Guerra contra los plásticos
Eleazar Flores miércoles 19, Feb 2020Espacio Electoral
Eleazar Flores
TODOS A APOYAR.- Se trata de una larga campaña en beneficio de nuestra casa común, la tierra, a la que hemos agredido hasta el cansancio, por lo que la lucha para abatir ahora y evitar después las bolsas de plástico en mercados y supermercados debería tener el apoyo de todos.
Por ahora se va contra las bolsas de plástico, pero mañana la guerra será más dura, contra el vistoso plástico duro de lácteos y yogures, refrescos, conservas y todo lo demás.
CONCIENCIA.- Si todos tuviéramos un poco de conciencia social y ecológica, deberíamos de inmediato sumarnos a la campaña para que no se den más bolsas de plástico en supermercados y mercados, una mínima señal de que vamos lentos, pero por buen camino para empezar a recuperar la limpieza en las aguas de nuestros ríos, lagos, mares y océanos.
Obvio que la campaña inicia, pero viene el camino más duro, la lucha contra el plástico duro en el que todas las empresas nos ofrecen las distintas marcas de yogures, cremas, jugos y refrescos, éstos últimos por el alto consumo de los mismos, pues recuerde que México es el país número uno en el consumo de estas bebidas. Como verá, la lucha dura y larga apenas empieza.
Y es que falta incluir muchísimos productos más, que casi son interminables. Por ejemplo, los botes y cubetas de pinturas, mangueras y demás. Lo más delicado son los insumos de laboratorios y hospitales médicos, que no son de reuso y además, de mayor calidad, pues tienen que garantizar hermetismo total en todos sus productos.
EUROPA.- Con envidia de la buena, disfruta uno tomas televisivas de ríos, lagos, mares y océanos del viejo mundo, cuyo denominador común es lo cristalino de esas aguas paradisiacas. Si usted ha tenido la oportunidad de ser testigo presencial de lo que le describo, me dará la razón. Claro que en el viejo mundo hay excepciones de aguas no tan limpias pero son las menos.
A cambio, en ríos, lagos, mares y aguas de océanos que nos corresponden, desgraciadamente el panorama es totalmente contrario. Lastimosamente predominan playas sucias y el grueso de las basuras lo constituyen plásticos, preferentemente de cubetas y envases desechables de refrescos y otros productos. Todos de una u otra forma contribuimos a esa contaminación.
Esta lucha por mejorar nuestra tierra y nuestros mares la debemos adoptar desde ya, al margen de todos los partidos políticos y no se le vaya a ocurrir culpar a los neoliberales o a los conservadores, como ya sabe quién, pues deberemos con valor asumir nuestra responsabilidad sin culpar a nadie de lo que nosotros no hemos podido hacer.