El juego de pantallas de AMLO, cansa
Adriana Moreno Cordero viernes 20, Nov 2020La Retaguardia
Adriana Moreno Cordero
- Debate de cannabis, protagónicos Batres, Martínez Cázares y Malú Micher
El expediente general Salvador Cienfuegos lo utilizó a lo largo de toda la semana el presidente Andrés Manuel López Obrador, para cubrir los escándalos de corrupción en los que han incurrido distinguidos miembros de su gabinete, el problema, es que ese absurdo juego de pantallas, cansa. El caso es que el ex titular de la Secretaría de la Defensa Nacional durmió en su casa de Ciudad Satélite y libre de toda acusación, mientras que varios medios consignaron, por ejemplo, que su consejero jurídico, Julio Scherer, presuntamente no habría declarado un departamento con un valor de 1.7 millones de dólares en Nueva York.
Ahí está también la empresa fantasma, a la que presuntamente estaría ligado el vocero Jesús Ramírez Cuevas, y otras lindezas en las que no se pueden olvidar los cuantiosos bienes de su flamante director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett, así como del matrimonio que conforman la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval y John Ackerman, todos exculpados por el inquilino de Palacio Nacional que un día sí y al otro también, asegura que en esta llamada Cuarta Transformación, ya se acabó con la corrupción, pero la realidad le tapa de forma tajante, la boca.
En otro tema, poco después de las cinco de la tarde, con 82 a favor 18 en contra y 7 abstenciones, es decir un total 106 votos, se aprobó en lo general y los artículos No Reservados la Ley Federal para la Regulación del Cannabis.
Una vez aprobada, en la tribuna, se extendió una enorme manta en la que se leía: “No a la Criminalización, Si a la libertad”, que permaneció por algunos minutos. Por el Salón de Plenos circulaban algunas macetitas de mariguana y de ahí, continuaron las reservas.
La discusión en torno al cannabis, calificada como una sesión histórica debatida ayer en el Senado de la República, apuntaba a que finalmente se aprobaría, sin embargo, algunos senadores, especialmente de Morena, hicieron el ridículo y exhibieron todo su protagonismo. Por ejemplo, mal, muy mal se vio el senador “del tóper rojo”, Martí Batres en compararse con personalidades de la estatura de la estatura de José Revueltas o el científico Carl Sagan; lo hizo entre líneas, pero sí “coló” que él, al igual que los mencionados, votaría a favor de la regulación del cannabis.
Y bueno, ni qué decir del senador Germán Martínez Cázares, quien evidenció que ya es más morenista que Morena. Durante su participación en la tribuna dijo: “Esta ley garantiza a todo mexicano adulto el derecho a mariguanearse, y yo vengo a reivindicar la soberanía del individuo, a reivindicar un país en el que se transite de una cultura prohibicionista a una cultura que salvaguarde esa soberanía del individuo: el derecho de cada persona a formar libérrimamente sus convicciones ideológicas y a conducir su vida sin estorbos, de acuerdo a sus convicciones ideológicas”.
Antes, senadoras morenistas como Malú Micher, salieron del Senado para hablar con los grupos instalados que pugnaron: “derechos humanos para los mariguanos” y les pidieron una maceta de la hierba para que las legisladoras las colocaran en sus respectivos escaños a lo que los manifestantes se negaron. Ahora sí que sólo para la foto, no; igual que como respondió el presidente López Obrador cuando le preguntaron que por qué no iba a Tabasco a apoyar a sus paisanos inundados e igualmente dijo no, porque no se iba a mojar sólo para la foto. Menuda “quemada” que se pusieron las senadoras de Morena.
A la hora de los posicionamientos, a nombre del PRD, el senador Miguel Ángel Mancera lo calificó como un buen inicio; Dante Delgado, dijo que Movimiento Ciudadano está por que se tomen las mejores decisiones para México. La priísta Silvana Beltrones, coincidió en que se daba un paso histórico, al tiempo que el coordinador de la fracción del PAN en la Cámara Alta, Damián Zepeda, se pronunció en contra del dictamen.
Lo que no ha dejado de llamar la atención, es que el uso médico, farmacéutico y paliativo del cannabis no se contemplara en la iniciativa y a la hora de las reservas el senador albiazul Martín del Campo explicó que estos usos no se contraponen con lo dispuesto con la Ley General de Salud, se desechó. Ciertamente, se requiere un proceso de regulación más claro, porque pareciera que quienes apoyan la iniciativa, no la tomaron con la dimensión requerida.
Municiones
*** La solicitud que hiciera el presidente López Obrador en su gustadísima conferencia de prensa para que las cerveceras se instalen en zonas cercanas al Río Grijalva y Usumacinta y no en el norte del país, que porque ahí escasea el agua, nos recuerda cuando el tabasqueño organizó una más de sus consultas “patito” para evitar que se pusiera la cervecera Constellation Brands. Apenas en marzo pasado, la ocurrencia del Ejecutivo frenó la operación de dicha cervecera en Mexicali, Baja California, que tuvo una inversión de mil 500 millones de dólares y que bloqueó con apenas 27 mil 973 votos, porque así es la participación en las consultas “patito” del tabasqueño. Como se recordará, el gobierno federal decidió no dar los permisos correspondientes mientras que casualmente y por el contrario, López Obrador apoyó con todo el proyecto de cerveza artesanal de sus hijos. ¡Vaya forma de limpiarles el camino!, y como ahora quiere más, pues sale con que se construyan plantas cerveceras en su tierra, que por cierto, sigue inundada y la ayuda, escasísima y a cuentagotas.
*** Definitivamente, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, no las trae todas consigo. Resulta que al momento de escribir estas líneas, se encontraba evaluando si la “ley seca” para la capital de la república, operaría al mismo tiempo en las 16 alcaldía o si mejor, se repartía en dos, es decir, ocho primero e igual número después. Se supone que esta sesuda medida sería para contrarrestar las fiestas que se llevan a cabo especialmente los fines de semana y evitar de esta manera los contagios. El problema es que para comprar bebidas alcohólicas, no habría más que trasladarse a una demarcación en la que estuviera permitida la venta de éstas y, si fuera el caso de que se aplicara la “ley seca” en toda la CDMX, la jefa de gobierno no podría contener las manifestaciones de rechazo de parte de los empresarios, que ya no pueden soportar la crítica situación en la que viven, al tiempo que la funcionaria, sigue capoteando con el tema de que la capital de la república continúa en semáforo naranja, pero con algo más que un pie en el rojo. ¡Qué tal!