Balance Bike de Prinsel, en la lista de regalos de Santa Claus y los Reyes Magos
Espectáculos miércoles 9, Dic 2020
- La bicicleta, más que un juguete, es una herramienta para entender los movimientos del cuerpo y la convivencia con el entorno
- Con la Balance Bike de Prinsel estimularás la maduración de las estructuras nerviosas y musculares de tu peque, que colaborarán en su postura
Aunque la bicicleta es considerada por los padres como un juguete, en Prinsel sabemos que acercar a los niños a este vehículo representa una gran herramienta para su sistema motriz, incluso con la facultad de fortalecer grupos musculares y estructuras nerviosas, que les darán una memoria de movimiento para el resto de su vida.
Aunque en promedio es a los 5 ó 6 años cuando los niños pueden conducirse por sí solos en la bicicleta, es a partir de los 2 años que pueden entrenarse con la Balance Bike, la cual además de ser ligera y apta para la altura de los peques de esta edad, no cuenta con pedales y cadena para que sean los chiquitos quienes regulen su equilibrio sin que éste se comprometa con la velocidad.
“A través del uso de una bicicleta los niños se descubren a sí mismo en movimiento y también reconocen su entorno, les favorece el desarrollo psicomotor, además de estimular la maduración de estructuras nerviosas y musculares. Con una bicicleta se adquiere movimiento y coordinación en brazos y piernas, esto para lograr el equilibrio”, explica la doctora Sandra Ferra Martínez, certificada por el Consejo Mexicano de Ortopedia y Traumatología, A.C., además de ser miembro de la Federación Mexicana de Colegios de Ortopedia y Traumatología, A.C. (FEMECOT).
Si bien el desarrollo psicomotor es un proceso continuo de maduración que inicia cuando los bebés cargan su cabeza, aprenden a sentarse, a gatear y posteriormente a caminar, si en este periodo de evolución incluyes la bicicleta, tus hijos tendrán más habilidades.
“Entre el año y medio o antes de los dos años de edad los niños pueden ir en una bicicleta entrenadora. La ventaja de usarla antes de pasar a una de pedales o de tres rueditas, es que tendrán que impulsarse para hacer equilibrio y movimiento, lo que pondrá a trabajar ciertos grupos musculares, además de su coordinación. Para andar en bicicleta y no caernos debemos además adoptar una buena postura; es decir, que a través del juego crearán un hábito bueno y generarán memoria en su cuerpo de una posición saludable”, explica la doctora Ferra.
Con la Balance Bike de Prinsel los niños fortalecen los músculos de sus piernas, principalmente muslos, cuadriceps y pantorrilla; además de darle fuerza a sus rodillas y cadera. La experta recomienda una práctica diaria de por lo menos 15 a 20 minutos, tres veces a la semana.
Lo que hagas por tu peque a temprana edad redunda en resultados positivos para su crecimiento. “Su desarrollo es una tarea progresiva y exponencial, la cual queda como memoria para el futuro. En edad adulta se notará en la salud de sus huesos, articulaciones y músculos”, recalca la especialista.
Así que con miras a divertirte con tus hijos y darles mayores herramientas para su desarrollo, considera que las bicicletas de entrenamiento son una clave para ayudarles y dejarlos que reconozcan la velocidad y la aventura, a su ritmo.