Escudos ciudadanos
¬ Claudia Rodríguez viernes 19, Feb 2010Acta Pública
Claudia Rodríguez
Ese discurso del señor Felipe Calderón donde finca a la participación ciudadana como arma importante en contra de la delincuencia organizada no es ninguna novedad, pero siempre que le escucho tocar el tema, me pregunto si antes que nada, el Estado ante este flagelo criminal y cualquier otra situación de conflicto, debería contemplar más que la participación de los gobiernos, la responsabilidad total de otorgar a los mexicanos todos, no sólo a los ciudadanos, un ambiente seguro para el desarrollo de sus actividades.
Nadie puede negar que desde que se inició esta “guerra en contra del narcotráfico” durante la administración calderonista, el mismo señor Calderón ha señalado que la clave para ganar esta guerra está en la participación de la sociedad civil, particularmente en los lugares en donde la criminalidad tiene el soporte de la sociedad y en donde se agudizan los problemas para la seguridad misma.
Y son varias las voces que se plantean si la estrategia de ataque al crimen organizado ¿no está mal basada? ¿Qué no es la legalidad del Estado, antes que la participación ciudadana?
Ahora que el gabinete calderonista se ha reunido en Ciudad Juárez tras la masacre en Villas de Salválcar y por supuesto por las declaraciones desde Japón del señor Felipe Calderón en donde adelantó que seguramente las muertes de varios jóvenes fueron resultado de enfrentamientos entre pandillas de delincuentes, queda claro que el Estado no quiere reconocer su gran responsabilidad en el hecho de que Juárez está dentro de las ciudades más violentas a nivel mundial.
Felipe Calderón advirtió el día miércoles de esta semana frente a la comunidad de Ciudad Juárez, que los ciudadanos de ese territorio tienen una gran responsabilidad de lo que ahí sucede pues las fuerzas federales no son las detonadoras del problema de la violencia que ahí se vive, ya que éstas no llegaron ahí antes del problema exacerbado de violencia delincuencial, sino como respuesta a la misma. ¿?
La conclusión es que los mexicanos de a pie, seguiremos siendo escudos de la lucha violenta entre sicarios y gobierno por el asunto del narcotráfico. El mismo Calderón dijo a principios de su sexenio que esta tarea costaría muchas vidas y sangre. Está más que comprobado su dicho, sólo que el gran número de abatidos o son narco menudistas, inocentes o elementos de la fuerza pública, mientras que los mafiosos con nombre y apellido que han sido capturados o muertos, son los menos. Todos somos Juárez, estoy de acuerdo y lo comparto. Pero ¿de verdad todos somos responsables de lo que ahí sucede?
Acta Divina…El miércoles de esta semana desde Ciudad Juárez, Chihuahua, el presidente Felipe Calderón advirtió que el aumento de la violencia es una reacción de los criminales al plan de combate del tráfico de drogas y afirmó que, en parte, lo que llevó a Juárez a esta situación fue la pérdida de valores elementales e indicó que los modelos a seguir entre algunos jóvenes fueron aquellos que incluyen armas, mujeres, dinero y autos.