Espías
¬ Augusto Corro viernes 18, Mar 2011Punto por Punto
Augusto Corro
- Drones vuelan sobre México
- ¿Caerá El Chapo Guzmán?
- Misión cumplida del Chucho
Algo que se le da a Estados Unidos es el espionaje mundial. Saben los pormenores de lo que ocurre en la vida de cualquier país y para ello cuentan con oficinas, hombres y equipo especializado: por ejemplo, el Dron es un avión no tripulado, sus características son las de volar a 18 mil metros de altura. No se ve a simple vista. Carga un sinnúmero de instrumentos sofisticados que permiten obtener información (fotografías nítidas) de lo que ocurre en tierra. Actualmente es usado en los lugares donde se registran conflictos bélicos: uno de ellos es Afganistán.
Bueno, pues esas naves sofisticadas sobrevuelan el territorio mexicano en busca de narcotraficantes. Así lo confirmaron los gobiernos de México y de Estados Unidos (EU). Como es natural, en nuestro país, estalló la tradicional guerra de discursos a favor o en contra de ese convenio. Algunos legisladores señalaron que se trata de una violación a la soberanía y otros dijeron que es una acción, sin mayor problema, para combatir a los cárteles de la droga.
El asunto de los drones vino a sumarse a la polémica que inició hace varios días con el operativo Rápido y Furioso de resultados funestos. Como informamos, dicha acción de los estadounidenses benefició a los narcotraficantes que lograron obtener miles de armas de contrabando para incrementar su arsenal. Uno de esos rifles se usó para privar de la vida al policía de aduanas, Jaime Zapata.
Y precisamente, las autoridades estadounidenses dijeron que gracias a los drones se logró la captura de los asesinos del agente estadounidense ocurrido en una carretera de San Luis Potosí. Verdad o mentira, se buscó la forma de justificar el espionaje aéreo que, obviamente, no debe concretarse a perseguir narcos.
Se dijo, que dichas naves no tripuladas iniciaron sus inspecciones desde años atrás, pero que intentaron manejarse secretamente para evitar los cuestionamientos por parte de los legisladores, principalmente del Senado mexicano. No se logró ocultar la verdad y ahora se empieza a saber, poco a poco, de los convenios entre Barack Obama y Felipe Calderón Hinojosa. ¿A qué acuerdos llegaron ambos funcionarios? Algún día los conoceremos.
Mientras tanto, se debe realizar un análisis sobre la efectividad de los sobrevuelos con los drones. En Afganistán y Medio Oriente, en lo general, desde hace varios años se inició la búsqueda de Osama Bin Laden, líder de Al Qaeda, sin ningún resultado. En el mencionado país, Estados Unidos no pudo contra los talibanes y no saben si se quedarán o dejarán a su suerte aquella zona conflictiva. ¿De qué sirvió el espionaje?
En México, por lo que se ve, los aviones manejados a control remoto, con sus sistemas de localización perfectos, han sido poco efectivos. En la guerra del gobierno federal panista contra la narcodelincuencia pasan de 34 mil los muertos en los últimos cuatro años. Y se supone que la cifra podría llegar a 50 en el sexenio calderonista. ¿Qué espiaban los drones? Y como la esperanza muere al último es posible que el día menos pensado tengamos la noticia de que gracias a esas naves espías no tripuladas se logró la captura de “El Chapo” Guzmán.
MISIÓN (TRAICIÓN) CUMPLIDA
No hay plazo que no se cumpla y mañana sábado Jesús Ortega dejará la dirigencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD). El político cumplió su misión (traición) lo mejor que pudo y dejará a los perredistas sumidos en el divisionismo. En una guerra de todos contra todos, los militantes del sol azteca tendrán que decidir sobre el sucesor del polémico líder que se ostentó como hombre de izquierda y terminó como panista yunquista de derecha.
El Chucho mayor empezó a dinamitar al PRD desde que llegó a sus filas. Como representante de Nueva Izquierda, una de las corrientes políticas perredistas, se enfrentó a Alejandro Encinas, del más puro lopezobradorismo, en la lucha por la presidencia de la mencionada organización política. Luego de una lucha encarnizada, las autoridades electorales favorecieron a Jesús Ortega. No se podía dañar más al partido.
No se logró ningún acuerdo entre las tribus y Andrés Manuel López Obrador (AMLO) decidió actuar por su cuenta y repartió su poder político entre el PRD, el Partido del Trabajo (PT) y Convergencia. Seguía como perredista, pero apoyaba a candidatos petistas. La izquierda sumó fracaso tras fracaso en cuanta elección participaba. En las elecciones intermedias de 2009 descendió al tercer lugar en la preferencia electoral.
Sin embargo, los últimos años, la dirigencia perredista encabezada por el chucho mayor, Jesús Ortega, optó por llevar a cabo su tarea colaboracionista y logró mezclar el agua con el aceite. Nos referimos a las alianzas del PRD-PAN para participar con un candidato único en elecciones estatales y municipales, con la suerte de alcanzar triunfos en Oaxaca, Guerrero y Sinaloa.
Esas victorias favorecieron la imagen de Jesús Ortega, quien aprovechó la oportunidad para posicionarse mejor y lograr que, una de sus metas, que se efectuara una encuesta en el Estado de México para saber si se participaba con un candidato de la coalición PAN-PRD. La realización de este plan obligó al Chucho mantenerse en la dirigencia perredista. Logró su propósito. Dicha encuesta se realizará el 27 de marzo.
Jesús Ortega dejó a su paso una división perredista difícil de superar. Si se vota por una coalición PAN-PRD, se ignora de qué partido será el abanderado para la gubernatura del Estado de México. Por su parte, AMLO, perredista que solicitó licencia para alejarse del PRD por una temporada, participará en esa justa electoral con un aspirante emanado del Partido del Trabajo (PT).
La asamblea perredista elegirá a un nuevo dirigente, con la idea de que si continúa el divisionismo, la izquierda mexicana llegará muy debilitada a las elecciones presidenciales del 2012. Jesús Ortega cumplió cabalmente, como dicen los políticos, su acción destructiva.