Fenómeno del “chapulineo” en el Poder Legislativo
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 30, Nov 2020Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
- Diputados quieren chiflar y comer pinole a la vez, al dictar de su reelección
Nos dicen que a la fecha han solicitado licencia para separarse de sus cargos seis integrantes de la Cámara alta y los que se han separado aspiran a ser candidatos para gobernar las entidades que hasta hace unos días representaban en el Legislativo. En sentido contrario en la colegisladora o sea los diputados federales, sin ningún rubor, aprobaron en la semana que desde sus encargos actuales pueden aspirar a ser reelectos, lo que en otras palabras significará que desde la tribuna más alta del Congreso de la Unión podrán hacer campaña política sin ser sancionados.
Unos con licencia y otros desde su curul, lo cierto es que en cualquier caso una vez más la ciudadanía está frente a un fenómeno ya muy común en tiempos electorales que se conoce como “chapulineo”, donde a los parlamentarios ya no les importa si hay temas importantes en la agenda legislativa, ni tampoco les importa el voto de confianza que para ello depositaron los ciudadanos en las elecciones pasadas, lo único que les interesa es el brinco político siguiente.
Entre los senadores que han solicitado licencia para separarse de las funciones legislativas están los casos de Félix Salgado Macedonio, quien por segunda vez, ha encendido veladoras y aspira a ocupar la silla del Ejecutivo estatal en su natal Guerrero. Para el gobierno de Nayarit se candidatea Miguel Ángel Mavarro y tiene días practicando los pasos de campaña y ya sin el compromiso de los temas legislativos. Para Nuevo León se han apuntado dos senadores, Samuel García y Víctor Oswaldo Fuentes y al parecer ambos quieren recoger los escombros que les está dejando el gobernador que llegó con la bandera de independiente y que hasta la fecha ni fu ni fa. Marco Antonio Gama Basarte es otro de los legisladores de la Cámara alta que han pedido licencia y se la han otorgado, y de él se que su coranzoncito late por San Luis Potosí. Otro “chapulín” de la política es Gustavo Madero, quien el viernes pasado el pleno del Senado le concedió permiso para separarse del Legislativo porque, al parecer, en Chihuahua ve un futuro político más promisorio. Y los que faltan por dar el salto.
El caso de los diputados federales es muy diferente, ellos no tendrán -eso dicen y eso aprobaron- que separarse del cargo legislativo y desde San Lázaro intentarán estrenar la figura de la reelección, y cuando se dice intentarán, es literal, porque aunque la reforma constitucional de 2014 les otorgó ese derecho, hasta por tres periodos más para ocupar su actual curul, será la ciudadanía quien al final decida si les refrenda el voto de confianza depositado en ellos en julio de 2018, así que quienes se sientan seguros con el deber cumplido, pues no tendrán problema a la hora de buscar el voto, pero quienes no hayan vuelto los ojos para los distritos en los que resultaron electos será mejor que ni lo intenten, porque en esos casos, en lugar de un salto para adelante, sus intentos chapulinescos podrían ser de brincos hacia atrás.
Lo anterior viene a colación porque hace unos días el pleno de la Cámara de Diputados aprobó sus propias reglas para regular el proceso que tendrán que acatar sus legisladores que busquen reelegirse en 2021 y en las que les permiten hacer campaña sin la necesidad de separarse de su curul y además, se aclara en el documento aprobado, podrán recibir integras sus dietas económicas si así lo desean. Para eso en mi pueblo hay un dicho que señala que no se puede comer pinole y chiflar al mismo tiempo, es decir se aconseja no hacer dos cosas a la vez.
En fin, desde varios sectores de la población se pide a los diputados guardar la calma en sus ímpetus chapulinescos y les recuerdan que ellos no pueden ser juez y parte en el asunto de las leyes secundarias que deben regir el tema de la reelección legislativa, por lo que deben ser más serios y esperar a que sea la autoridad judicial o electoral las que den la última palabra al respecto. Que conste.
VA MI RESTO.- Hay que recordar que en la reforma al artículo 59 constitucional, hecha en 2014, se estableció que: “Los Senadores podrán ser electos hasta por dos periodos consecutivos y los diputados al Congreso de la Unión hasta por cuatro periodos consecutivos. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que los hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato”.
Por tanto, en el proceso electoral de 2021 corresponderá a los diputados federales probar suerte con la figura de la reelección legislativa. Algunos lo lograrán y otros no, pero los segundos como premio seguir legislando, al menos hasta que concluya la LIV Legislatura, y hasta ahí, porque como veo doy.