Extinción de fideicomisos, salto al vacío
Guillermina Gómora Ordóñez martes 6, Oct 2020Caleidoscopio
Guillermina Gómora Ordóñez
Reza la sabiduría popular que “en arca abierta, el justo peca” y al gobierno de Morena le urge meter mano a la bolsa de los 68 mil millones de pesos, que están asignados a los 109 fideicomisos que pretenden desaparecer los legisladores morenistas en la Cámara de Diputados.
Bajo la justificación de reorientar recursos para atender la crisis sanitaria y económica que dejará la Covid-19, Mario Delgado, coordinador de los diputados de Morena, encabeza la desvalijada a los fideicomisos, cuyos fondos están etiquetados para atender desastres climatológicos, becas deportivas, de investigación científica, periodistas, defensores de derechos humanos, así como producciones cinematográficas, entre otros.
Recordemos que el presidente Andrés Manuel López Obrador insistió en su promesa de cancelar fideicomisos, según él, “usados para ocultar fondos públicos”. Asegura que lo que se busca es entregar los apoyos de manera directa a beneficiarios y evitar que haya “aviadores”.
Si así fuera, si los fideicomisos mostraban ineficiencia debieron corregirse sus mecanismos de control, no extinguirlos para facilitar su saqueo. Lo cierto es que el Ejecutivo dispondrá de más de 68 mil millones de pesos sin mecanismos ni controles a un año de las próximas elecciones.
Una muestra de este galimatías económico-legislativo es el asalto que pretenden perpetrar en contra del Fondo de Salud para el Bienestar, aunque el morenista Mario Delgado habría dicho que no se podría extinguir porque requeriría de otra reforma legal, uno de sus compañeros de bancada fue instruido a presentar una reserva para integrarse al dictamen.
No hay excepciones, el gobierno federal ordenó que desaparezcan todos los fideicomisos, el arca está abierta y la tentación hace la ocasión.
No olvidemos que, en agosto pasado, el secretario de Hacienda, Arturo Herrrera, informó que se “acabaron los guardaditos” y en este tema no ha dicho ni pío, pese a que los recursos, dicen, van a ir a parar a la Tesorería de la Federación.
Bajo la bandera del combate a la corrupción, Morena y sus aliados en San Lázaro buscan llevar como ofrenda a Palacio Nacional 68 mil millones de pesos. Al respecto, René Juárez Cisneros, coordinador de los legisladores del PRI, considera necesario si “castigar las desviaciones y preservar lo que funcione, es lo que recomienda la lógica” y advierte que es “una decisión equivocada tratar de tapar un hoyo destapando 109”.
Sin embargo, María Elena Álvarez-Buylla, directora general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, aseguro que “la desaparición de los fideicomisos no representa una disminución de recursos para ciencia, tecnología e innovación”. Argumentó que no comparte Liliana Quintanar, doctora en química e investigadora del Cinvestav, quien envió una carta a título personal a la bancada de Morena en la Cámara de Diputados.
La doctora Quintanar expone lo siguiente: “Los fideicomisos que apoyan a los centros públicos de investigación son un instrumento que asegura la funcionalidad y operación continua de centros de excelencia académica. En estos espacios académicos se forja la siguiente generación de científicos e investigadores mexicanos, ésos que darán respuesta ágil en la siguiente emergencia sanitaria, esos que formarán a las siguientes generaciones de estudiantes universitarios. Esos jóvenes, que son el futuro de nuestro país”.
“¿Acaso se han preguntado cuántos años y cuánta inversión se ha requerido para tener el patrimonio científico e intelectual que hoy tiene México? Estos centros de excelencia académica no se construyeron en un día, son el producto de décadas de inversión y de esfuerzo, y han rendido frutos a este país. El Cinvestav ha formado a más de quince mil estudiantes de maestría y doctorado y oferta sesenta y seis programas de posgrado. En el Cinvestav hoy se desarrollan más de 60 proyectos relacionados con el SARS-CoV-2 y se hacen pruebas de covid-19 al personal médico de hospitales públicos. Eso no se logra en un día y sin embargo en un día se puede disolver un instrumento que asegura una funcionalidad institucional que hace que todo esto sea posible”.
¿Entenderán los diputados, los argumentos de la doctora Quintanar?
Sin duda, México vive tiempos complicados, pero estas medidas sólo confirman la fragilidad de las finanzas públicas y la irresponsabilidad del gobierno federal. Extinguir los fideicomisos es un salto al vacío y ojalá que en 2021 los ciudadanos lo recuerden en las urnas.
VIRICUENTOS
Morena, ¡al carajo el oportunismo!
Otra vez el presidente López Obrador pone orden en su partido. Reclamó que haya pasado más de un año sin que se pongan de acuerdo para definir un liderazgo. Dijo que era “mucho pueblo para tan pocos dirigentes”. Ahora, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación canceló la renovación de la dirigencia a través de una encuesta, cuyo resultado se conocería el 10 de octubre. Sobre aviso no hay engaño, AMLO dijo: “Es el pueblo el que manda, el que decide. No es (sólo) para Morena, es en general. Ya al carajo con el oportunismo”. ¡Sopas!
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