El triunfo de las mujeres
¬ Augusto Corro martes 10, Mar 2020Punto por punto
Augusto Corro
Los días 8 y 9 de marzo las mujeres tuvieron la oportunidad de demostrar su fuerza para exigir justicia.
Primero realizaron una marcha multitudinaria del Monumento a la Revolución hasta el Zócalo capitalino.
Al día siguiente efectuaron un paro nacional (#UnDíaSinMujeres), que consistió en no asistir al trabajo, escuela y no realizar labores domésticas.
Como nunca, las mujeres hicieron escuchar sus gritos de hartazgo contra la violencia de género.
Ante la negligencia de las autoridades de los niveles para atenderlas, el movimiento feminista decidió invadir las calles para mostrar su descontento.
Ante esas manifestaciones de miles de mujeres de todas las edades, los gobiernos municipales, estatales y federales tendrán que enviar señales de que recibieron el mensaje.
Y la respuesta deberá llevar ya acciones prácticas y urgentes para frenar la espiral de violencia que tiene aterrorizada a la población mexicana, por las muertes de mujeres, jóvenes y niñas.
Y si las marchas y acciones de protesta no son escuchadas, el movimiento feminista ya sabe qué camino seguir para exigir justicia.
Es urgente frenar las agresiones a las mujeres con la participación de toda la sociedad, pero principalmente con la participación de las autoridades, que están obligadas a brindar seguridad.
Datos del Inegi nos señalan que de 2015 a 2018 fueron asesinadas en nuestro país 12 mil 378 mujeres. En ese lapso solo se dictaron sentencias condenatorias en 407 casos.
Estas condenas de feminicidio representan el 3.2 por ciento de todos los casos de mujeres asesinadas en México.
Cabe señalar que en ocho estados no se dictó sentencia alguna contra feminicidas en el referido plazo. En general, el 80 por ciento de ese tipo de asesinos gozan de impunidad.
Las sentencias
Recientemente, los diputados elevaron de 45 a 65 años de cárcel a los feminicidas. Esa nueva pena no satisfizo a otros legisladores, quienes desde hace varios años demandaban la instalación de la pena de muerte.
¿Deben ser más severas las penas contra los feminicidas? ¿Usted qué opina amable lector?
Para otros sectores de la población el machismo, uno de los principales factores de violencia, tiene que atacarse en la raíz.
Es decir que en el seno de la familia debe empezar el cambio de una sociedad enferma a una sana. Donde desaparezcan las manifestaciones absurdas de superioridad del hombre ante la mujer.
En la familia tendrá que surgir el ejemplo positivo aleccionador que elimine la misoginia y el maltrato a que son sometidas mujeres de todas las edades.
La intervencion del gobierno
La lucha contra la violencia debe atacarse sin demora alguna. Los legisladores deben revisar los Códigos penales para agilizar los juicios, que ahora tardan años en concluirlos.
Debido a las protestas de las mujeres, las autoridades deberán responder con acciones rápidas y urgentes, en cambios de jueces o funcionarios que entorpezcan a la justicia.
Se debe concluir el viacrucis de las mujeres violentadas en sus derechos que buscan a alguien que las atienda y las ayude a resolver sus exigencias de justicia.
Es importante que las mujeres, jóvenes y niñas sean protegidas por leyes que castiguen el acoso sexual de que son objeto.
También que termine esa discriminación a las mujeres que practican los patrones que consiste en pagarles salarios menores en comparación con el de los hombres, aunque ellas y ellos desempeñen el mismo trabajo.
En el asunto del aborto, las mujeres deben decidir sobre su cuerpo. Se trata de un tema suficientemente discutido.
Debe ponerse fin al acoso sexual en las escuelas. Las jóvenes deben estudiar sin la presión de maestros abusivos.
En las manifestaciones de protesta, las mujeres jóvenes tuvieron una participación muy importante. Su dinamismo le dio a su lucha fuerza y valor, anuncio de mejores tiempos.
Las protestas del 8 y 9 de marzo serán registradas como dos fechas importantes de las luchas de las mujeres mexicanas que buscan justicia y fin de la impunidad de aquellos que las agreden.
Repito: la respuesta de las autoridades al movimiento feminista tiene que ser práctica, rápida y urgente. ¿Usted qué opina amable lector?