Bolivia en una encrucijada

Ramón Zurita Sahagún lunes 18, Nov 2019

De frente y de perfil

Ramón Zurita Sahagún

 

 

Los tiempos cambian y en diferentes partes del mundo se presenta el hartazgo hacia los gobiernos longevos, basados en un mismo personaje, con todo y que las constituciones de sus naciones se lo permitan.

Resulta irritante ver como algunos políticos buscan perpetuarse en el poder, mientras otros buscan caminos alternos para dejar personajes de paja o encaminar a la familia hacia la perpetuidad en el poder.

Argentina es uno de esos casos sorprendentes en los que una sola familia detenta el poder, aunque lo hace de forma simulada.

Su  caso es excepcional, primero fue Néstor Kirchner cuatro años presidente, lo siguió inmediatamente, su esposa, Cristina Fernández, quien se sostuvo ocho años y ahora regresa la misma Cristina, en su carácter de vicepresidenta.

Luiz Inácio Da Silva (Lula) gobernó Brasil por ocho años, de acuerdo a los términos que mandata su Constitución y en Chile Michelle Bachalet gobernó por ocho años, aunque de manera alternada, pues así lo asienta su Constitución que permite la reelección, aunque no de manera seguida.

Sin embargo, en los tiempos recientes dos gobernantes son los que más se han perpetuado en el cargo, pues sus respectivas Constituciones lo permiten: Nicolás Maduro, desde 2013 y reelecto hasta 2025, quien se puede reelegir a perpetuidad y Evo Morales, quien renunció a su mandato que terminaría en enero de 2020.

Evo, presidente de Bolivia fue reelecto por enésima vez en unos comicios nada claros que suscitaron movimientos de protesta, en una nación sudamericana que ha vivido jornadas similares desde siempre.

Y es que en Bolivia se han gestado familias enteras que en épocas distintas han detentado el poder o concentrado el mismo por varios lustros.

Víctor Paz Estenssoro fue presidente de Bolivia debido a que promovió la reelección por cuatro mandatos, aunque fue derrocado en una ocasión. Su sobrino Jaime Paz Zamora, también alcanzó la Presidencia.

Los Siles, padre e hijos también lograron alcanzar dicha silla. Primero fue Hernando Siles Reyes, quien gobernó por cuatro años, años después asumió su hijo Hernán Siles Suazo quien gobernó por ocho y su otro hijo Luis Adolfo Siles Salinas lo consiguió de manera interina.

En Bolivia también han existido gobiernos que han sido de facto y constitucionales después como el de Hugo Banzer Suárez, quien gobernó primero de facto por siete años y después constitucionalmente por cuatro más.

Durante largas décadas, el pueblo boliviano se ha visto sometido a dictaduras largas y en otras ha vivido administraciones democráticas, algunas desaparecidas por golpes de Estado.

Hace poco, José Crespo Fernández, embajador de Bolivia en México, explicaba a Revista Personae (edición de noviembre) que Evo Morales se convirtió en un símbolo de los gobiernos progresistas latinoamericanos y que su triunfo en las urnas (20 de octubre) permite consolidar un proceso de cambio que le ha generado a Bolivia un desarrollo económico excepcional; un desarrollo social con equidad que no se había presentado en toda la historia del país.

Hoy Bolivia se encuentra en una encrucijada democrática.

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Del 12 al 15 de noviembre se rea- lizó en Irapuato, Guanajuato, la Expo Agroalimentaria que desde 1996 se celebra año con año y que contó con mil 300 expositores. Asistieron aproximadamente 126 mil personas, que dejaron una buena derrama económica, según anunció Mauricio Usabiaga, secretario de Desarrollo Económico de esa entidad, quien precisó la importancia de la que está considerada la principal feria del ramo en el país.

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