Puestos de comida en la calle no cumplen reglas sanitarias: GDF
Cd. de México martes 22, Mar 2011- La invasión de “changarros” en el exterior de los planteles educativos es un problema no atendido por las autoridades
José de Jesús Trujillo, director de la Agencia de Protección Sanitaria de la ciudad, dijo ayer que los puestos que venden alimentos preparados en la vía pública no cumplen con los requisitos sanitarios establecidos por la Secretaría de Salud capitalina, aunque parte de ellos se ubican afuera de planteles educativos.
Afirma que el organismo a su cargo sólo toca realizar actividades preventivas y fomento sanitario y corresponde a las delegaciones reubicarlos o retirarlos.
Destaca que para poder ofrecer sus productos en las calles, los dueños de estos negocios tendrían que cumplir con varios requisitos, entre ellos, contar con baño, tener agua, personas dedicadas a cobrar y otras a preparar los alimentos, así como asegurar la conservación de los productos.
Sin embargo, para Guillermo Ayala, coordinador de Vinculación Institucional de la Administración Federal de Servicios Educativos en el DF (AFSEDF), la invasión de puestos en el exterior de los planteles es un problema no atendido por las autoridades.
Trujillo señala que “no se puede aplicar una medida regulatoria porque están en la vía pública, no son lugares establecidos donde se pueda citar a los dueños, donde se les pueda hacer llegar la sanción administrativa, eso no es posible, no está permitido dentro de la ley, esto se tiene que hacer únicamente a través del fomento sanitario”.
Además deben portar cubreboca y gorra para el pelo, cosa que el propio funcionario, admite, no se cumple por lo que las delegaciones tendrían que reubicar o retirar estos puestos.
La agencia trabaja de manera coordinada con las delegaciones y la Secretaría de Educación Pública (SEP) para los puestos de afuera de los planteles.
El personal de la agencia identifica a los líderes de las organizaciones de vendedores de alimentos preparados afuera de las escuelas para invitarlos a ofrecer en mejores condiciones sus productos, aunque “por supuesto la instancia inmediata es retirarlos”.
El funcionario explica que en principio no debe haber alimentos en la vía pública que no cumplan los requisitos sanitarios, por eso se ofrecen pláticas a los expendedores, pero aún determinar el número de este tipo de comercios resulta complicado. “Es una población flotante, no siempre son los mismos, por el contrario, día con día se van agregando más, en respuesta de las condiciones económicas del país”.
Pero, aclara, que esta orientación que reciben los manejadores de alimentos de ninguna manera se debe interpretar como un permiso, licencia o autorización para que los estén vendiendo.
Explica que mientras al interior de los planteles se puede tener un control, porque son fijos, en el exterior esto resulta complicado por lo que se integró la Red de Delegaciones Saludables, que sostiene reuniones periódicas y en las que participa personal de las demarcaciones y diferentes jurisdicciones sanitarias del la capital.