Pelearse con el imperio
Alberto Vieyra G. martes 22, Dic 2020De pe a pa
Alberto Vieyra G.
La conseja popular reza que “hay 3 cosas con las que nadie se debe pelear en la vida: La cocinera, el pagador y el segundo frente”. La máxima debe tenerla muy en cuenta el Presidente de México, don Andrés Manuel López Obrador, quien a juzgar por su álgida carta de felicitación enviada después de 41 días de su triunfo al demócrata Joe Biden, sobre que la cooperación entre ambas naciones debe darse en el marco del “respeto a la soberanía de México”, eso nos habla de una inminente pelea con el imperio de las barras y las estrellas, es decir, con el nuevo patrón de AMLO en Estados Unidos. ¡Qué peligroso para México! ¿Pintar su raya del vecino país, convertido hoy en el principal socio comercial de México?… ¡Imposible!
El propio AMLO pensó en alguna ocasión que pelearse con el gobierno de EU era un mal negocio que podría desbarrancar su proyecto, pero eso lo pensaba cuando buscaba el “hueso” de la silla presidencial, ahora piensa diferente y cree que enfrentarse con el imperio le aportó magníficos dividendos populares y políticos al dictador cubano, Fidel Castro que desde el patio de enfrente encaro al tío Sam jalándole los bigotes.
En EU, que a través de sus agencias de inteligencia allá y acá espían al gobierno mexicano, han encendido los focos rojos y no tienen la menor duda de que la pelea de AMLO contra el imperio va en serio y ponen como ejemplo dos leyes empujadas por AMLO, a través de sus gatones legislativos, entre ellos Ricardo Monreal, las reformas a la Ley de Seguridad Nacional y de Banxico han sido tomadas en Washington como dos descontones de pocos amigos, uno a la mandíbula y otro debajo del cinturón contra el tío Sam.
Don Andrés Manuel López Obrador debería leer y releer todo lo relativo al espionaje y contraespionaje que EU y las principales potencias del orbe despliegan por el mundo para saber en qué pasos andan sus gobernantes. Tienen diagnósticos certeros e inconfesables y que en muchas ocasiones suelen utilizar para doblegar a sus enemigos. ¿Qué le saben los halcones de Washington a AMLO, que no sepamos los sencillos habitantes de México? ¿Seguirán pensando en gringolandia que el infame anuncio ese de “abrazos y no balazos” contra las mafias criminales, equivale a una alianza entre el gobierno amlista y las mafias nacionales e internacionales?
La primera legislación empujada por AMLO es interpretada en los yunaites como un gancho al hígado contra las agencias de inteligencia norteamericana que pululan en México, principalmente la CIA, el FBI y la DEA, éstá última intocable. La legislación de AMLO pretende regular a esas agencias, pero el descontón parece a todas luces un ajuste de cuentas con la DEA, por haber detenido, sin decir agua va en EU al general mexicano Salvador Cienfuegos, pero también ven que se trata de limitar las acciones de la cooperación bilateral entre México y Estados Unidos para darle manga ancha al crimen organizado y eso inquieta de sobremanera a los gringos.
Y no se diga la Ley Banxico que pretende acabar con la autonomía del Banco de México y convertirlo en el lavadero más gigantesco del mundo, que parece tener dedicatoria para un banquero mexicano de nombre Ricardo Salinas Pliego y otro de carácter internacional llamado Moisés Cosío Espinosa, investigado por Estados Unidos, y allá se asegura que también en México, un auténtico lavador de dólares que paga solamente al SAT unos pinchurrientos impuestos.
En fin, que la inteligencia norteamericana le ha aportado al gobierno de los yunaites mucha tela de donde cortar que tiene que ver con la pelea que AMLO ha iniciado contra el imperio norteamericano, lo cual para los que dicen saberlo todo resulta una empresa francamente demencial.