Reporte previo: en el Senado nadie gana más que López Obrador
Roberto Vizcaíno miércoles 19, Jun 2019Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
Todo bajo control… | Luis Xavier
El próximo lunes 1 de julio en un acto con Zócalo lleno, el presidente Andrés Manuel López Obrador rendirá un informe de lo que habrá hecho su gobierno hasta entonces.
Todo sin duda, y sin temor a equivocarnos, se resumirá en una de sus frases: “Vamos requetebien”.
Cierto, habrá quienes le tengan preparado un contra informe con una larga lista de fallos, errores, incumplimientos, medias verdades, incongruencias, algunas mentiras y lo que quiera usted sumarle.
Nada de lo que contenga esa lista le va a disminuir su exaltación y sus afirmaciones.
Por lo pronto Ricardo Monreal desde el Senado lo apoya con un informe colateral en el que afirma que, con el impulso al Plan de Austeridad Republicana promovido desde el primer día de la LXIV Legislatura, “no existe senador o funcionario alguno que gane más que el presidente de la República”.
Con ello Monreal, líder de la mayoría senatorial de Morena, no sólo busca la mirada aprobatoria del jefe político de la 4ta Transformación, sino que da respuesta a informaciones de Excélsior que en días anteriores relatan que en la cámara alta existen asesores y otros con altos ingresos, ajenos a la austeridad que dicen seguir los lopezobradoristas.
Los senadores, dice el presidente de la Junta de Coordinación Política, perciben una dieta neta de 105 mil pesos mensuales, en tanto que, en el tabulador para empleados y funcionarios, el puesto más alto tiene un ingreso neto de 104 mil pesos mensuales.
Es decir, ingresos dentro de lo señalado por el diario antes mencionado.
El zacatecano recordó que hace casi un año, el 1 de septiembre del año pasado, en el arranque de la actual legislatura, se comenzó a aplicar un ambicioso Plan de Austeridad Republicana que fue respaldado por todos los Grupos Parlamentarios, cuyo ahorro inicial fue de más de 600 millones de pesos.
Aprobado por el pleno el 18 de septiembre pasado el acuerdo puso fin al uso indiscriminado de recursos económicos para vehículos, gasolina, choferes, guaruras, asesores, telefonía celular, bonos, estímulos, complemento de aguinaldo, así como gastos por concepto de comidas, viáticos, viajes y los seguros de separación individualizada y de gastos médicos mayores, entre otros.
Y se recortaron en un 50% las asignaciones a los Grupos Parlamentarios, y en un 30%, los techos presupuestales de apoyos técnicos a senadoras y senadores.
Hoy, con dos períodos cumplidos y a punto de iniciar el tercero de esta Legislatura, el Senado, afirma Monreal, refrenda su compromiso de mantener vigente el Plan de Austeridad Republicana, que es aplicado en cuatro rubros fundamentales: recursos humanos, materiales, económicos, así como en el trabajo legislativo y parlamentario.
Todo en orden y dentro de lo previsto.
¡Mienten!
Tardó un poco, pero finalmente ayer el ministro Eduardo Medina Mora respondió a las acusaciones de haber realizado supuestas transferencias por más de 103 millones de pesos a bancos ingleses y de EU lo cual rebasa por mucho sus ingresos reportados al fisco.
En una carta de siete páginas dirigida a sus compañeros ministros de la Suprema Corte, Medina Mora detalla esos envíos a sus cuentas en bancos extranjeros que suman 7.5 millones de pesos, y no como se ha publicado, de 103 millones de pesos.
Medina Mora indica que se alteró la información con el obvio intento de producir una percepción ciudadana en su contra. Las transferencias en pesos se tomaron como depósitos en libras esterlinas y en dólares lo cual infló exageradamente los montos.
En su carta, el ministro indicó que El Universal y sus fuentes violaron sus derechos a la privacidad y al honor, ya que sin su consentimiento publicaron datos privados que corresponden al secreto bancario y fiscal.
Comentó: como miembro del Poder Judicial de la Federación y como ciudadano, “me parece alarmante que se efectúen señalamientos en los que se tergiverse información que además fue obtenida de manera ilegal”.
Medina Mora no lo dice ni lo sugiere en su carta, pero la información publicada por El Universal en su contra tiene la clara e inocultable huella, y el fuerte tufo que despide todo lo que toca este sucio sujeto llamado Santiago Nieto, hoy titular de Inteligencia Financiera de Hacienda, que surge de las cloacas de la asesoría de Miguel Barbosa en el Senado.
Hoy actúa como el marrullero número uno de las malquerencias de AMLO, para hacer “trabajos de desprestigio” como el de Medina Mora. A él se debe todo el golpeteo mediático contra Emilio Lozoya.
AMLO, bajo el ojo crítico
El buen ánimo y desmesurado optimismo de Andrés Manuel López Obrador sólo se hunden cuando sufre el embate de Donald Trump y el de las calificadoras.
Frente a los golpes de Trump el tabasqueño esgrime su pañuelo blanco. Pero ante los descontones de las calificadoras enfurece.
En estos días Moody’s bajó de nuevo la perspectiva de crecimiento de México para 2019 de 1.6% a 1.2%, muy lejos ya del 4% prometido por AMLO para diciembre próximo.
Ya no llega a lo prometido ni con un milagro del Santo Niño de Atocha.
Y ahora viene de nuevo la proyección de Fitch Ratings calificadora que ha señalado que “no estamos muy confiados en que AMLO cambie a México”.
Y para precisar lo que vendrá, James McCormack, jefe de Calificaciones Soberanas de Fitch adelantó que el mayor riesgo al que se enfrenta López Obrador es el tamaño de la deuda de Pemex.
Por si usted lo había olvidado, le reiteramos que Pemex es la petrolera más endeudada del mundo, con pasivos que bordearon los 106 mil 500 millones de dólares, con bonos con vencimiento en 2027.
Hace unos días el subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, dijo que la desgravación en el impuesto a Pemex representa 15 mil millones de pesos que son equivalentes a “3 milésimas del presupuesto federal. Tenemos poco a poco que ir desgravando a Pemex pero a un ritmo que le permita a la finanzas mantenerse”.
Al respecto, el encargado de las calificaciones soberanas de Fitch Ratings indicó:
“No quisiera contradecir al secretario, lo que vemos es que Pemex tiene 160 mil millones de dólares de deuda, que eso no calificaría ni siquiera en categoría ‘B’, es un crédito débil de grandeza gigantesca y no sabemos qué tipo de soporte es el que necesite.
“Pemex es una fuente importante de entradas al gobierno. Si el gobierno reduce la toma de Pemex para dejarlo con más gasto para inversión y si el gobierno tiene problemas para sacar más recursos, ¿de donde los va a sacar?, no vemos que esto se vaya a desenvolver más adelante”.
Es decir…
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