Y dale con cuidar la investidura
Eleazar Flores miércoles 28, Oct 2020Espacio Electoral
Eleazar Flores
EL LENGUAJE-. Cada que al padre de la Cuarta Transformación se le complica responder a cuestionamientos importantes, como los planteamientos del bloque de los gobernadores federalistas, sale con su gastado discurso que “hay que cuidar la investidura presidencial”.
Decir “fuchi, caca”, o “uy uy uy miren que estoy temblando” o algo parecido, algo de lo más reciente, parece que en nada se parece a cuidar la investidura presidencial, ni siquiera en el lenguaje.
Desde siempre cuando aspirante, candidato o “presidente legítimo” y mucho después aún en la oposición, Andrés Manuel López Obrador nunca se caracterizó por la finura de su retórica, más bien por todo lo contrario, a lo que a nivel doméstico el tiempo nos acostumbra hasta por fuerza, pero imagine la opinión de hablantes del “castilla” de otros países, seremos el hazme reír.
Mejor dicho, será el padre de la Cuarta Transformación el hazmerreír de lectores, radioescuchas pero sobre todo televidentes de centro y Sudamérica, que gracias a los avances de la tecnología se enteran casi al instante de los prolongados discursos del tabasqueño, prolongados todos, salvo el de sólo cuatro minutos del pasado fin de semana en el norte del país, gracias al clima, se dijo.
De muchos sexenios a la fecha, nuestros mandatarios no se han caracterizado por ser excelentes, ni siquiera buenos tribunos. Lo de tribunos podría limitarse al estilo de hablar, dejando para un mayor análisis el contenido de sus discursos. La solidez cultural y presencia física ayudaron a López Mateos y López Portillo. Sin llegar a mandatarios, Muñoz Ledo, Reyes Heroles y Colosio.
Parecen no lejanos, sino lejanísimos, aquellos tiempos que ¿volverán?, lo dudo, por lo que cuando menos en los cuatro años que le restan a esta administración sigámonos acostumbrando a la lenta retórica del padre de la Cuarta Transformación, en cuyos contenidos más vale no meterse por aquello de que hay “otros datos”, limitémonos al estilo de su parlamento.
Hay muchos escenarios de la retórica presidencial que en estos últimos dos años no creó, pero si puso en mayor uso palabras quizá olvidadas por algunos como “cajamanes, testerear, fifís” y demás. Lo de conservadores, neoliberales y otros adjetivos calificativos ni ocuparnos pues de hacerlo, este espacio pasaría a formar parte de los “medios conservadores” añorantes de prebendas.
PROBLEMAS REALES-. Lo que sí afecta a varios puntos cardinales del país ante la indiferencia del gobierno federal es el bloqueo de vías férreas en Michoacán, por casi un mes, así como en Sonora, y de la toma de casetas en varias autopistas ni hablar, es el pan de cada día.
Las grandes empresas resienten pérdidas millonarias.