Nueva guerra en Estados Unidos
¬ Sócrates A. Campos Lemus martes 12, Ene 2021¡Que conste,.. son reflexiones!
Sócrates A. Campos Lemus
NO HAY DUDA DE QUE LA PUBLICIDAD POLÍTICA SUFRE CAMBIOS IMPORTANTES, ahora la sociedad se encuentra dividida, los intereses de un grupo son distintos a los del otro grupo, la elección de Trump generó un proceso que rompe los cánones tradicionales en la política del Partido Demócrata o del Republicano, por vez primera se movieron los hilos del sentimentalismo nacionalista y se descubrió la ruta “blanca” que se contrapone a los demás grupos, pensando en que independientemente de su formación profesional ellos tienen el mando en todas la determinaciones políticas y los demás grupos étnicos que “invaden” a los Estados Unidos se deberían plegar a su mando y control, pero olvidaron que por los tiempos y las circunstancias los grupos étnicos no solamente se manejan con un alto grado de fuerza y se manifiestan en sus propias necesidades sin olvidar que su origen es uno y sus intereses, ahora, están íntimamente ligados a los principios teóricos de la democracia norteamericana que desde hace mucho se han perdido en esa política invasiva, intolerante y saqueadora que han mantenido a nivel internacional y hoy, por las circunstancias, la pandemia y la crisis económica se radicalizan las divisiones políticas e ideológicas que se manifiesta por unos con argumentos teóricos y nuevas formas de integración, y en el otro lado, con los viejos principios radicales de la supremacía blanca se trata hoy de imponer, incluso por la fuerza y esto despierta violentas manifestaciones que se van a reflejar en enfrentamientos raciales y políticos en muchas partes del territorio norteamericano.
La política de guerra, militarización y armamentismo genera terror en el seno mismo del territorio norteamericano, sobre todo porque una amplia población además de saber operar el armamento lo tiene en su poder con una libertad rayando en el libertinaje, lo que ha provocado el que en los pretextos sean cualquier se realicen y generalicen matanzas que van desde ataque en las escuelas y centros comerciales, y ahora, se manifiestan como la fuerza paramilitar capaz de ingresar al CAPITOLIO, el corazón del poder norteamericano y por supuesto traerá muchas consecuencias que llegarán incluso a los enfrentamientos para imponerse fuera de los diálogos, por el lenguaje de las armas con las que están más familiarizadas las masas populares en los Estados Unidos y donde se ha levantado a Trump como un líder que es capaz incluso en la derrota de moverlas en su favor y poder enfrentarlas en su provecho de ahí el enorme peligro que esto representa para la paz interna de los Estados Unidos e incluso la seguridad nacional y la paz mundial. Recuerden que Trump alcanzó 75 millones de votos a su favor…
El proceso de rompimiento del comercio en grupos controlados ya no por los norteamericanos, sino por los países de China, la URSS, Unión Europa y el fraccionamiento del poder en América y el descontrol de los mercados tradicionales y de los grupos de poder incluyendo los enormes recursos del narcotráfico y la delincuencia organizada, obligaron a los norteamericanos a legalizar el uso y abuso de las drogas, con el objetivo de que no salieran los recursos financieros sin control cambiario y bancario y se incorporaran a las economías nacionales de otros países, y en este proceso se generaron las famosas guerras contra el narcotráfico, pero con el objetivo de controlar a los grupos del tráfico. a los empresarios y banqueros que manejan los enormes recursos financieros, de ahí que en los proyectos de paz como el de Colombia no solamente se trataba de pacificar al país en esa guerra ideológica que se diera desde el bogotazo y las guerrillas, sino para controlar el flujo de las drogas y los canales financieros de esos enormes flujos de efectivo que desequilibran las economías de muchos países dolarizándolas sin control, por ello las acciones en Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Honduras, Colombia, Perú, Bolivia, las acciones en Venezuela y Cuba para aislarlas del contexto continental ahora, sin duda, comenzarán acciones encaminadas a tratar de controlar a México para que no tome rutas en la corriente ideológica social-nacionalista que pueda encabezar una nueva corriente como en años anteriores mantuvo México con las doctrinas Estrada y la de autodeterminación de los pueblos con un amplio sentido nacionalista que impedía las acciones políticas de los grupos empresariales y financieros norteamericanos.
Si no estamos en una nueva corriente de GUERRA FRÍA, cuando menos nos movemos en una franca división en los grupos sociales y en Estados Unidos entran en juego los millones de norteamericanos de origen latino e hispanoparlantes y los demás grupos que al final de cuentas, como minorías son lastimados y buscan las alianzas con otros grupos enfrentado a los de la “SUPREMACÍA BLANCA” y esto puede provocar otra lucha interracial como en los años sesenta, cuando la violencia tocaba a las puertas interiores de Estados Unidos y se tuvieron que generar las guerras en Vietnam y Corea para distraer la presión y la tensión social en un amplio llamado de unidad ante los supuestos enemigos de la democracia como eran los países comunistas. Al final de cuentas el costo para los norteamericanos en vidas y confianza en sus autoridades generó problemas altos y de trascendencia que incluso obligaron a que se despidiera a Nixon como presidente para dar nuevamente confianza y credibilidad a los medios de comunicación y en las acciones de la cámara de diputados y senadores como garantes de la legalidad y la democracia en Estados Unidos. Terminar con la guerra iniciada por los gobiernos norteamericanos por primera vez como un ejército derrotado y sin prestigio en el proceso, porque se fueron enterando por los medios de comunicación de las grandes matanzas y asesinatos cometidos por el temor de los propios soldados que no sabían ni en donde estaban ni por qué razones mataban o asesinaban o eran muertos en combates sin sentido, con acciones elementales de defensa en contra de las grandes movilizaciones tecnológicas y de armamento que se usaron por parte de los norteamericanos en actos de crímenes de guerra en esa parte del mundo. En fin, hoy empieza una nueva etapa que sin duda influenciará y contaminará a México si es que no sabemos entender lo que sucede y nos dejamos influir en esa guerra interna que no es nuestra, pero donde estamos involucrados lateralmente por el número de paisanos que ahora lucharán por su integración con el respeto que se merecen en su nuevo país, sin olvidar las raíces de donde siguen sus pasos, sus inicios y ombligos.