Gobernantes de horca y cuchillo
Alberto Vieyra G. miércoles 29, Abr 2020De pe a pa
Alberto Vieyra G.
La pesadilla mundial del coronavirus ha dejado ver que el imperio capitalista del mal y los gobiernos del diablo ejercen un férreo control de la población y muchos gobiernos se han evidenciado como auténticos tiranos de horca y cuchillo y México no ha sido la excepción.
Veamos:
En Filipinas, el sátrapa gobierno de Rodrigo Duterte ordenó a los militares tirar a matar contra quienes no acaten las disposiciones sanitarias decretadas por ese gobierno tirano.
En Nueva York, la Guardia Nacional mantiene a raya a las víctimas de la cuarentena por el mortífero virus del Covid-19 y a que nadie se salga del huacal, so pena de mandarlos al otro patio por órdenes del gobernador Andrew Cuomo.
En Chile, el autoritario gobierno de Sebastián Piñera sofoca las protestas antigubernamentales con pipas y potentes mangueras como si estuviese en sábado de gloria. Resfriados hay por montones.
En Corea del Sur, el tirano Moon Jae-in ejerce un férreo control de la población mediante mensajes de texto de los ciudadanos apropiándose de sus datos personales y exhibiéndolos cuando contraen el virus.
En Singapur, el gobierno de Halimah Yacob una mujer con mano de hierro aplica multas por mil dólares y arrestos por 6 meses a quienes violen sus totalitarias medidas.
Otro tirano, pero en Israel es Benjamín Netanyahu, quien ha dispuesto cuarentena rigurosa para todos los extranjeros que lleguen por aquellos barrios.
También el ogro gobernante de El Salvador Nayib Bukele se ha manifestado como un dictador de mano dura que prefiere ver morir a su pueblo de hambre que de Covid-19. Y al son de que ¡el Estado se respeta!, ha implantado el toque de queda contra todo mundo, incluyendo los mara salvatrucha y grupos terroristas.
En México, donde según la OCDE el gobierno que encabeza López Obrador se encuentra en el último lugar a nivel mundial por no realizar pruebas y pruebas, como lo mandata la OMS, pareciera imperar una macabra y demencial lógica que aplica rigurosamente el sector salud bajo el principio de que “sálvese quien pueda” o que “mueran los que tengan que morir, para que otros podamos vivir”. No realiza pruebas porque cuestan alrededor de 3 mil pesos. A AMLO no le importa la salud de los mexicanos, sino la sobrevivencia electoral de Morena.
La orden de AMLO es que no haya estadísticas de mortandad que no le favorezcan a su gobierno. El sistema hospitalario se está colapsando. En los hospitales privados ya no cabe un solo infectado más por coronavirus y en los públicos, también.
A los ojos de todo mundo no existe la duda que hay ingobernabilidad y vacío de poder en México y esa falta de liderazgo ha dado como resultado que surjan gobernadores y presidentes municipales de horca y cuchillo. El gobernador del Edomex, Alfredo Del Mazo, quien no puede contra la feroz delincuencia se ha revelado como un represor contra la población imponiendo multas de más de 2 mil 700 pesos y arrestos por 72 horas a quien no use cubrebocas, tónica que ha seguido el sátrapa gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís.
Por su lado, el dictador gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez también ha impuesto como control a la población medidas draconianas por no usar cubrebocas. A lo largo del territorio nacional impera el descontento social con esos y otros sátrapas gobernantes que, como el edil de Toluca, Juan Rodolfo Sánchez Gómez se han dado a la tarea de propinar campales golpizas a tianguistas que no acaten sus dictatoriales medidas que ha enardecido a la población y no se descartan brotes sociales pues la gente prefiere morir de Covid-19 que de hambre, pues los gobernantes de horca y cuchillo piensan que como ellos pueden comprar víveres para un mes o dos meses, la gente que vive al día también lo puede hacer. ¡Vaya infame e inhumana lógica!
No cabe duda que la para los gobernantes sin quehacer político, la ociosidad es el vicio de todas las madres. Aunque el dicho es al revés, pero mejor así se las acomodamos.