Pichardo Pagaza
Eleazar Flores jueves 16, Abr 2020Espacio Electoral
Eleazar Flores
ÁNGULOS POLÍTICOS.- “Es mal soldado el que no aspira a general”, me declaró el entonces diputado federal Ignacio Pichardo Pagaza en la sala de espera de la oficina del gobernador Jorge Jiménez Cantú, meses antes de concluir su sexenio, a finales de los 70 e inicios de los 80.
Y es que al vallesano se citaba como posible candidato a la gubernatura, junto con el director general de Hacienda Román Ferrat y el Secretario General de Gobierno Juan Monroy Pérez, por los “locales” y por los “fuereños” Carlos Riva Palacio y el ganador Alfredo del Mazo González, así que Pichardo Pagaza en esta ocasión estuvo lejos de los prospectos con posibilidades.
LARGA TRAYECTORIA.- Trayectoria larga y de primer nivel fue la del hijo predilecto de Valle de Bravo, iniciando con más reflectores como director general de Hacienda (hoy secretaría de Finanzas), como integrante de un grupo político que conformó el gobernador Carlos Hank González. El Secretario General de Gobierno Jiménez Cantú confirma el peso del gabinete.
Cuando Jiménez Cantú asciende a Secretario de Salubridad y Asistencia en el naciente sexenio de Luis Echeverría, Pichardo Pagaza asciende a secretario general de gobierno estatal y de ahí en adelante, incluyendo diputaciones y desencuentros, justo con el propio Jiménez Cantú.
Como legislador federal, Pichardo Pagaza envió severa carta a la Cámara de Diputados local, cuestionando acremente la modificación del escudo, incluyendo las tres flechas del sagitario. La carta la leyó el diputado local hankista Enrique Collado López y de ahí la “tirria” que le tomó el “jiménezcatuismo” al diputado “toluco” y líder estatal del PRI juvenil, FJR. El sagitario salió.
EQUIPO-. Ya como gobernador interino en lugar de Beteta, Pichardo Pagaza integró un gabinete “mediano” a fuerza de ser sinceros, destacando por sobre ellos su secretario general de gobierno Humberto Lira Mora cuyo destino ¿o carácter?, le negó su sueño sempiterno de ser gobernador. Hasta Mauricio Valdés se le reveló a Pichardo en días de la sucesión en 1993.
Al igual que los “Golden boys” del montielismo, Pichardo tuvo jóvenes en su gabinete, entre otros Roberto Gómez Collado, Juan Carlos Padilla y Julián Salazar quien con otros universitarios quiso “madrugar” el destape de Pichardo, sin mayores consecuencias.
SOLIDEZ.- La formación académica de Pichardo Pagaza es irrefutable, gracias a lo cual fue miembro del gabinete federal en las secretaría de la Contraloría y en la ¨PROFECO, de la que salió para asumir la gubernatura en lugar de Mario Ramón Beteta el 11 de septiembre de 1989. Pero antes fue embajador de México en España hasta donde lo acompañó Alexander Nemer Naime Libien.
Fue presidente nacional del PRI en tiempos difíciles por el asesinato de Colosio, casi nada.