Coronavirus y delincuencia al acecho
Luis Muñoz lunes 13, Abr 2020Segunda vuelta
Luis Muñoz
La situación por el coronavirus es y seguirá siendo, no se sabe por cuánto tiempo, un serio problema para la humanidad; a la crisis sanitaria y económica se suma ahora un nuevo componente: el de la delincuencia.
En algunas ciudades de los Estados Unidos, según reportan diarios locales, el tráfico de drogas disminuyó, mientras que en México la delincuencia no cede terreno. Diarios estadounidenses han dado a conocer que, por ejemplo, la pandemia que ha paralizado a grandes minoristas y tiendas familiares en todo el mundo, podría estar haciendo mella también en los negocios ilícitos.
En Chicago, una de las ciudades más violentas de Estados Unidos, las detenciones relacionadas con drogas se han desplomado un 42% en las semanas posteriores al inicio de la cuarentena, con respecto a la estadística del año pasado.
Parte de esa caída, según algunos abogados penalistas, se debería a que los traficantes no tienen otra opción más que esperar al final del bache económico.
De acuerdo con una información de la AP dada a conocer por el diario El Paso el sábado anterior, en general, los delitos en Chicago bajaron un 10% desde el inicio de la pandemia, una tendencia que se repite en todo el mundo con ciudades reportando caídas en la tasa de criminalidad desde que se pusieron en marcha las medidas para contener la propagación del coronavirus.
Incluso en las regiones con un mayor nivel de violencia fuera de las zonas de guerra, se cometen menos asesinatos y robos. Sin embargo, las autoridades están preocupadas por un incremento de la violencia doméstica no denunciada y por lo que ocurrirá cuando se levanten las restricciones o si se alargan demasiado.
Es raro que la tasa de delincuencia de una ciudad baje en dos dígitos, incluso en periodos muchos más largos. En Latinoamérica, la delincuencia se ha reducido a unos niveles nunca vistos en décadas. Esa tendencia no parece reflejarse en México.
Los asaltos y asesinatos continúan
De acuerdo con el portal Infobae, durante los primeros dos meses de 2020, los feminicidios aumentaron en México en comparación con el mismo periodo de 2019, es decir, se incrementaron en un 9.1 por ciento. Cifras del secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) muestran que durante enero y febrero de este año hubo 632 crímenes contra mujeres, de los cuales 466 fueron clasificados como homicidios dolosos y 166 feminicidios.
Las entidades donde más carpetas de investigación se iniciaron por feminicidio fueron el Estado de México, Puebla, Veracruz, Nuevo León, Baja California y la Ciudad de México.
Este año se registraron 53 víctimas más que el año pasado. El promedio diario de mujeres víctimas de asesinatos intencionales aumentó al pasar de 9.8 en 2019 a 10.5 en 2020.
Revela además que la entidad con más crímenes de este tipo en los primeros dos meses del año fue Guanajuato, con 83 casos.
En cuando a los asaltos en el transporte público de pasajeros, sobre todo en el Estado de México, los casos no disminuyen, según reportes de medios de comunicación. Eso se explica porque a los autores de los ilícitos no les aplican la ley, si acaso son detenidos. En su gran mayoría los delitos quedan impunes.
Las autoridades pueden argumentar que están más ocupadas en atender los casos por coronavirus que en perseguir delincuentes, pero eso no los justifica.
Covid-19 y los pueblos indígenas
Los siempre olvidados pueblos indígenas, hoy también están relegados por los gobiernos. El hecho de que algunos de estos pueblos se ubiquen en zonas aisladas no los exime de los riesgos que podrían considerarse “exclusivos” de los grandes centros urbanos. Pero no es así. Hasta sitios alejados de la civilización ha llegado la pandemia del coronavirus.
Se ha dado a conocer el caso de un niño, de una remota tribu amazónica, que murió a causa de la enfermedad producida por COVID-19.
Pero para no ir más lejos, en la Ciudad de México, en este momento está en marcha un mecanismo de apoyo que no a todos beneficia. Se trata del proceso de apoyo para los artesanos indígenas, iniciativa de Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno, para apoyar a los artesanos indígenas radicados en la capital del país; sin embargo, siguen quedando excluidas de apoyo todas aquellas familias indígenas que no son artesanos.
Según cifras del INEGI, en 2015 existían en la CDMX 784 mil personas que se asumen como integrantes de un pueblo indígena, los cuales en la mayoría de los casos carecen de acceso a servicios de salud, buena alimentación, agua, entre otros derechos fundamentales para vivir dignamente.
Dirigentes del Movimiento de Pueblos, Comunidades y Organizaciones Indígenas, en un escrito dirigido a la Presidencia de la República, Secretaría del Bienestar y a la Cámara de Diputados, precisan lo siguiente:
A nivel nacional 25 millones de personas se reconocen como indígenas y presentan los mayores índices de marginación, están dispersos en toda la República Mexicana, habitan en regiones con importantes recursos mineros, turísticos, biológicos, hídricos, forestales y eólicos, por lo que están en constante riesgo de ser desplazados o eliminados.
Y ahora, por si fuera poco, con la pandemia del coronavirus pendiendo sobre su cabeza como espada de Damocles, su situación no podría ser peor.