Guarden a sus perros
Freddy Sánchez martes 9, Jun 2020Precios y desprecios
Freddy Sánchez
Cero y van mil o el último de pepito…
Llámesele como se le llame al mal hábito de inventar noticias falsas para confundir e incluso enervar a la población con supuestas acciones de gobierno comúnmente repudiables, ya se hizo un prurito malévolo.
Que por cierto cada vez intranquiliza más a la ciudanía, puesto que probablemente en su mayoría los habitantes de este país esperarían en sus autoridades decisiones esmeradamente racionales y prudentes y no descabelladas y absurdas.
Tal como lo tomaron quienes por medio de las redes sociales recibieron la información acerca de la supuesta propuesta del Presidente Andrés Manuel López Obrador, en el sentido de proponer un impuesto para las mascotas.
Las reacciones de inconformidad fueron muchas y de distintas magnitudes, colores y sabores, por decirlo de algún modo, si consideramos la amplia variedad de los reproches injustamente hechos al Presidente.
Razón por la cual, pronto surgieron las aclaraciones pertinentes al negarse que el Andrés Manuel hubiera realizado alguna declaración relativa a un intento de su parte por aplicar una cuota impositiva por la tenencia de animales domésticos.
Algo que en el pasado algunos legisladores quisieron implantar legalmente, sin conseguirlo al surgir diversas reacciones de protesta ciudadana.
Lo cual resulta comprensible si consideramos el temor de no pocos ciudadanos en torno a la eventualidad de que aceptar el cobro fiscal por la posesión de mascotas, podría abrir la puerta a la aplicación de futuros cargos fiscales por otra clase de posesiones en las casas y edificios dedicados a la vivienda.
Algo que desataría, seguramente, un amplio repudió hacia las autoridades.
En cuanto a la noticia concerniente al falso impuesto para los animales domésticos, cabe mencionar que los integrantes de un matrimonio que opinó sobre el tema antes de saber que se trataba de un invento, dijeron algo que quizás muchos pudieran pensar.
Eso de fijar una cuota pareja para todas las mascotas, es muy disparejo porque cómo pretender cobrar lo mismo por un perro chihuahueño que por un gran danés. Acaso paga el mismo impuesto un automóvil austero que uno de lujo.
Tras escuchar a su esposo decir eso, la señora lo conminó a callar diciéndole que no diera ideas porque al rato los señores del gobierno estarían cobrando impuestos por el refrigerador, la estufa, las licuadoras, lavadoras o las planchas de acuerdo con sus tamaños y marcas.
Y acuérdate que también las ventanas pueden ser objeto de gravamen como en la época de Santa Ana, abundó en tono de ironía el marido.
Y así como estas personas otras muchas expusieron sus posturas de inconformidad en las redes sociales ante un impuesto que sin saber que el presidente no propuso, despertó exclamaciones de irritación y sorna social.
Una situación que se ha repetido varias veces en los últimos meses, durante la administración de ALMO, debido a la proliferación de noticias falsas y varias de estas, relacionadas a intenciones jamás expresadas por la autoridad para imponer medidas impopulares que como es natural suelen provocar disgusto entre la población.
De modo que ante ésta tendencia maliciosa para desacreditar al gobierno, bueno será que se proceda a la brevedad a las aclaraciones pertinentes como sucedió en esta ocasión al desmentirse rotundamente que haya propósito institucional alguno para gravar la posesión hogareña de las mascotas.
Y si alguien ha tenido la idea o la pudiera tener de recurrir a intentonas de este tipo, con la finalidad de que el sector público cuente con mayores recursos financieros “encajándole el diente” a los habitantes de México, con tasas impositivas repudiadas socialmente, toda clase de reacciones de inconformidad no se harán esperar, aunque por ahora no hay porque alarmarse ni decir a todos que guarden a sus perros.