Es momento de mostrar la unidad nacional
Miguel Ángel Rivera viernes 7, Jun 2019Clase Política
Miguel Ángel Rivera
Andrés Manuel López Obrador llegó a la Presidencia de la República impulsado por una, inusual en estas épocas, votación de más de 30 millones de personas y mantiene una todavía menos frecuente aceptación que en muchas encuestas supera 70 de 100 puntos.
Esa gran popularidad y SU respaldo están a prueba actualmente, pero sobre todo se tendrá que demostrar a partir del domingo venidero, cuando se realice en Tijuana un gran mitin convocado directamente por el primer mandatario para mostrar precisamente en la línea fronteriza la unidad de los mexicanos frente a las amenazas del presidente de los Estados Unidos, el agresivo multimillonario Donald Trump, que trata de imponer a toda costa su lema “América Primero”, entendida América sólo como los Estados Unidos, sin importar el resto del Continente y México como el principal enemigo.
No es fácil. Para muchos mexicanos el modelo a seguir son los Estados Unidos y son millones los que aspiran a realizar el “sueño americano”. También, otros millones ya residen en la Unión Americana.
Pero la unidad entre los mexicanos es obligada. Hacer frente a las amenazas que podrían convertirse en realidad a partir del lunes venidero implica olvidar momentáneamente diferencias con el presidente López Obrador y su equipo de gobierno. Se quiera o no, en estos momentos, como resultado de la inusitada votación del año anterior, ellos representan en este momento a nuestra nación.
“Indudablemente una de las consecuencias que podríamos tener (si Estados Unidos aplica aranceles a las mercancías mexicanas) es que las empresas exportadoras sean menos competitivas de las condiciones de hoy en día; otra consecuencia es el despido de personal, esa es la preocupación del presidente Andrés Manuel López Obrador como de todos los gobernadores que le hemos manifestado el apoyo y respaldo total”, afirmó al respecto el mandatario de Durango José Rosas Aispuro.
Las palabras del duranguense, priísta de origen, pero que llegó a gobernador al frente de la coalición integrada por el PAN, el PRD, PT y Convergencia (ahora Movimiento Ciudadano) forman parte de un llamado para hacer realidad y, sobre todo, mostrar de manera efectiva la unidad de México.
“Que el gobierno de Estados Unidos vea que estamos unidos”, dijo Rosas Aispuro y esa solidaridad se deberá mostrar en principio el domingo venidero en Tijuana.
De acuerdo con informes oficiales, el presidente López Obrador ha convocada para aparecer en la ciudad fronteriza a los gobernadores de todas las entidades federativas, senadores, diputados, ministros del Poder Judicial Federal y toda suerte de funcionarios y gobernantes.
En este caso, todos los vuelos, que son muchos a Tijuana desde todos los rumbos del país, resultarán insuficientes, por lo cual en aras de la pregonada unidad, los “duros” del gobierno de Morena deberán ser indulgentes y no recriminar a quienes se trasladen en vuelos privados.
Pero no se trata sólo de “pasar lista”, pues se requieren acciones concretas para demostrar la solidaridad en los hechos.
Por ejemplo, en su llamado, el gobernador de Durango informó que su administración, por conducto de la Secretaría de Desarrollo Económico, continuará brindando todo el apoyo a empresas establecidas, así como a nuevos proyectos locales, a fin de estar preparados ante cualquier decisión.
México parece ceder
En su conferencia matutina, el presidente López Obrador reiteró que se respetarán los derechos humanos de los migrantes que cruzan por territorio nacional, pero en lo que parece un matiz un poco diferente, dijo que su gobierno exigirá que se respeten las leyes nacionales.
Por su parte, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, aseguró que México tiene el derecho de reforzar sus medidas de control migratorio y seguridad, tal como ocurrió ayer por la tarde en Chiapas cuando un grupo de alrededor de 500 migrantes irrumpió por la fuerza.
La funcionaria manifestó extrañeza de que hubiese aparecido una nueva caravana y que algunos de sus integrantes actuaran con violencia, justo cuando se realizaba la reunión en Washington del canciller mexicano, Marcelo Ebrard con el Vicepresidente, Mike Pence y el secretario de Estado, Mike Pompeo.
Nosotros lo que queremos es que la gente entre ordenada, no irrumpa a nuestro país, nosotros tenemos nuestra soberanía, tenemos nuestras leyes, destacó la también ministra de la Suprema Corte en retiro.
Lo que queremos – y no me cansaré de decirlo – una migración ordenada, segura y regular, entonces tienen que regularizarse y entrar en una forma ordenada, pero esta irrupción violenta en el puente de Chiapas pues como que me parece un poco coincidente, por decirlo menos, añadió la funcionaria mexicana, quien admitió que se analiza la posibilidad de reforzar la vigilancia en la frontera sur.
Más tarde, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, quien encabeza la delegación mexicana que negocia en los Estados Unidos que no se apliquen sanciones económicas a las mercancías, dijo que a pesar de que no se han concretado acuerdos, se mantiene el optimismo acerca de la posibilidad de evitar las sanciones anunciadas por el belicoso Donald Trump.
Por lo pronto, se mantienen abiertas las negociaciones.
La posibilidad de un acuerdo negociado recibió el refuerzo de una información del influyente diario de los Estados Unidos The Washington Post en el sentido de que México y Estados Unidos alistan un acuerdo que reforzará la vigilancia militar en la frontera de México con Guatemala y facilitará la deportación de centroamericanos desde Estados Unidos.
En su portal de Internet, el Post precisó que el acuerdo no está cerrado y el presidente Donald Trump aún puede rechazarlo, pero detalla que México ha ofrecido desplegar hasta seis mil elementos de la Guardia Nacional a la frontera con Guatemala, que reduciría el número de migrantes que ingresan con rumbo a Estados Unidos.
Una versión parecida fue acerca del despliegue de la Guardia Nacional difundió la agencia de noticias Reuters, que al igual que el diario de la capital de Estados Unidos citó a dos fuentes no identificadas, pero la agencia precisó que un portavoz de la Secretaría de Gobernación negó el ofrecimiento.
De cualquier forma, en torno a estas versiones, no es posible olvidar el dicho popular que dice “cuando el río suena, agua lleva”.
En tanto, se informó que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en coordinación con la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y distintas agencias del Gobierno de México, bloquearon las cuentas bancarias de diversas personas físicas y morales que presuntamente han participado en el tráfico de personas migrantes y la organización ilegal de caravanas migrantes.
A partir del movimiento de capitales, la UIF identificó un grupo de personas que, en el periodo de paso de las caravanas migrantes, realizaban desde Chiapas y Querétaro operaciones inusuales a distintos países, incluidos algunos considerados jurisdicciones de riesgo por el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
Más allá de las negociaciones México-Estados Unidos, la mayor oposición a los intentos de imponer sanciones surgirá dentro de la propia Unión Americana.
Por lo pronto, la dirigente de la fracción del partido Demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, destacó que la ley en la que supuestamente se basa Trump para imponer sanciones se diseñó para castigar a enemigos y no a un aliado.
Obviamente, Pelosi está en contra de la política agresiva del mandatario de los Estados Unidos. “No es la forma de tratar a un amigo”, sentenció Pelosi en una conferencia de prensa.
Por su parte, el representante del Partido Republicano en México, Larry Rubín, confió en que México y Estados Unidos alcancen un acuerdo durante los siguientes días para resolver la problemática de migración ilegal e indicó que “nosotros no vemos como probable que se apliquen” las anunciadas sanciones.
Rubín coincidió con lo expresado por otros miembros del Partido Republicano, al que pertenece Trump, en el sentido de que aplicar aranceles a las mercancías mexicanas, no es lo más adecuado para el consumidor de los Estados Unidos y sería contraproducente para su partido con vistas a las próximas elecciones.