Uno menos que en 2018
Ramón Zurita Sahagún martes 8, Sep 2020De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
De acuerdo con lo determinado por el INE, salvo la mejor opinión del Tribunal Electoral, serán ocho los partidos que participen en la contienda electoral de 2021, catalogada como la madre de todas las elecciones, por el número de personas que serán electas.
Esos ocho, son uno menos de los que participaron en el proceso electoral federal de 2018, que arrojó como resultado la pérdida de registro para dos de ellos (PANAL y PES), aunque uno de esos actores descalificados en aquel entonces cambió de apellido y vuelve con una nueva oportunidad.
Los contendientes en 2021 serán los partidos que cuentan con bancada en la Cámara de Diputados: MORENA, PAN, PRI, PT, MC, PVEM, PES (antes Encuentro Social y ahora como Encuentro Solidario) y PRD.
Cada uno de ellos deberá alcanzar, como mínimo, el tres por ciento del total de votos emitidos, para continuar con registro y poder seguir participando en comicios futuros.
A pesar de que se filtraba información y se daba por hecho que cuando menos cinco de los organismos que solicitaron nuevo registro lo alcanzarían, no fue así y contrariados los que consideran injusta la negativa acudirán ante el Tribunal Electoral, buscando se corrija la falla.
Y es que cada uno de los partidos rechazados argumenta una serie de argucias por parte de los consejeros del INE, los mismos que antes de la resolución eran garante de transparencia, según expresiones de los principales dirigentes de cada una de esas corrientes.
Hoy esos personajes imparciales y que dan la cara en el INE son catalogados de muchas formas, varias de ellas totalmente soeces que llegan al extremo de ubicar al presidente del INE (Lorenzo Córdova) como “cantinero de Calderón”, aunque no aclaran a cuál Calderón hacen referencia.
Y es que desde siempre en México se acostumbra echarle la culpa a otros de los errores que cometemos y más cuando la situación no nos favorece.
Los reclamos por resultados electorales siempre son para los otros partidos o los calificadores de la jornada, sin considerar nunca que los parridos se equivocan al seleccionar candidatos con bajo perfil, mala fama o carentes de atractivo para los ciudadanos.
Siempre resulta más fácil culpar al adversario u otros y nunca aceptar la propia responsabilidad.
Ahora corresponde al Tribunal Electoral determinar si los señalamientos de los dirigentes de los partidos rechazados tienen razón en su argumentación o si los consejeros actuaron con justica al rechazar su petición de registro.
Sin embargo, sea la que sea la resolución del Tribunal, la jornada electoral que empezó ayer inició con el pie izquierdo y con malos augurios hacia lo que viene.
Nunca en la historia de México la ciudadanía acudió a las urnas para seleccionar a tantos representantes populares como la hará en la jornada del seis de junio próximo y nunca tampoco había tanto encono entre las organizaciones partidistas participantes.
Los opositores de Morena desean derrotarlos en las urnas, aunque no encuentran el método adecuado, ya que por sí solos no garantizan el respaldo electoral necesario para conseguirlo.
Y aunque hay quienes consideran que la presencia de más partidos daría la opción suficientes para arrebatarle la mayoría en la Cámara de Diputados y en las 15 gubernaturas en juego, hay otros que coincidimos en que fraccionar aún más el voto representa una victoria adelantada para los candidatos de Morena.
Con la participación de ocho partidos, dos de ellos en alianza con Morena (PVEM y PT), restan cinco partidos ajenos a ello, aunque en realidad serían cuatro, ya que el PES por su condición de primerizo no puede realizar alianzas con nadie.
Sin embargo, se antoja difícil que puedan establecer una alianza entre los cuatro restantes, ya que PAN y PRI son como el agua y el aceite. Movimiento Ciudadano se considera una realidad y establece sus condiciones para unirse a otro partido y el PRI que podría hacer alianza con MC y PRD es visto con menosprecio hasta por el partido del sol azteca que está considerado como uno de los posibles perdedores del registro en junio de 2021.