Lacras sociales • I
Alberto Vieyra G. martes 12, Ene 2021De pe a pa
Alberto Vieyra G.
[ Primera de dos partes ]
¿Qué son los partidos políticos, por los que muchos mortales se vuelven irredentos fanáticos, capaces de armar revueltas populares y hasta revoluciones? ¿Los partidos políticos son lacras sociales para dividir y enfrentar a los pueblos en sociedades aristócratas y plebeyas? ¿Hay algún partido en el mundo que pugne por la cohesión, es decir por la unión estrecha entre personas de todas las ideologías en los pueblos? ¿Detrás de los partidos políticos esta satanás, “el padre de la mentira” a quien la mayoría de los politicastros populistas rinden culto con sus políticas populistas, demagógicas, simulady de clara confrontación, teniendo como eje fundamental la satánica mentira? ¿Qué son los partidos políticos, sirven solamente para conseguir el poder, por el poder y al precio que sea? ¿De quiénes son los partidos políticos, habrá alguno en el mundo que sea del pueblo?
Éstas y muchas otras interrogantes en esencia me formulan mis tres lectores y radioescuchas y a las cuales daré respuesta en dos partes y aquí les voy con la primera.
Los partidos más antiguos del mundo tuvieron lugar en la antigua Grecia y Roma, pero fue en ésta donde la partidocracia marcaría una satánica división entre de la población ricos y plebeyos a través de los optimates y populares. En Roma, el emperador Julio César acuñaría aquella infame y ponzoñosa tesis de “divide y vencerás”, es decir la división y la confrontación del pueblo, como hoy ocurren en México. ¡Qué perverso!
En Grecia, los partidos políticos brotaban como hongos y había una interminable gama de opciones políticas, entre las que habrá que recordar al Movimiento Socialista Panhelénico, Nueva Democracia, Partidos comunistas de Grecia, Partidos políticos griegos de izquierda, Alianza Democrática, Alianza Liberal, Amanecer Dorado, Concentración Popular Ortodoxa, Drasi, El Río, Griegos Independientes, Izquierda Democrática Unida, MeRA25, Movimiento de Socialistas Democráticos, Movimiento para el Cambio, Olivo-Alineación Democrática, Partido Liberal, los Verdes Ecologistas y muchos más.
En la Edad Media saltarían a la fama los partidos jacobinos y los girondinos en la Francia revolucionaria.
En América, el Partido Obrero Socialista de Paraguay, el primero que se constituyó formalmente en 1883 en nuestro continente produjo mucho dolor al pueblo paraguayo con una dictadura de 35 años del general Alfredo Stroessner, aunque después de consumada la independencia de México y demás naciones latinoamericanas se desataría una encarnizada guerra entre liberales y conservadores, que militaban en su gran mayoría en las logias masónicas como fueron los yorkinos y escoceses. En el yorkino, que tiene su origen en el siglo XVI en Inglaterra y en él militaban los hombres de pensamiento avanzado y amantes de las libertades. En el Partido Escocés militaban los famosos conservadores, amantes de la monarquía y los gobiernos centralistas.
Los conservadores eran llamados también ´los pelucas viejas´ o ´los cangrejos´ y en ese partido militaban también los principales dignatarios de la Iglesia católica que al mismo tiempo eran gobierno, y su lucha contra los liberales era para seguir conservando sus privilegios en el gobierno durante los 3 siglos de coloniaje español y ello dio origen a encarnizadas revoluciones.
Basta recordar que en México se produjo la llamada Guerra de los 3 años entre 1858 y 1860, después de que Benito Juárez promulgará en la Constitución de 1857 las famosísimas Leyes de Reforma que marcaban la separación Iglesia-Estado. Dicha revolución, patrocinada por la Iglesia dio lugar a que en México hubiese 3 presidentes de la república al mismo tiempo: Juárez, Ignacio Comonfort de los Ríos y Miguel Miramón y Tarelo, hasta hoy el presidente más joven con 28 años.
Pero antes, ese divisionismo y enconada lucha entre liberales y conservadores dio como resultado que México fuese descuartizado por Estados Unidos en 1848 arrebatándonos 2 millones 547 mil 242 kilómetros cuadrados de nuestro territorio, el 62% de nuestro mapa original.
Como usted puede ver los partidos políticos siempre han sido de familias poderosas. Por eso me pregunto:
¿A dónde nos conducirá el divisionismo y encono que protagoniza Andrés Manuel López Obrador y su partido Morena, que no es del pueblo como se afirma, sino de un solo hombre? Aquí se lo diré mañana.