Pío y Felipa, la familia incómoda de AMLO
Guillermina Gómora Ordóñez martes 8, Dic 2020Caleidoscopio
Guillermina Gómora Ordóñez
Aún no se diluyen los efectos del misil que pegó en la línea de flotación del presidente Andrés Manuel López Obrador por la difusión del video donde su hermano Pío es captado recibiendo bolsas con efectivo de manos de David León, ex director de Protección Civil federal y ya le salió otra pariente incómoda con habilidades de Rey Midas.
No cabe duda que la falta de transparencia, las corruptelas, el consabido amiguismo y los negocios al amparo del poder no son cosa ajena en el gobierno lopezobradorista. Pese a que el Presidente se afana en tratar de convencer a la opinión pública de que no son “igual que los anteriores”, diversos hechos documentados que han salido a la luz pública, demuestran lo contrario.
Hace dos semanas, la asociación civil, “Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad”, dio a conocer en la investigación titulada Corrupción en Pemex: en casa del herrero azadón de palo (bit.ly/3ouCQS1) que “En Pemex no se predica con el ejemplo. La información oficial revela: adjudicaciones directas, simulación en las licitaciones, contratación con empresas fantasma y preferencia por empresas de reciente creación”.
Graves acontecimientos para la empresa del Estado que dirige su mejor amigo, Octavio Romero Oropeza, el ingeniero agrónomo que reportó una pérdida de 562,250 millones de pesos en la BMV durante el primer trimestre del año; 62% superior al descalabro de 2019 que fue de 346 mil millones de pesos. Un desastre.
Otro caso de influyentismo, es el de su cuñada Concepción Falcón, esposa de Ramiro López Obrador, involucrada en el presunto desfalco al municipio, de su tierra natal, Macuspana, Tabasco, por 223 millones de pesos y que provocó que el gobierno municipal fuera desconocido por el Congreso local luego de que confirmara el faltante.
El pasado jueves, llegó otro obús lanzado por Carlos Loret de Mola, desde el sitio electrónico Latinus.us. Se trataba otra vez de un familiar muy cercano. Sucede que la prima hermana de AMLO, Felipa Obrador Olán, ha sido beneficiada en los dos años de la administración morenista con contratos por más de 365 millones de pesos en Petróleos Mexicanos. Revelado el favoritismo, al Presidente no le quedó de otra que ordenar se investigara el asunto.
Con una extraña celeridad, Pemex emitió un comunicado cantinflesco el sábado reciente donde admite que Litoral Laboratorios Industriales SA de CV, la empresa de Felipa Obrador, participó en la actual administración en cuatro licitaciones de las que en dos se le asignaron contratos.
“El servidor público responsable de verificar el contenido de las propuestas se percató que en la “Manifestación de Vínculos de los Particulares” estaba plasmado el nombre de la C. Felipa Guadalupe Obrador Olan. Lo anterior fue reportado por el Director General de Pemex al Presidente de México, la respuesta fue categórica en el sentido de que bajo ninguna circunstancia se permitiera la asignación de contratos a familiar alguno. En atención a la instrucción presidencial, se advirtió verbalmente a la C. Felipa Guadalupe Obrador Olán que no se le adjudicaría el contrato y fue conminada a no continuar interviniendo en las licitaciones de Pemex”. Señala el comunicado.
Además, de manera torpe, Pemex reparte culpas a quien no las tiene, cuando justifica de forma aldeana: “Algunas notas periodísticas que dan cuenta de estos contratos responden a una clara intención de dañar la reputación del gobierno. Desdeñan avances significativos y magnifican escándalos”. Demasiadas maromas para tratar de disculpar un claro favoritismo a la prima de AMLO.
En fin, más allá de las pifias de Pemex y las irrefutables evidencias de cómo benefician a la familia presidencial, el hecho sustantivo es que, al igual que en otros sexenios, hay parientes “incómodos” muy desbocados en la ambición insana de llenarse de dinero los bolsillos, voracidad que no detendrá un oficio enviado desde Palacio Nacional.
Hoy, está visto, el presidente López Obrador tiene frentes abiertos muy complicados que lo están desgastando con celeridad: pandemia, inseguridad, crisis económica, desempleo, presión política y polarización social; ahora, hay que agregar el apetito monetario de algunos de sus familiares que le pegan donde más le duele: su combate en contra de la corrupción. Una bandera que parece desgarrarse.
VERICUENTOS
¿Monreal vs la DEA?
Vaya tarea que le encomendaron al coordinador de los senadores de Morena, Ricardo Monreal. El presidente López Obrador envió una iniciativa al Senado para modificar la Ley de Seguridad Nacional, que regula la actuación de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) y otras corporaciones de seguridad extranjeras que operan en México. Rapidito, Monreal publicó un decálogo en su página web, dice, que busca evitar “nuevas amenazas a la estabilidad y gobernabilidad” del país, así como impedir que se “vulnere la soberanía”. Casualmente la propuesta, llega un mes después de la detención en Estados Unidos del exsecretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos. ¿Coincidencia?