Morena y sus líderes
¬ Augusto Corro lunes 14, Sep 2020Punto por punto
Augusto Corro
El fin de semana fueron registrados los candidatos que buscan dirigir al partido en el poder, Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). No hubo sorpresas, los aspirantes son los mismos que empezaron a manejarse desde siempre y otros que aparecieron súbitamente. La Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó el listado de 35 militantes interesados en contender por la presidencia y 36 a la secretaría general. A partir del próximo 16 de septiembre serán sometidos a un “sondeo de reconocimiento”, previo a la encuesta abierta para definir los nuevos dirigentes de Morena.
Entre los aspirantes sometidos al citado sondeo para ganar el derecho a la candidatura se encuentran los diputados federales Mario Delgado Carrillo, Porfirio Muñoz Ledo, Javier Hidalgo Ponce; la actual secretaria general Yeidckol Polevnsky, además de Gibrán Ramírez y el senador suplente Alejandro Rojas Díaz-Durán. A la secretaría general quedaron inscritos, entre otros, la senadora Citlalli Hernández Mora, Agustín Guerrero Castillo, Flavio Sosa Villavicencio, Donají Alba Arroyo, Emilio Ulloa y Antonio Attolini. Del primer filtro sólo se tomarán seis candidaturas para cada puesto. Quienes continúen en la contienda participarán en la encuesta nacional abierta que se llevará a cabo del 26 de septiembre al 2 de octubre, en la que se decidirá quienes serán los nuevos líderes de Morena.
El panorama político morenista ofrece pocas sorpresas. Quizá lo que llama la atención fue la necedad de Yeidckol Polevnsky que busca el liderazgo de ese instituto político en el que fungió como secretaria general y presidenta interina. La actuación al frente de su partido fue criticado acremente por sus propios compañeros, quienes la acusaron del manejo indebido de millones de pesos en obras que no se hicieron. Cabe señalar que durante más de dos años no pudo ejercer la autoridad para designar a los nuevos jerarcas morenistas. Ahora, sin rubor alguno, busca mantenerse en el poder. Esa presunta conducta irregular de la dirigente contrasta con la doctrina política de su partido que mantiene una lucha contra la corrupción.
En días recientes se intensificaron las actividades políticas de quienes buscan dirigir a Morena. Los aspirantes despertaron y optaron por recorrer el país para reunirse con los militantes morenistas. Así, Mario Delgado y Gibrán Ramírez, cada uno por su lado, aparecieron en reuniones políticas en todas partes. El diputado Muñoz Ledo aprovechó la oportunidad de los “destapes” para manifestar su interés por el liderazgo de Morena. En fechas anteriores actuó como uno de los principales críticos de su partido y del gobierno lopezobradorista. En la misma Cámara de Diputados son constantes los enfrentamientos con los legisladores de su misma bancada.
Del diputado Mario Delgado se dice que es el hombre de las confianzas del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard. El legislador es de los políticos morenistas más conocidos. En esta condición es el puntero para ganar la presidencia del partido guinda. También se dijo que cuenta con el apoyo del líder del Senado, Ricardo Monreal. Mario Delgado era el candidato de Ebrard para el gobierno de la Ciudad de México, pero no pudo superar a Miguel Ángel Mancera, quien ahora se encuentra en el anonimato de la cámara de senadores, como coordinador de unos cuantos perredistas. En el presente, las apuestas favorecen a Delgado, pero en materia de “grilla” nadie puede asegurar nada.
Gibrán Ramírez representa una relativa novedad en las candidaturas. Se trata de un joven intelectual de izquierda que optó por incursionar en la política. Antes de manifestar su inquietud por participar en la contienda por el liderazgo gozaba de buena fama, pero cuando manifestó su inquietud política en Morena, le llovieron acusaciones debido a su desempeño como secretario general de la Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS), a la que llegó al inicio de esta administración. Dicho organismo internacional depende del IMSS. Es “un elefante blanco” de escasa utilidad pública, que por largos años se manejó con absoluta discrecionalidad y sin rendir realmente cuentas. Empleados del mencionado organismo dijeron que Gibrán utilizó el presupuesto y la estructura del CISS para favorecer su proyecto político y desde ahí construir su candidatura a la presidencia de Morena.
Tras largos meses de pasividad, los militantes de Morena entran a una etapa de intensa actividad política derivada de la elección de sus líderes y de las candidaturas para los cambios de 500 legisladores en la Cámara de Diputados y en 15 gubernaturas, más miles de cargos en puestos menores. Será la elección más importante, por el número de participantes, en los últimos tiempos. La meta principal de Morena es mantener la mayoría de diputados para continuar con los proyectos del presidente Andrés Manuel López Obrador. México vive una de las peores etapas de su historia golpeado por la pandemia del coronavirus, a la que no se le ve fin; al problema de la economía que no levanta; así como la espiral de violencia que no cede. La elección intermedia, con estos antecedentes, no será fácil. El gobierno actual tendrá que responder con sus resultados sobre los conflictos que señalamos, será sometido a un juicio severo para saber que hizo bien o cuales fueron sus errores en la lucha contra la pandemia, el desempleo y la violencia incontenible. ¿Usted qué opina amable lector?