Insiste gobierno federal en abrir un hoyo para luego taparlo
Miguel Ángel Rivera martes 15, Sep 2020Clase Política
Miguel Ángel Rivera
En forma muy reducida y simplista, John Maynard Keynes, considerado uno de los “padres” de la economía moderna propuso que para superar las periódicas crisis del capitalismo, los gobiernos se convirtieran en impulsores de la reactivación de la vida productiva mediante el procedimiento de poner a un grupo de trabajadores a excavar y, detrás, otro grupo que se encargara de rellenar los hoyos.
En el terreno práctico, las teorías de Keynes inspiraron en gran medida los programas de gobierno del presidente de los Estados Unidos Franklin D. Roosevelt, cuyo “new deal” (nuevo trato) permitió a los Estados Unidos superar otra de las grandes crisis económicas mundiales, ocurrida a principios de los años 30 del siglo pasado, situación que se superó totalmente cuando la economía de la Unión Americana llegó a su nivel máximo con la producción de armamento para la Segunda Guerra Mundial.
Todo este antecedente viene a cuento porque el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se ha declarado admirador de la política económica aplicada por Roosevelt y, al parecer, se propone replicarla frente a la crisis económica que vive nuestro país desde el año pasado y que se agravó como consecuencia de la contingencia sanitaria impuesta por la pandemia de Covid-19.
Un ejemplo de esas enseñanzas es el reiterado anuncio del Presidente mexicano de rescatar los cadáveres de 63 mineros atrapados por un derrumbe ocurrido en la mina de Pasta de Conchos, en Nueva Rosita, Coahuila, en febrero de 2006.
Naturalmente, los deudos quisieran rescatar esos cuerpos para darles sepultura conforme a sus creencias. El problema es que se ignora la profundidad a la que estaban y por tanto es difícil hacer planes para rescatarlos.
Adicionalmente está el costo de la obra, estimada en millones de dólares. Es tanto lo requerido, que luego de diversas maniobras legales para librarse de la carga del rescate, la empresa concesionaria de la mina, perteneciente al poderoso Grupo México, prefirió renunciar a sus derechos de explotación y optó por “devolver” el mineral a gobierno federal.
Así la carga del rescate recayó en el gobierno, pero el presidente López Obrador, de conformidad con su pregonada política de apoyo a los sectores populares, asumió la responsabilidad y prometió a los deudos rescatar los restos de sus parientes. Como complemento, ofreció indemnizaciones y ayuda a las familias de los mineros desaparecidos.
Adicionalmente, las tareas de rescate darán empleo a muchos mineros actualmente desempleados, pero eso parece que será temporal, pues nada se ha dicho de la posibilidad de que al abrirse nuevos túneles se reinicie la etapa productiva de esa mina, cuya producción, por cierto, tiene poca demanda, pues la lucha por mejorar el medio ambiente proscribe el uso de carbón mineral como combustible.
Esto lleva a otro de los conflictos que afronta el gobierno de la llamada Cuarta Transformación, que consiste en la lucha con los ambientalistas que demandan el uso de energías limpias, mientras que la actual administración federal, en particular la Secretaría de Energía y la Comisión Federal de Electricidad parecen inclinados a usar combustibles fósiles para asegurar el suministro de energía para consumo industrial y doméstico.
Mientras estas dudas se disipan, el gobierno del presidente López Obrador parece dispuesto a cumplir la simplificación de las políticas de Keynes: contratar a un contingente de trabajadores para que excaven uno o varios fosos para que detrás llegue otro grupo a rellenarlos.
El ex secretario de Hacienda mantiene sus críticas a la política económica
En anteriores comentarios dimos cuenta de que el llamado Paquete Económico -ingresos y gastos del gobierno federal para el año venidero- no ha sido bien aceptado fuera de las filas del gobierno de la llamada Cuarta Transformación por considerar que los planes oficiales no aseguran un adecuado proceso para superar la crisis.
A las voces de inconformidad se sumó el ex secretario de Hacienda, el ahora académico Carlos Urzúa, quien dejó el cargo precisamente por desacuerdos con el presidente López Obrador acerca de la forma como se deben manejar los ingresos y los gastos federales.
En su periódica colaboración para el diario El Universal, titulada precisamente “Un presupuesto sin sustento”, Urzúa escribió ayer que las iniciativas económicas del gobierno de la llamada 4T son “poco realistas”.
Sin embargo, el ex funcionario federal y ahora profesor universitario advirtió que no habrá ningún problema para que el Paquete Económico oficial sea aprobado en las cámaras de Senadores y Diputados, gracias a la amplia mayoría de que disfrutan Morena y sus aliados del PT, PVEM y PES.
Urzúa califica de incongruentes las iniciativas de Ley de Ingresos y de Presupuesto, pues advierte que parte de bases falsas.
En particular, señala que no es realista la estimación acerca de la caída de la economía nacional y por tanto el cálculo acerca de la posible recuperación durante el año venidero. Otro error, indicó, es el cálculo de lo que se producirá el año venidero, aunque el precio estimado, de 42 dólares por barril, parece “razonable”.
El PRI critica la rifa del avión-no avión
En vísperas de la supuesta rifa del avión presidencial, el PRI lanzó un comunicado en el que afirmó que “la economía, el sistema de salud, la seguridad y los derechos de las mujeres están hechos cachitos, pero al gobierno federal sólo le importa una rifa que no va a resolver los problemas de México”.
La dirigencia del partido tricolor, encabezada por Alejandro Moreno y Carolina Viggiano, presidente y secretaria general, respectivamente, publicó en las redes sociales, bajo el hashtag #TeLoExplicoEnCachitos, que el gobierno de Morena se quedó cruzado de brazos ante la pérdida de 15 millones de empleos, y ahora busca distraer a los mexicanos con los cachitos de la supuesta rifa del avión presidencial.
De acuerdo con el CEN del PRI, van más de 70 mil mexicanos fallecidos y más 650 mil personas contagiadas de Covid 19; mientras que los niños con cáncer no tuvieron pronta respuesta a su demanda de medicamento y la violencia contra las mujeres ha tenido un aumento alarmante.
La dirigencia priista estimó que, con todo lo que costó el avión parado en el extranjero, se pudieron haber pagado sesiones de quimioterapia y cajas de metotrexato para los infantes con cáncer; aumentar el presupuesto de la Red Nacional de Refugios para Mujeres, así como aplicar pruebas para detectar el Covid-19.
El comunicado advierte que las familias mexicanas merecen más que cachitos, por lo cual en el PRI “seguiremos trabajando en favor de los y las mexicanas desde los estados y municipios que gobernamos, desde la Cámara de Diputados y el Senado y desde cada trinchera donde haya un priista”.
Todo lo contrario comentó el presidente López Obrador, quien en su conferencia mañanera anunció que se cumplió la meta de “obtener para pagar los premios, eso está resuelto. De modo que se va a llevar a cabo la rifa hoy por la tarde”.
El primer mandatario aseguró que en los últimos días se ha incrementado la venta de billetes y adelantó que todo el dinero obtenido será para comprar equipos médicos para hospitales públicos, precisando que la semana próxima se dará a conocer la licitación para adquirir estos equipos.
Por su parte, el director de la Lotería Nacional, Ernesto Prieto Ortega, precisó que a la fecha se han obtenido ingresos por dos mil 89.5 millones de pesos, producto de la venta de cuatro millones 179 mil cachitos, de los seis millones puestos a la venta.
El funcionario aclaró que, en caso de resultar premiado un cachito no vendido, el premio será otorgado al Instituto de Salud para el Bienestar.
Tras recordar que en el Sorteo Especial 235 del equivalente al avión presidencial (el avión-no avión) se dividirá en 100 premios de 20 millones de pesos, Prieto anunció que la rifa se efectuará hoy, martes, a las 16 horas, en las instalaciones de la Lotería Nacional, en presencia de los secretarios de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, de Hacienda, Arturo Herrera, y de Salud, Jorge Alcocer.
Comentó que la venta cerrará a las 14 horas, cuando comenzarán a recibirse el remanente de billetes no vendidos. Los premios serán entregados al presentar una identificación oficial, comprobante de domicilio y una cuenta bancaria.