La industria farmacéutica, hacia desarrollar vacuna contra Covid-19
Elsa Rodríguez Osorio, Salud martes 24, Mar 2020Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- Una dieta bien balanceada contra el clima y la pandemia
La pandemia del Covid-19 es un desafío emergente que la industria farmacéutica se ha propuesto enfrentar con las armas de la innovación. A finales de 2019 se detectaron en China los primeros casos de una nueva enfermedad, el Covid-19, causada por el virus SARS-CoV-2, de la que hasta mediados de marzo de este año se habían reportado más de 200 mil casos y 9 mil muertes a nivel mundial. Las autoridades sanitarias de los países afectados han tomado medidas distintas para contener los brotes. La industria farmacéutica, por su parte, desde las primeras semanas de la epidemia decidió enfrentar el reto de desarrollar una vacuna efectiva contra el virus que libere una respuesta inmune precisa. En el caso de los virus que se transmiten por vía aérea, puede ser un poco más complicado, porque se necesita inmunidad local en la nariz o en otras mucosas. Se espera que el brote baje su velocidad al llegar el verano, lo que daría tiempo de prepararse para una eventual segunda ola, y así manufacturar el gran número de dosis que serán necesarias en caso de que este brote se convierta en una mayor pandemia. En lo que respecta al proceso de desarrollo de una vacuna, normalmente pasan dos o tres años hasta llegar a una vacuna candidata para humanos, y hay casos donde toma mucho más. El uso de vectores resulta ventajoso porque provoca pocas reacciones y es bien tolerado. Es una plataforma que consigue respuestas inmunes altas y duraderas- información: Tamiz Cuatrimestral https://amiif.org/tamiz/marzo-junio-2020/
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Febrero loco y marzo otro poco, así es, de manera brusca se presentan días con bajas temperaturas u otros con altas temperaturas y hasta lluvia. Estos cambios de clima pueden provocar enfermedades y, si a esto se agrega una mala alimentación el sistema inmune lo resiente. Europea de Seguridad Alimentaria, refiere que ciertas alteraciones, tales como herpes labial, caída del cabello, dificultades en la cicatrización o dolores musculares sin causa aparente pueden ser consecuencia de una inmunodepresión de bajo grado. El estrés prolongado, dietas inadecuadas o descansos insuficientes también pueden ser posibles causas del debilitamiento del sistema inmunológico. A continuación, algunas vitaminas y minerales que se relacionan con las defensas del sistema inmunológico: Vitamina C. Es un antioxidante que puede ayudar a proteger el cuerpo contra radicales libres. Ayuda a la formación de colágeno, el cual es una proteína que se relaciona con el mantenimiento de las barreras naturales contra las infecciones. Además de intervenir en la formación de otras proteínas que se encargan de encarar a los virus, impidiendo así la proliferación de estos en el sistema. Los alimentos que contienen vitamina C son frutas (guayaba, mango, piña, cítricos, fresas, melón) y verduras (pimientos, tomate, hortalizas en general). Vitamina E. Su utilidad radica en aumentar la respuesta del sistema inmunológico, haciendo más eficiente la acción de este ante organismos dañinos. Los alimentos que contienen vitamina E, son cereales integrales (pan, arroz y pastas) además de aceites comestibles (soja, trigo, oliva) y vegetales de hojas verdes y frutos secos. Vitamina A. Apoya en la inmunidad de las mucosas, como las del sistema digestivo, específicamente en el intestino, las cuales son una barrera natural contra las infecciones. Los alimentos que contienen vitamina A, en su mayoría son de origen animal (hígado, huevo) lácteos y sus derivados (mantequilla). Complejo B. La deficiencia de las vitaminas de este grupo, se relacionan en múltiples alteraciones tanto del sistema nervioso como del tubo neural (espina bífida). Además se encuentran deficiencias de anticuerpos (sustancias que combaten virus o bacterias que afectan el organismo). Los alimentos que contienen vitaminas del complejo B, son de origen animal: cereales integrales, frutas, verduras, lácteos y frutos secos, entre otros. Hierro. La deficiencia de este mineral es más común en mujeres de edad fértil y en embarazadas. La falta de hierro, disminuye la duplicación celular, además del crecimiento de estas, lo cual afecta directamente al sistema inmunológico. Los alimentos que contienen hierro en su mayoría son de origen animal y en menor medida los lácteos. Zinc. Los alimentos que contienen zinc son los mariscos, leguminosas, cereales, pescados, lácteos y huevos. Selenio. El déficit de selenio afecta a la inmunidad, disminuye la actividad bactericida y la respuesta de los anticuerpos (sustancias de la sangre que combaten infecciones). Los alimentos que contienen selenio son de origen animal principalmente marinos, cereales, frutas y verduras.¡ Asi que a alimentarse bien.¡