“Muerte en San Jerónimo”, de Óscar de Muriel
Cultura jueves 30, May 2019En la ruta de las letras
Patricia Correa
- Editorial Montena presenta esta novela detectivesca que se inspira en Sor Juana Inés de la Cruz
Alguien (o algo) se ha infiltrado en el convento de San Jerónimo. Monjas y esclavas por igual aparecen sacrificadas en el altar, a la usanza de los sangrientos rituales precolombinos. Todas las hermanas se culpan entre sí. Todas tienen algo que ocultar. Muchas, incluso, le achacan las muertes a posesiones demoniacas. Éste es el panorama que se encuentra Alina, joven novicia, al tomar los hábitos. Junto con Matea, su fiel doncella indígena, se ve forzada a unir fuerzas con la excéntrica Juana Inés de la Cruz, y entre rezos, guisos, cantos y poesía inoportuna, tratarán de esclarecer la terrible verdad detrás los asesinatos. En entrevista exclusiva para DIARIO IMAGEN, el autor de “Muerte en San Jerónimo”, Óscar Muriel, comentó:
—¿Cómo surge esta novela?
“Siempre me ha gustado mucho la novela detectivesca, se me ocurrió la idea hace seis años de Sor Juana detective, lo deje olvidado en un cajón mientras escribía otras cosas, había escrito las primeras 40 páginas, que están casi sin cambios, mientras más me ponía a investigar me di cuenta que Sor Juana, hubiese sido una detective perfecta, con todos los conocimientos que ella tenía de química, de física, de como funcionaba la mente humana, ella hubiera sido perfecta para investigar crímenes”.
—En esa época (1689) la mujer tenía dos opciones: casarse o irse al convento… Háblanos de esto:
“Hubo dos elementos que incluso me sorprende que todavía tenga tanta relevancia, el primero, son las oportunidades para la mujer, aunque actualmente se ha hecho mucho siento que todavía hay ciertas reglas que se esperan de la mujer, antes se esperaba que la mujer fuera bella y obediente, ahora se espera que sea bella e independiente, culta, leída, yo siento que se le exige más a la mujer en estos tiempos, y siento que otro elemento que sigue tan vigente, es el racismo, que más incluso que tu género, lo que marcaba las oportunidades de la vida era tu casta, por eso en la novela uno de los personajes principales es indígena, originalmente Matea fue un personaje necesario, porque las monjas tenían el voto de clausura, no podían salir del convento, no podían salir a buscar pistas, y por eso Matea se vuelve indispensable”.
—En el libro está la descripción a detalle del convento de San Jerónimo, esto es fascinante para el lector…
“Los libros que más me gustan son en los que sientes que estás ahí, y cuando te dicen a que olía, que es lo que comía la gente, me encantan los libros así, super atmosféricos, como dices fue mucha investigación, desde el año pasado fui al Claustro de Sor Juana, casi casi todos los lunes, la biblioteca esta abierta al público, yo esperaba que casi no hubiera nada de información por las Leyes de Reforma, pero hay planos de como era San Jerónimo, que partes fueron anexando, el mapa que pusimos en el libro, es lo más cercano a lo que sabemos”.
—El libro te mantiene al filo de suspenso en cada capítulo…
“Eso es lo que me encanta, así como lo hacía Agatha Christie, así como que de pronto todo lo que has leído de la novela de repente cambia de forma, y empiezas a decir por esto pasó tal cosa, aunque es muy difícil lograr ese balance de poner suficientes pistas para que tenga sentido, pero también ocultarte lo suficiente para que no sea tanto obvio y resulte sorpresivo al final”.
—¿Por qué elegir a Sor Juana, que es lo que te inspira de ella para hacer esta novela?
“Siempre me gustaron mucho los sonetos, la biografía la conocí por los sonetos, fue así como el chispazo de porque no hacer a Sor Juana detective, y mientras más investigaba más elementos encontraba, también soy súper fan de Umberto Eco (El nombre de la rosa), la atmósfera que te da el convento, el incienso, las velas, la oscuridad, el hecho de que las monjas estén encerradas, el hecho de que tienes a la monja más inteligente de la historia ahí, me sorprende que no se le hubiera ocurrido a nadie más antes, fue suerte mía”.