Un remedo
Alberto Vieyra G. viernes 6, Dic 2019De pe a pa
Alberto Vieyra G.
Ni AMLO, ni Morena “son una encarnación de la izquierda mexicana” con esa histórica declaración, hecha en España al diario El País, el tres veces candidato presidencial, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, apodado “la máscara tarasca” o el moderno Nicolás Zúñiga y Miranda, le pegó el tiro de gracia al actual Presidente de la República que, efectivamente no encarna a la vieja izquierda mexicana y en cambio, va por el camino del socialismo-comunista del eje bolivariano.
La entrevista con el rotativo español no tiene desperdicio y al referirse de la comparación que López Obrador hace de su gobierno con los próceres de la Independencia, el cura Hidalgo y Morelos, el artífice de la Reforma, Benito Juárez, y nacionalista régimen de Lázaro Cárdenas, su hijo, que fue el primer “chilpayate” que vivió en la residencia oficial de Los Pinos, sin ambages, sostiene que López Obrador es sólo un remedo de tales personajes… Pero ¿Qué es un remedo? El “tumba burros” define que remedo es la imitación de alguien o algo, especialmente torpe o burlesco.
La periodista española Cecilia Ballesteros, quien entrevistó a Cárdenas pasó por alto preguntarle su opinión sobre la tambien grotesca comparación que hace AMLO con Mahatma Gandhi, Nelson Mandela y con Jesucristo. Seguramente que el ingeniero Cárdenas habría respondido lo que respondió cuando la periodista lo cuestionó sobre una posible reelección del presidente gringo, Donald Trump cuya respuesta sería: “Esa no es una pregunta para mí, sino para los psiquiatras”. ¡Bolas don Cuco!
Cuauhtémoc Cárdenas tiene mucha razón en cuanto a lo “desbrujulado” que está el disque régimen de la 4T de México porque la izquierda genuina no existe en México, se acabó en 1968 cuando la mayoría de los llamados líderes estudiantiles aprendieron a estirar la mano ante un régimen político corrupto y corruptor.
El régimen de AMLO no es de izquierda. Él es un social-demócrata, un renegado ex priista que lucra políticamente con el cuento de la 4T, haciendo que el país retroceda medio siglo, en momentos en que el mundo está inmerso en las nuevas tecnologías y nuevas políticas económicas y sociales a nivel mundial.
¿Qué nos dicen las tronantes declaraciones de Cuauhtémoc Cárdenas contra AMLO? La lógica nos dice que hay una ruptura política entre ambos, a pesar de que su hijo, Lázaro Cárdenas Batel esté agarrado de la ubre presupuestal como burócrata en Palacio Nacional. Y como Cárdenas le sabe muchas cosas a AMLO, éste declinaría polemizar con el ingeniero, a quien dijo que respeta.
Pero vayamos al grano en esos de las horrendas comparaciones: Hidalgo, Morelos, Benito Juárez y el general Cárdenas eran fundamentalmente hombres de Estado, virtud de la que adolece Andrés Manuel López Obrador.
Pero ¿qué son los hombres de Estado? De acuerdo con el sabio pensador ecuatoriano Rodrigo Borja Cevallos, los hombres de Estado son aquellos que piensan, ven y gobiernan para las futuras generaciones y no pensando en las próximas elecciones, y no como ocurre con López Obrador, que ya mandó que le hicieran un traje a la medida con su hipócrita reforma electoral de la revocación de mandato. No hay ninguna comparación entre esos históricos hombres de Estado y AMLO.
Porque mire usted cuando López Obrador habla de una austeridad republicana comparada con la austeridad de Benito Juárez, estamos ante una colosal mentira, porque la austeridad republicana del Benemérito de las Américas era real. Cuando triunfó la república ante los franceses con el fusilamiento de Maximiliano, en Querétaro las arcas de la nación estaban en banca rota, sólo 8 estados de la república tributaban a la federación, que no es el caso de López Obrador, quien reparte dádivas de poder con fines electorales para perpetuarse en el poder, todo disfrazado de austeridad republicana. Porque hoy tributan a la federación las 32 entidades de la república.
¡Odiosas comparaciones!, ¿Verdad?