Insubordinación
Alberto Vieyra G. viernes 13, Sep 2019De pe a pa
Alberto Vieyra G.
¡Basta de ultrajes a la dignidad de nuestros juanes!
En cuando menos media docena de ocasiones, elementos de las Fuerzas Armadas fueron humillados por “el pueblo bueno y sabio”, pero absurdamente el Presidente de la República, en su calidad de Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, hoy apodado el presidente guácala o fuchi les había dado instrucciones de no reprimir a la población y aguantar vara.
El pasado 10 de septiembre, un grupo de soldados que intentaban recuperar un automóvil y mercancías robadas en Acajete, Puebla, una turba de mas de 150 pobladores arremetieron a pedradas contra los elementos de la Sedena, que minutos después respondería con una severa advertencia a través de un comunicado oficial.
En el último párrafo se lee:
«La Secretaría de la Defensa Nacional hace del conocimiento de la sociedad que ante la ocurrencia de un delito y en los casos en los que el personal militar o de la Guardia Nacional acudan con para garantizar la seguridad y paz en el país y sean objeto de una agresión se actuará en su defensa legítima conforme a los principios del Uso de la Fuerza y su gradualidad, para proteger la vida e integridad física de los miembros de las Fuerzas Armadas, con estricto apego al orden jurídico vigente y a los derechos humanos».
¿Qué nos dice la advertencia del alto mando castrense? ¿Se mandó solo el general secretario? ¿Será que la tropa se insubordinó contra AMLO o todo fue de común acuerdo?
También nos dice la Sedena que seguramente los soldados ya están hartos de humillación, mientras el Presidente de la República es incapaz de aplicar el estado de derecho, que no necesariamente quiere decir reprimir, para garantizar la pacificación del país.
Quiera o no el presidente, tiene que actuar con mano dura y no con endeblez de carácter.
Hasta hoy, AMLO, como jefe de las instituciones nacionales se ha comportado como un auténtico bufón, en un hazme reír de propios y extraños, en esas condiciones el Jefe del Ejecutivo no garantiza el respeto a esas instituciones, pues no hay que olvidar que durante la campaña electoral exhortó una y otra vez a los mexicanos “a mandar al carajo a las instituciones”.
Hoy, el Ejército no está dispuesto a soportar más ultrajes a su dignidad advirtiendo “que actuará en su defensa legítima”.
Ante semejante advertencia, vale la pena recordar que el Ejército y en general las fuerzas armadas fueron adiestrados para matar, por lo cual, las turbas, plagadas presuntamente de delincuentes tienen que ser prudentes porque la calma ya se les acabó a nuestros juanes, mientras el presidente los manda al carajo con “un fuchi y un guácala”.
Pronto, muy pronto veremos si el alto mando de la Sedena se manda solo y si el presidente seguirá actuando como un payasito de la tele.
Y en otra cosa mariposa, el diputado morenista sin quehacer Charly Valentino, coterráneo de López Obrador clamó a pulmón y mandíbula batiente por un “sufragio efectivo, SÍ REELECCIÓN” y exigió que AMLO se reelija por 6 años. ¿De cuál fumaría ese legislador lambiscón y rastrero? …
Si viviese el ilustre maestro Salvador Novo ya le habría aplicado a don Charly Valentino aquella máxima que solía recetarles a los políticos gandules: “La ociosidad es el vicio de todas las madres”. Claro el dicho es al revés, pero así se lo recetaba Novo y seguramente así se lo habría enviado con dedicatoria para otro reeleccionista llamado Porfirio Muñoz Ledo convertido ahora en un diputado de las infanterías de Morena.