En lo electoral, el país se divide en dos bloques
Miguel Ángel Rivera miércoles 11, Nov 2020Clase Política
Miguel Ángel Rivera
De antemano se anticipaba que las elecciones del año venidero serían sumamente competitivas, pero al paso del tiempo, la sentencia “estás conmigo o contra mí” ha logrado que el país esté prácticamente dividido en dos.
Lo que está en juego, ya se sabe, son más de 21 mil cargos de representación popular, entre los cuales destacan 15 gobiernos estatales y el control de la Cámara de Diputados, que se ha convertido en la “joya de la corona”, pues allí se decidirá si se consolidan las reformas emprendidas por el gobierno de la llamada Cuarta Transformación.
Por un lado, el partido en el gobierno, Morena, tiene ya asegurada su alianza con el PT, PVEM y PES, que recuperó su registro como Partido Encuentro Solidario. Cabe aclarar que a este bloque se deben agregar otras dos organizaciones que también recientemente obtuvieron el registro como partidos, Redes Sociales Progresistas y Fuerza Social por México, aunque por ley deberán presentar candidatos propios, sin derecho a integrar alianzas.
Del otro lado, parece consolidarse lo que hasta ahora se ha denominado Bloque Opositor, integrado por el PAN, PRI, PRD y MC, que hasta ahora ha tenido presencia sólo en las cámaras del Congreso de la Unión, pero que se alista a unir fuerzas en el terreno electoral, con el respaldo de casi 500 organizaciones civiles, que también por ley no pueden participar por cuenta propia en los comicios.
La consolidación de la fuerza de oposición se pudo apreciar ayer, en un encuentro organizado por agrupaciones ajenas a los partidos que se unieron bajo la denominación “Sí por México”, que aglutina a 500 organizaciones de la sociedad civil interesadas en construir una nueva mayoría democrática de cara a las elecciones de 2021, junto con los partidos del Bloque Opositor, los mencionados PAN, PRI y PRD.
La idea es empezar la construcción de “un gran frente” ciudadano que utilice como vehículo a estos partidos políticos para construir alianzas políticas, electorales y ciudadanas que entre otras cosas abanderen candidaturas con personajes de renombre de la sociedad civil para enfrentar a Morena y sus aliados en los comicios del próximo año a fin de arrancarles la mayoría legislativa.
“Tienen nuestro voto, pero no es un cheque en blanco, no queremos volver al pasado, pero tampoco quedarnos donde estamos, abran sus puertas al talento ciudadano, hoy inicia una nueva etapa, llegó la hora de los ciudadanos”, dijo la periodista ex priista Beatriz Pagés, una de las voceras de “Sí por México” a los dirigentes de los partidos políticos presentes en esa asamblea.
Allí se explicó que la agrupación convocó a todos los partidos políticos del país para comprometerlos con la agenda de 6 puntos que proponen, cuyo cumplimiento vigilarán después de los comicios del siguiente año. Sin embargo solo acudieron al llamado PAN, PRI y PRD.
“A Morena, PVEM, PT y PES, sus partidos aliados, no les interesó nuestra agenda, le dieron la espalda a la sociedad”, acusó Pagés, que de esta manera definió los dos frentes que chocarán en junio de 2021 para definir el futuro de la nación.
“Nos queda muy poco tiempo”, fue el punto central de la asamblea en la que se expuso el proyecto de lograr el apoyo mayoritario de la sociedad, mediante un sistema ya muy conocido, pero que tiene éxito cuando realmente se comprometen sus integrantes: que cada uno de los miembros de esta alianza ciudadana convoque a 10 personas y las convenza de votar para construir esta mayoría democrática. Como primera acción, algo elemental, recordarles a los convocados la importancia de cuidar muy bien su credencial de elector.
En respuesta a las propuestas de las organizaciones ciudadanas, el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, propuso poner el interés de México por encima de los intereses partidistas para generar un despertar social que sea capaz de derrotar el egocentrismo del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Se trata de que la sociedad se vuelque a las urnas en 2021 para construir esa mayoría democrática (…) no podemos estar sujetos al capricho de un solo hombre que no se conduce como hombre de Estado, que su actuación es propia de un autócrata”, aseveró.
El dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, pidió dejar de lado la polarización y trabajar en proyectos para conquistar un mejor México.
En su participación en la asamblea de “Sí por México”, el dirigente tricolor hizo un llamado a dejar de lado la polarización y a convocar al diálogo, a la reconciliación nacional y reconoció a las organizaciones de la sociedad civil como actores fundamentales para conquistar “ese México seguro, sin corrupción y donde la ciudadanía tenga acceso a la justicia pronta y expedita; ese México sostenible y desarrollado, con menores desigualdades y mayores oportunidades”.
El dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, destacó también la necesidad de construir una amplia alianza política y ciudadana para lograr esa nueva mayoría democrática e impedir que Morena siga destruyendo a México.
“Debemos evitar que Morena siga causando daño e impedir que logre conquistar otros territorios en las próximas elecciones”, advirtió Zambrano, quien precisó que no se trata de un complot ni una estrategia contra una persona, en este caso López Obrador, sino por el bien del país y los mexicanos.
Aprobado en principio el criticado presupuesto federal para 2021
Las diferencias fundamentales acerca del proyecto de nación se evidenció en las polémicas en torno al presupuesto federal para 2021, que fue aprobado a toda prisa en comisiones de la Cámara de Diputados para tenerlo listo para empezar a revisarlo ayer mismo en el pleno.
Las diferencias en torno a la mejor forma de aprovechar el presupuesto federal derivó en un debate en donde de nueva cuenta se manifestaron los dos bloques políticos en que se ha divido el país.
Por un lado Morena y sus aliados del PT, PES y PVEM, que desecharon todas las inconformidades e impusieron su amplia mayoría para aprobar el presupuesto en todas sus etapas, apenas con cambios mínimos respecto proyecto presentado por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Del otro lado, con rechazo total al proyecto del gobierno de la llamada Cuarta Transformación estuvieron las bancadas opositoras del PAN, PRI, y PRD, a las que se sumó la de Movimiento Ciudadano, que forma parte de este frente en el terreno legislativo, aunque todavía no se suma en el aspecto electoral.
En defensa del proyecto oficial, el ex dirigente del desaparecido PSUM y ahora subcoordinador del grupo mayoritario de Morena, Pablo Gómez, adujo que la política económica del Ejecutivo federal defenderá la política social, el equilibrio fiscal y no optar por el endeudamiento.
Como es tradicional en su bloque, Gómez Álvarez culpó de todos los males del país a los gobiernos anteriores y aseguró que la llamada Cuarta Transformación se ha preocupado por mejorar los salarios, becas y otros programas sociales.
Durante la discusión en comisiones, el ex presidente del PRI, Enrique Ochoa Reza, denunció que la bancada de Morena y aliados “esta haciendo el trabajo sucio” porque no contempla recursos para la vacuna contra el Covid-19, reduce el gasto a la CFE y a los órganos autónomos.
Los legisladores de oposición recordaron de manera reiterada que los “morenos y asociados” no atendieron ninguna de las quejas expresadas por los gobiernos de los estados y de los municipios, ni de las organizaciones de la sociedad civil, a pesar de que simularon atenderlas y hasta convocaron a un supuesto “parlamento abierto”, cuyas conclusiones no fueron tomadas en cuenta.
Al iniciarse la revisión del proyecto de presupuesto en el pleno de la Cámara, los dos grupos antagónicos realizaron toda clase de manifestaciones, subieron en grupos a la tribuna y exhibieron carteles con leyendas para respaldar sus argumentos.
Por ejemplo, cuando abordó la tribuna Antonio Ortega Martínez, del PRD, se desplegaron dos grandes mantas, una de las cuales decía que el presupuesto es “un ataque al federalismo y a la República” y la otra sostenía que el proyecto implica “agresiones a los estados y los municipios”.
A final de cuentas, se esperaba una larga jornada al cabo de la cual se impondría a la mayoría y el presupuesto quedaría aprobado en el curso de la noche o, de ser necesario, se decretaría un receso para reanudar el debate hoy, miércoles.