CNDH, INE, UNAM… en vilo
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 11, Nov 2019Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
Si la demanda en el sentido de que se reponga el procedimiento de elección de la titular de la Comisión Nacional de los Derechos (CNDH) no prospera, como lo piden diversos senadores y otros sectores de la población, mañana tomará protesta como ombudsperson la hija de la reconocida activista Rosario Ibarra de Piedra, quien, además de acompañar a su madre en su lucha por la búsqueda de personas desaparecidas, en su trayectoria profesional destaca que es sicóloga y en 2018 fue candidata a diputada por Morena. Ella se llama Rosario Piedra Ibarra y mañana asumirá la CNDH en medio de serios cuestionamientos de fraude en su elección.
En otros tiempos, quienes la eligieron tal vez a estas horas estarían tomando las calles y gritando que hubo fraude, pero como ahora son quienes gobiernan pues tal vez se les haga poco el desaseo que hubo en el referido proceso.
Aunque hay quienes exigen transparencia y refieren que la elección de la hija de Rosario Ibarra está en el aire, al no contar con los votos necesarios, ya que votaron 116 legisladores y solo se contabilizaron 114, es un hecho que la victoria está cantada para Piedra Ibarra, así será y con esa designación ganan quienes votaron a su favor, pero, hay que decirlo, pierde la CNDH, porque hoy más que nunca el país requiere de instituciones sólidas y las que se dicen autónomas requieren de la credibilidad de sus titulares.
Es cierto, no está en vilo un nombramiento, lo que está en vilo es el destino de ese organismo que hace 30 años surgió siendo parte de la Secretaría de Gobernación y cuenta con 20 años de haberse convertido en un organismo con plena autonomía de gestión y presupuestaria.
Son otros tiempos. Lo que en la actual administración se ha visto es que el gobierno no comulga con las directrices de organismos autónomos, pues más allá de sus resultados, el argumento es que son “una pesada carga administrativa y financiera” para el erario público. Bajo esa óptica damos razón a quienes hoy señalan que la CNDH está en vilo, y eso traducido al español es de esperarse que los resultados a favor de las víctimas sean inciertos.
Tal vez por eso aquella declaración del Presidente Andrés Manuel López Obrador, hecha un junio pasado, de que “la Secretaría de Gobernación tiene ya esa función principal, la defensa de los derechos humanos”, luego entonces la llegada de Rosario Piedra será para coadyuvar al desmantelamiento o liquidación de lo que en la actual administración consideran de poca utilidad.
Así las cosas en materia de derechos humanos, justo cuando por todos lados surgen reclamos y solicitudes de protección a este derecho fundamental del ser humano.
PASO SIN VER.- Lo que sucede en la CNDH es una historia que tal vez muy pronto sea la historia del Instituto Nacional Electoral (INE). Resulta que diputados del Movimiento de la Regeneración Nacional (Morena), mediante un comunicado de prensa, dieron a conocer que han presentado una iniciativa de reforma constitucional, mediante la cual pretenden recortar a 3 años la presidencia del órgano autónomo conocido como INE, donde desde 2014 es titular el consejero Lorenzo Córdova.
El diputado Sergio Carlos Gutiérrez Luna (Morena) planteó modificar al artículo 41 de la Constitución a fin de evitar que la conducción de dicho órgano “sea coto exclusivo de una persona durante 9 años y que sólo una visión encamine los trabajos de tan importante institución”.
De prosperar dicha iniciativa de ley, es de esperarse que el periodo para el que fue electo Córdova Vinello quiera ser recortado en fechas próximas toda vez que fue electo como primer titular de lo que hoy conocemos como INE en abril de 2014, y ahora el argumento es que el periodo de 9 años establecido actualmente, “fomenta la concentración de funciones en una sola persona, sin dar oportunidad a sus pares para desempeñar el cargo de manera rotativa, hecho que fortalecería la pluralidad de la institución y velaría por la democracia del país”.
Obvio, lo que parece que se pretende es hacer un movimiento con miras al proceso electoral de 2021, con un consejero presidente afín que cuente los votos con la transparencia suficiente como sucedió con el conteo de votos que favoreció a la titular de la CNDH. Total, solo se perdieron dos votos en el camino, y en esa ruta lo que queda es pensar que el destino del INE también está en vilo.
VA MI RESTO.- Con júbilo, la comunidad universitaria mayoritaria recibió la noticia de una reelección del Doctor Enrique Graue, méritos tiene el académico para seguir al frente de la UNAM. En el camino quedaron las aspiraciones de Angélica Cuellar, directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, y Pedro Salazar Ugarte, Director del Instituto de Investigaciones Jurídicas.
Hasta allí todo bien, pero una vez que se conoció el resultado de este proceso de auscultación entre los miembros integrantes de la Junta de Gobierno de la máxima casa de estudios, de inmediato también corrieron los rumores sobre quienes integrarán el nuevo equipo del rector, porque Graue fue reelecto más no sus colaboradores, y en ese proceso de movimientos se espera que quienes ocupen las carteras sean personajes que garanticen la autonomía universitaria y no lleguen para cubrir cuotas partidistas en la era de la 4T, porque de ser así, señalan, el mensaje sería un primer aviso de querer terminar también con la autonomía universitaria, y hasta ahí porque como veo doy.