Vergüenza nacional
Alberto Vieyra G. martes 10, Dic 2019De pe a pa
Alberto Vieyra G.
Al embajador de México en Argentina, don Óscar Ricardo Valero, lo agarraron con las manos en la masa robándose un libro. Su carrera diplomática parece haber terminado y todo indica que el régimen de AMLO lo mandará a la “rechintola” por haberse convertido en una vergüenza nacional.
El pasado 26 de octubre, don Ricardo Valero, de 76 años de edad, acudió en Buenos Aires, Argentina a la pomposa librería El Ateneo Grand Splendid, donde cuidadosamente envolvió en un periódico, como se puede observar en el video que le ha dado la vuelta al mundo, un libro con el título Giácomo Casanova, cuya autoría es del historiador y académico Frances Guy Chaussinand-Nogaret y después de pagar otros títulos iba saliendo a paso normal cuando de pronto, “¡pácatelas!” ¡sonó la alarma! y el policía lo detuvo en la puerta para que pagara libro que se le olvidaba pagar. Que le costaba haber pagado los 189 pesos, por cierto de pasta rústica y el asunto no se hubiese regado como pólvora por todo el mundo.
El presidente Andrés Manuel López Obrador se pondría inmediatamente a defender lo indefendible, pidiendo no lincharlo pues su carrera diplomática ha sido ejemplar y se trató de un error, ¡Pero que error tan garrafal!, porque Ricardo Valero quiso apantallar a los empleados de esa librería identificándose como el embajador de México en Argentina, seguramente ese fue su grande error. Todo habría quedado resuelto si el señor diplomático hubiese pagado el libro y el asunto no habría trascendido, ni se hubiese convertido en el gran escándalo diplomático que hoy exhibe al régimen lopezobradorista como un régimen inmoral y a la nación azteca como un país de deshonestos ladrones.
Lógico, todo el mundo “hace cera y pabilo” con Ricardo Valero. Los caricaturistas de México han hecho escarnio de muchas maneras. No tiene desperdicio el cartón de Rocha, en La Jornada que bajo el título de “Cuánto Valero este libro” retrata al diplomático mexicano exhibiendo en sus manos el libro robado como si lo estuviese promocionando. ¡Es una vergüenza nacional!
¿Qué más nos dice este imperdonable error? Para los estudiosos del carácter, el señor Ricardo Valero es víctima de un defecto que se llama avaricia que lo hace trizas y lo vuelve una marioneta de sus emociones robándose un libro o cualquier otro objeto que merezca respeto por el solo hecho de que no le pertenece a él. Sin duda que a don Ricardo Valero lo tentó el diablo y cayo redondito. Ahora lo que el señor López Obrador tiene que hacer es ofrecer una disculpa al pueblo argentino y buscar a otro diplomático honesto y retirar al señor Valero, mandándolo a Siberia, al Polo Norte, a la Antártida o en alguna otra región del planeta, donde nadie sepa de él y no exhiba al pueblo de México como una nación deshonesta. Pudo haber sido otra cosa de mucho más valor.
Pero fuera de este escándalo diplomático, me asalta una diplomática pregunta: ¿Evo Morales salió de México por órdenes de Donald Trump?…
Se dice que viajó a Cuba por cuestiones médicas. Es probable que esté enfermo, pues no hay que olvidar que a las casas viejas no les falta gotera, pero en el ámbito diplomático se asegura que Evo Morales viajará de Cuba a Argentina y no hay plazo para que retorne a México, donde le ha causado estragos políticos a su hospitalario amigo AMLO, quien a raíz de haberle otorgado asilo político sus preferencias se han desplomado peligrosamente, a grado tal de que el Presidente podría pasar y muy pronto del amor al odio.
No hay duda que, para el imperio capitalista del mal, el socialismo y comunismo son veneno puro y todo indica que el tío Sam maniobro para no tenerlo a Evo Morales como huésped en el patio trasero de la Casa Blanca.