Guerrero.

Seguido hay balaceras, muertos y sobre todo, inestabilidad social. La gente de las localidades habla incluso de ingobernabilidad desde la llegada del actual gobernador que permanece silencioso ante los hechos.

Se ha dicho de todo, problemas entre su cuerpo de asesores, situaciones ríspidas con su director de comunicación social (que curiosamente es primo del gobernador), en fin, una situación que lejos de llevar a Durango hacia delante, lo está llevando hacia atrás.

La situación nacional en cuanto al problema de la seguridad evidentemente permea en las entidades, sin embargo se requiere que la voz del gobernador aclare o bien, exija a las autoridades federales en su caso, la intervención para mejorar las condiciones de seguridad.

Hacer a la vieja usanza que no pasa nada, callar y fingir que no se enteran de lo que se publica en los medios de comunicación no llevará al gobierno de Durango a ningún lado, se requiere con urgencia que el gobernador cumpla todo lo que ofreció en campaña y haga lo posible por evitar que la ingobernabilidad crezca en el estado de Durango, con mirar el ejemplo de Chihuahua o Tamaulipas puede prevenir y no lamentar.

Ayer Herrera y los otros 18 gobernadores priístas comieron con Humberto Moreira, ¿se habrá tratado de el puro asunto electoral o también habrá existido oportunidad para tratar situaciones tan graves como la que atraviesa Durango?

¿Cuál será el fondo de esa inestabilidad hacia dentro y hacia fuera en la administración de Jorge Herrera Caldera?

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