¿Acecha fantasma de la recesión?
Luis Muñoz jueves 1, Ago 2019Segunda vuelta
Luis Muñoz
Para el presidente Andrés Manuel López Obrador, el “fantasma de la recesión” no nos acecha, aun cuando algunos especialistas opinan lo contrario.
Ayer miércoles, el INEGI presentó los resultados de la Estimación Oportuna del PIB Trimestral, los cuales indican que éste aumentó 0.1% en términos reales en el trimestre abril-junio de este año frente al mismo periodo previo con cifras ajustadas por estacionalidad.
Para el líder de Acción Nacional, Marko Cortés, los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía “confirman la desaceleración económica” al reportar crecimiento negativo en términos reales con respecto al mismo trimestre de 2018. A través de su cuenta de Twitter, urgió al gobierno federal a reconocer los errores y corregir el rumbo en materia económica.
En su conferencia mañanera, el presidente López Obrador desestimó los datos del INEGI y dijo que la economía “va bien”.
En un comunicado, el INEGI desgloso que por componentes, las Actividades Terciarias crecieron 0.2%, mientras que las Primarias cayeron (-) 3.4%. Por su parte, las Actividades Secundarias no mostraron variación durante el segundo trimestre de 2019 respecto al trimestre precedente.
En su comparación anual, la Estimación Oportuna del Producto Interno Bruto con series desestacionalizadas tuvo un incremento real de 0.4% en el trimestre en cuestión con relación al trimestre abril-junio de 2018. Por actividades económicas, el PIB de las Actividades Primarias creció 1.7% y el de las Terciarias 1%, en tanto que el de las Secundarias descendió (-) 1.6% en el mismo periodo.
El Instituto indica que las estimaciones oportunas proporcionadas en el comunicado podrían cambiar respecto a las cifras generadas para el PIB trimestral tradicional, las cuales se publicarán el próximo 23 de agosto de 2019.
Cabe señalar que la estimación oportuna del PIB trimestral ofrece en el corto plazo, una visión completa y coherente de la evolución de las actividades económicas del país para apoyar la toma de decisiones. La metodología que presenta el INEGI para la estimación oportuna del PIB Trimestral de México utiliza información estadística oportuna de las fuentes directas (encuestas en establecimientos y en hogares y los registros administrativos de diversas dependencias de gobierno) y los cálculos de la información faltante, que se hacen a través de modelos econométricos, para la integración del dato final.
Agrega que esta integración se hace conforme a la metodología del Sistema de Cuentas Nacionales de México (SCNM). Entre las virtudes de esta metodología está la precisión del dato estimado respecto al dato del cálculo tradicional. Esto se debe a que solo se estima una parte del trimestre de referencia (con cerca del 75%, aproximadamente, de información directa disponible) y a la rigurosa selección de los modelos que pronostican los datos faltantes.
Explica el INEGI que la gran mayoría de las series económicas se ven afectadas por factores estacionales, éstos son efectos periódicos que se repiten cada año y cuyas causas pueden considerarse ajenas a la naturaleza económica de las series, como son las festividades, el hecho de que algunos meses tienen más días que otros, los periodos de vacaciones escolares, el efecto del clima en las diferentes estaciones del año, y otras fluctuaciones estacionales como, por ejemplo, la elevada producción de juguetes en los meses previos a la Navidad provocada por la expectativa de mayores ventas en diciembre.
Desigualdad en pensiones
La desigualdad que existe en el sistema de pensiones del país, plantea la necesidad de disminuir, en el caso de las mujeres, el número de semanas de cotización para tener derecho al goce de las prestaciones del seguro de vejez, señaló la diputada federal Mirtha Villalvazo Amaya, de Morena.
Es decir, agregó, disminuir la cotización de mil 250 a mil 145 semanas y para ello propuso impulsar reformas a los artículos 154 y 162 de la Ley del IMSS.
Recalcó que el sistema de pensiones “hace diferencia entre hombres y mujeres” porque los requisitos que deben cumplir ambos, son los mismos, pero sus condiciones para lograr un empleo formal, mantenerlo y gozar de prestaciones, son distintas.
La legisladora subrayó que culturalmente las mujeres son quienes abandonan más fácil sus empleos o toman trabajos que requieran jornadas cortas para hacerse cargo de diversas responsabilidades en el hogar, lo cual ocasiona que tengan menos semanas de cotización respecto a los hombres, impidiendo así que disfruten de las prestaciones que la ley vigente ofrece, como es la pensión.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en su Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), cerca del 60% de las mujeres se encuentran en el sector informal, por lo que la tasa de informalidad de ellas es marginalmente mayor que la de los hombres. Además, la mujer se enfrenta a mayores dificultades al intentar entrar al mercado formal, con un buen salario donde valoren sus aptitudes como trabajadora y éstas le sean retribuidas de igual forma que a los hombres.