Las múltiples caras de la pandemia
¬ Augusto Corro miércoles 6, Ene 2021Punto por punto
Augusto Corro
Las múltiples caras de la pandemia se ven al analizar la conducta de la gente frente a la pandemia de la Covid-19.
Fue considerable el número de población que decidió irse de vacaciones, mientras miles de personas optaron por guardar el luto debido a la muerte de sus seres queridos.
Y claro, ahí están los contagiados en los hospitales en una lucha por salvar la vida. No olvidar a los trabajadores de la salud sin descanso desde que nos invadió el coronavirus.
Sólo que los funcionarios públicos mostraron, en la primera oportunidad, su falta de solidaridad con la sociedad que enfrenta no solamente a la Covid-19, sino que también lucha contra diversos problemas.
Por un lado, el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, se fue a vacacionar a las playas oaxaqueñas. Se olvidó de las recomendaciones de quedarse en casa que tanto pregona en sus comparecencias ante periodistas.
Quiso justificar su frivolidad con argumentos baladíes, absurdos. No fue convincente su explicación sobre el uso del cubrebocas.
Tenemos también el caso del líder de Morena, Mario Delgado, quien vacacionó en un centro turístico de Chiapas, donde se le vio sin cubrebocas, junto al presidente del Senado, Eduardo Ramírez.
Y como si no fuera suficiente con las imágenes frívolas de esos funcionarios públicos, el propio presidente López Obrador subió su video de beisbolista calentando el brazo.
Cada persona tiene la libertad de actuar conforme le dicte su conciencia. Esto no se encuentra a discusión. El problema real es la falta de solidaridad de esos líderes sociales con millones de personas que con toda clase de recursos combaten la pandemia.
Para los funcionarios vacacionistas, el coronavirus representa algo superficial en sus vidas. En caso de enfermarse tienen los medios económicos para el tratamiento que los salve. No les preocupa la Covid-19.
Uno de esos personajes, el dirigente Mario Delgado, según dijeron, ya padeció el contagio, pero no entendió la lección. Allá él.
Ahí están, pues, los privilegiados que se ríen de la pandemia, mientras miles de personas luchan en los hospitales para salvar la vida, otras cifras de miles de gente que perdió a sus seres queridos están de riguroso luto.
Médicos y enfermeras de diferentes hospitales pidieron a la sociedad solidarizarse en su lucha contra el Covid-19 y suplicaron a la gente que se quede en casa.
Esos trabajadores de la salud manifestaron encontrarse muy cansados y desanimados por la falta de empatía con su lucha. Lamentaron que la gente ignore el llamado de las autoridades a no hacer reuniones familiares o fiestas.
Ojalá y se escuche esa reflexión de médicos y enfermeras, porque son los propios funcionarios, como señalamos líneas arriba, son los principales protagonistas de conductas solidarias.
¿Quién o quiénes tienen el animo de irse a vacacionar, cuando miles de personas se encuentran formadas en espera de llenar su cilindro de oxígeno? ¿Quién se va a descansar cuando crece la incertidumbre de más decesos en México a causa del coronavirus? ¿Quién no reflexiona sobre la condición de los trabajadores de la salud que no han regresado a sus hogares luego de varios meses de pandemia?
En fin, los funcionarios sin compromiso social alguno se permiten el lujo de vacacionar en momentos demia cuyos daños reales apenas empiezan a asomarse.
Ya es tiempo de que se encuentren preparados los equipos de salud encargados de aplicar las vacunas. De gente entrenada en la administración del antídoto, con las listas de quienes van a recibir el antiviral.
Millones de personas que no queremos enfrentar los problemas burocráticos de no estar anotados en las listas, o de esperar más tiempo, porque las vacunas son para la clase política o para los influyentes. ¿Usted qué opina amable lector?
