En IMSS Puebla realizan cirugía de columna vertebral a niña
Elsa Rodríguez Osorio, Salud miércoles 26, Jun 2019Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- Hay que superar el estrés emocional, para evitar el bruxismo
- Pintura antibacterial para no contagiarse de enfermedades respiratorias
En el Hospital de Traumatología y Ortopedia del IMSS en Puebla, se realizó con éxito una cirugía de 5 horas, para corregir la pronunciada deformación congénita en la columna vertebral de una niña de 4 años, que podía poner en riesgo órganos vitales como corazón y pulmones.
La pequeña tenía problemas para desplazarse, mala postura y ahora puede correr. Desde su nacimiento, una de sus vértebras no se desarrolló adecuadamente, lo que se conoce como escoliosis congénita infantil.
Adicionalmente, a los cuatro meses de edad se le diagnosticaron problemas cardiacos. La literatura médica indica que los infantes con ese padecimiento pueden ser intervenidos quirúrgicamente preferentemente a partir de los ocho años.
Sin embargo, el crecimiento y la falta de formación de un lado de una vértebra aceleró la deformidad de la columna vertebral de la pequeña, por lo que los especialistas decidieron intervenirla a los cuatro años de edad para detener y corregir la severa malformación. La cirugía, realizada en febrero pasado, consistió en retirar la vértebra con mala formación para lograr la estabilización y alineación de la columna, y con implantes pediátricos se pudo concluir el procedimiento.
La pequeña Fátima tenía dificultades para desplazarse y mantener una buena postura, ya que su columna vertebral tenía forma de “S”, y sus hombros y caderas estaban desnivelados, pero al cabo de los meses y por la exitosa cirugía, a cargo del equipo multidisciplinario del IMSS, ahora es capaz de correr. José Luis García Navarro, cirujano de columna de dicha institución, que encabezó el equipo médico, explicó que se recurrió a un sistema de implantes pediátricos y a la innovación de técnicas médicas para estabilizar la columna y darle una nueva posición.
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Disminuir el estrés emocional o situaciones de tensión, ayuda a evitar dolor mandibular y el desgaste o pérdida temprana de las piezas dentales, señala el cirujano maxilofacial del Hospital General Regional número 32 Villa Coapa, del IMSS, Miguel Ángel González de Santiago, dijo que estas personas son propensas a rechinar los dientes durante la noche —condición que también se conoce como bruxismo—, afecta la articulación témporo mandibular.
Este cuadro ocasiona dolor articular, que puede extenderse hacia el oído medio, por lo que al iniciar estos síntomas, se debe acudan a la clínica familiar con el cirujano dentista, quien determinará las medidas necesarias de tratamiento; y de ser el caso, recibir atención especializada en cirugía maxilofacial. El tratamiento para el bruxismo moderado o leve, consiste en terapias y medidas generales de reposo mandibular, dieta, fisioterapia, así como uso de guardas o férulas de acetato o acrílico para uso nocturno, principalmente, cuya función es distender el espasmo muscular masticatorio. El bruxismo no puede prevenirse, pero hay que mantener una vida sana, reducir las situaciones de estrés y visitar regularmente al dentista.
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La empresa Comex aportó pintura antibacterial en diversos espacios de la Casa Ronald McDonald a fin de reducir contagios de enfermedades respiratorias y gastrointestinales comunes en diversos espacios de esta institución que acoge a pacientes y familiares de escasos recursos que requieren tratamientos médicos a los que no tienen alcance en sus lugares de residencia, brindándoles un hogar donde llegar, comer y descansar mientras acompañan a sus hijos a recuperar la salud, expresa Gabriela Gatica, directora de la Fundación Infantil Ronald McDonald México. Las bacterias afectan en mayor medida a las personas en condiciones de vulnerabilidad inmunológica como mujeres embarazadas, bebés, adultos mayores y personas con enfermedades inmunodeficientes, por lo que la prevención y la disminución de contagios es fundamental.
La doctora Karina Arce afirma que la principal vía de transmisión de la mayoría de las infecciones en la edad pediátrica es por partículas expulsadas al exterior después de toser, estornudar o hablar, o por la ingesta de agua o alimentos contaminados; por lo que es necesario limitar este contagio con el uso de cubre bocas, lavado frecuente de manos, uso de alcohol en gel, garantizar la adecuada preparación de alimentos, asegurar el saneamiento del agua, así como evitar el hacinamiento. Aunado a la adecuada limpieza de las superficies con materiales antisépticos, así como procurar la reducción de bacterias en ambientes cerrados ayudará a conservar el entorno lo más limpio y libre de bacterias posible.