La nueva joya panista
Ramón Zurita Sahagún jueves 17, Sep 2020De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
A sus 40 años de edad, Mauricio Vila Dosal, un abogado mexiquense se encuentra como la más preciada joya política del Partido Acción Nacional y uno de sus principales prospectos para la todavía lejana sucesión presidencial.
Vila Dosal, nacido en el Estado de México, pero avecindado en Yucatán, desde hace varias décadas, es ampliamente reconocido por la población de esa parte de la península como un buen gobernante, comprometido y cumplidor con sus ofertas de campaña.
Antes de alcanzar el gobierno estatal fungió como diputado local y alcalde de Mérida, donde encontró el impulso que lo llevó a derrotar en las urnas a un priista con buena aceptación en la entidad como resulta ser Mauricio Sahuí Rivero, en una cerrada contienda electoral.
El gobernador de Yucatán aparece constantemente entre los tres primeros lugares de los gobernadores con mayor reconocimiento por parte de sus gobernados, en los sondeos que mensualmente elaboran algunas de las principales casas encuestadoras.
Y es que Vila Dosal ha mostrado ser un Ejecutivo prudente, mesurado y atento a las necesidades de los habitantes de la entidad que gobierna, pero además de enseñar sus habilidades políticas, manteniendo canales de comunicación con todos los actores políticos.
Es uno de los gobernadores de oposición que mejor relación guardan con el Presidente de la República y a diferencia de otros de sus compañeros de partido no se sumó al grupo de los antagonistas que, incluso, abandonaron la Conferencia Nacional de Gobernadores.
A diferencia de Francisco Javier García, gobernador de Tamaulipas, Vila Dosal no alardea con puyas y pugnas hacia sus adversarios políticos, ni con la posibilidad de buscar la candidatura presidencial para el 24, se mantiene con los pies en la tierra y sabe que el reconocimiento de sus gobernados podría ser el que lo sitúe en los primeros planos de la política nacional.
Y es que ante la escasez de figuras dentro de la oposición, por carecer de talento político unos y otros por resultar ser cartuchos quemados, se requiere de caras nuevas que puedan ser atractivas para los jalar a los electores hacia las urnas.
Dentro de la política nacional se aprecian los mismos nombres de las personas que desde hace mucho tiempo se vienen situando en los mismos espacios, sin dejar la oportunidad a figuras nuevas que ofrezcan cosas distintas a las ya ofertadas y nunca cumplidas.
Es tal la pobreza de rostros nuevos que resaltan personajes que desde hace más de cincuenta años vienen ocupando los primeros planos públicos como son el caso de Porfirio Muñoz Ledo, hoy aspirante a la presidencia de Morena o Marcelo Ebrard quien ha desfilado, al igual que Porfirio por distintos partidos y es, actualmente, la figura predominante de un gabinete presidencial sumamente oscuro.
Los priistas se muestran todavía apanicados, luego de la terrible derrota sufrida en 2018 y no ya una figura destacada que sobresalga. Su presidente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas es atacado constantemente por personajes del pasado que cuando tuvieron la oportunidad de destacar no supieron aprovecharla y ahora son feroces críticos de todas las acciones emprendidas desde la dirigencia del partido tricolor.
Dentro del PAN se viven asomos de terror ante la posibilidad de que Felipe Calderón y Margarita Zavala logren revocar la negativa de contar con su propio partido político, por la posible fuga de militantes y dirigentes.
Su dirigente nacional, Marko Cortés, es demasiado pequeño ante un partido que lo rebasa en historia y alcances y que no encuentra el camino para convertirse en la oposición que pueda plantarle cara al Ejecutivo federal.
Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, se vio en algún momento como uno de los líderes naturales de una oposición que requiere cabezas, pero se achica ante circunstancias que lo han rebasado.
El grupo de los 10 carece plantea soluciones a supuestos problemas que no les son resueltos, con lo que en poco tiempo privará el desánimo y más aún si Morena sale avante en la contienda electoral del 6 de junio próximo.
Con este panorama no es difícil que el gobernador de Yucatán se convierta en esa preciada joya que requiere la oposición, siempre y cuando mantenga los pies en la tierra.