“Cachitos”, a producto de gallina
Eleazar Flores jueves 10, Sep 2020Espacio Electoral
Eleazar Flores
¿NADIE PROTESTARÁ?-. “De arriba para abajo”, como dice que barre las escaleras de la corrupción en todos lados, -menos en CFE, Conade, IMSS etc.-, la Cuarta Transformación obliga a alta, media y baja burocracia a comprar “cachitos” para la rifa no rifa del avión.
Lo de “baja” burocracia se limita exclusivamente a los bajos ingresos de los burócratas, no obstante que en muchas ocasiones son quienes trabajan más y mejor que sus jefes.
Aquí, allá y acullá se oyen informaciones con quejas agregadas de que los empleados de tal o cual secretaría de Estado, son obligados a comprar su billete de lotería para la rifa del avión que no se rifará, misma que se llevará a cabo el inminente 15 de septiembre, o sea dentro de cinco días según programa de la Lotería Nacional para la Asistencia Pública.
Por las mismas informaciones que se dan desde el púlpito mañanero por el dueño del micrófono, se sabe que hasta el lunes siete se llevaban vendidos el 63 por ciento de las miles de series, cada una de las cuales consta de veinte “cachitos”. Lo que no se dice es cómo ha sido la venta de esos billetes, si es como antes con “Juan Pueblo”, o no?
Lo que pasa es que por las mismas vías de la Cuarta Transformación trasciende que se ha informado que tantos empleados de tales dependencias se les ha dicho que “voluntariamente a fuerzas” tendrán que comprar cuando menos un “cachito” pero si son más mucho mejor y ahi de aquel empleado que se niegue, mejor ni intentarlo.
En principio se dijo que la compra obligada de ”cachitos” se haría con jefes de departamento para arriba, cuyos ingresos van entre treinta y cincuenta mil pesos mensuales, por lo que la cooperación no iba a ser onerosa. Pero como no hubo tanta demanda, -igual que cuando jugaban Atlante-Necaxa, con estadio vacío-, tuvieron que incluirse a los empleados en esta “magnífica” operación presidencial.
Esa obligación de compra de boletos no se ha limitado a la burocracia de la capital del país donde están las oficinas de estado de muchas secretarías, se ha extendido a los despachos federales del interior de la república, donde despachan los faraónicos superdelegados. Esta “atenta” invitación para participar van desde Sonora a Yucatán, no lo dude.
Ante tanta imposición a la sufrida y mal pagada burocracia federal para la compra de billetes para la rifa del avión sin avión, ¿habrá dependencia federal alguna que reclame a los altos jefes del gobierno su abuso de autoridad?
Quién o quiénes lo hicieren serían tildados de “conservadores” o neoliberales.