Los demonios andan sueltos
¬ Sócrates A. Campos Lemus miércoles 17, Jun 2020¡Que conste,.. son reflexiones!
Sócrates A. Campos Lemus
Muchos temas políticos desata el famoso BOA, que si la “cacacola” en verdad que es un enorme mal para el país, y se sostiene que por ella y sus intereses y publicistas lograron imponer en la presidencia a uno de sus gerentes al que movieron como tal: Vicente Fox, ahora, con eso del “diablo”, el de Femsa, pues no hay la menor duda de que el mal anda cerca acompañado del diablo y traen una enorme carga de odios, resentimientos, encabronamientos y ganas de joder, al grado que está dispuesto, el señor diablo, a dar el doble de lo que tuvo que pagar al SAT para que AMLO sea sacado del poder, y ya sabemos que el dinero genera las peores tentaciones y no sea que le caigan las maldiciones al señor diablo, cuando algún loquito trate de “eliminar al Presidente”, y esto no es fuera de lugar, hay muchos desesperados , encabronados, desalmados, necesitados de dinero y están dispuestos a realizar los trabajitos del “diablo”, no los del señor diablo de Monterrey que, seguramente, se da cuenta de que sus palabras le llevan a una tragedia y se debe de cuidar, porque del otro lado, de los incondicionales de AMLO, tampoco faltan los loquitos que teniendo ánimos guerrilleros o de pasiones anarquistas, le vuelen la choya a tan odiado señor dueño de los refrescos y de las “cacacolas”… Y ahí sí que tendríamos un enorme problema, bastaría recordar los escándalos cuando el asesinato de don Eugenio Garza Sada y de los ánimos encendidos de los regios que no pudieron aceptar que era un atentado de los “guerrillosos”, sino que lo imputaron al presidente Luis Echeverría, así son los ánimos de caldeados.
Lo curioso es que ahora no están las cosas como en los tiempos de Echeverría, la división del famoso Grupo Monterrey es clara, no existe unidad, a menos que jueguen doble, porque, por un lado, Romo, trae, dice, a muchos de los magnates del norte afiliados en favor de AMLO, claro que se ven en las reuniones pero, caras vemos y sentimientos no sabemos, y por el otro lado ya andan los “diablos sueltos con el diablo encabezando la revuelta y los “compló”, total, también le trae las ganas y no se las aguanta, la verdad es que deberíamos recordar que cuando se habla de los apóstoles de la Revolución no pertenecían al pueblo, los usaron para la rebelión, eran los riquillos de la época, los caciques, los terrateniente y querían nuevos temas para iniciar el desarrollo económico que solamente se daba como oportunidad a los grupos extranjeros, y ya vimos los terribles resultados, no quiere decir que Madero no fuera un “demócrata,” más bien, era, diría yo, un iluminado que haciendo caso a los “espíritus” guiaba su conducta, y esto no lo debería de olvidar el Presidente, es lo que hay, es la realidad.
Si Madero en verdad tuviera una visión demócrata hubiera sabido que tendría que eliminar al viejo Ejército que estaba al servicio de los terratenientes y de los acaudalados y no licenciar las fuerzas armadas de los grupos revolucionarios, pero pensó que era mejor negociar con uno, que con aquellos caudillos que no se ajustaban fácilmente a las instrucciones del Presidente. Por ello, no me explico la razón por la que no dicen que, cuando Don Porfirio abandonó el país, preguntó que quién sería el militar que escoltaría al tren a Veracruz, y cuando supo que sería Victoriano Huerta lo aceptó gustoso y ya conocemos el final del tema, el tal Huerta, borrachín y ambicioso, acabó eliminando a Madero, y me preguntó, realmente quiénes fueron los que le dieron el poder y el dinero para poder hacer lo que hizo, y estos tipos pues no parecen en los libros de texto, y como dice el Monje Loco: nadie sabe y nadie supo… Aasí son los compló, donde se eliminan a los buenos… o a los malos, según sea el caso.
Estoy totalmente seguro que el diablo de Nuevo León y sus diablillos y seguidores no cuentan con la fuerza popular para encabezar una rebelión, pero, como las pulgas: no matan al perro pero no lo dejan de chingar, el real peligro es que con sus ideas descabelladas, viscerales, de encabronados y aguerridos pueden dar el pretexto para que algún otro grupo que nadie sabe, sea el que realice los atentados, y con ello, desatarán los ánimos y los diablos se soltarán por las calles y tendremos perdido lo que ahora más preocupa al Presidente mantener con todo el cuidado: LA PAZ SOCIAL, sin paz no hay posibilidades del cambio y algunos acelerados, de los dos lados, dicen que lo que se necesita para alcanzar sus fines es la guerra y los balazos y les vale madre quienes mueran; los malos dicen que es el costo de la libertad y los otros que es el costo de la verdadera revolución, porque aseguran que no es posible hacer un cambio de sistema, es decir, una revolución pacífica como explica AMLO en la tercera parte de la entrevista que le realiza Epigmenio Ibarra y donde detalla que lo más importante es la paz y que por medio de la paz se logra el cambio revolucionario, “único en el mundo”, y que esto es el mejor de sus legados y por supuesto, es lo que busca y, cuando los diablos se desatan de los dos lados, pues a ellos les vale y lo que buscan es alcanzar sus fines no importando los costos que tengamos que pagar los mexicanos.
Creo que AMLO, dentro de sus conceptos y buenas intenciones, efectivamente, piensa que lograremos los cambios de sistema y de pensamiento popular por medio de la paz social y que sabe lo que esta vale, por ello, su interés mayor es el de conservarla, pero ya se llegó el tiempo, también, dice, a la definición de todo: O SE ESTÁ CON LOS LIBERALES O SE ESTÁ CON LOS CONSERVADORES y esto es casi casi como un llamado a la guerra y las armas y, pues no vaya a ser el diablo, y cuando el diablo tienta, no hay forma de aplacar la iras y los jaloneos y malos ratos, por otro lado, no sé si el señor diablo de Monterrey efectivamente anda tan encabronado que soltaría el dinero para el lío y la confrontación para sacar al Presidente del poder, no sé si no se queda solamente en habladas, pero ya está en el ambiente el tema y esto puede alentar los movimientos para que se muevan las masas, el infelizaje nacional, y cuando esto suceda, será como dejar salir a los diablos por las calles, y a lo mejor, se pierde la paz social, y si esto pasa entraremos en los enfrentamientos ligados a la “revolución armada para conquistar la revolución y el cambio real del sistema”, y a lo mejor sucede o todo se queda en las habladas… Pero la verdad hay que luchar por conservar la paz social en el país y no llevarlo al baño de sangre que buscan algunos desesperados y acelerados…háganle caso a AMLO que señala que, para salir del coronavirus y encarar la nueva realidad, hay que comer sano, no odiar, no ser egoístas, gozar del cielo y de la tierra y BUSCAR UN CAMINO A LA ESPIRITUALIDAD… sólo así se enfrenta al diablo, porque, los demonios, andan sueltos.