Aeroméxico y Delta Airlines celebran segundo aniversario de alianza y hablan de los Boeing 737 MAX, tras las pérdidas económicas registradas
Turismo miércoles 29, May 2019De cinco estrellas
Victoria González Prado
- El Aeropuerto Internacional de Campeche obtuvo la certificación de “Calidad Ambiental”, otorgada por la Profepa
Con motivo de la celebración del segundo aniversario de la alianza entre Aeroméxico y Delta Airlines, Paul Verhagen, director de Ventas Internacionales de Aeroméxico; Nicolás Ferri, director de Alianzas de las Américas de Delta Airlines y James Sarvis, vicepresidente ejecutivo de Operaciones, Aeroméxico, en conferencia de prensa aseguraron que analizan opciones de compensación por parte del fabricante del Boeing 737 MAX, tras las pérdidas económicas que ha registrado derivado de la puesta en tierra de los seis aviones que de ese modelo tienen, como medida precautoria, tras el accidente del vuelo de Ethiopian Airlines y Lion Air.
James Sarvis dijo: “estamos haciendo mucho para contrarrestar el impacto del MAX. Tenemos contratos, estamos considerando nuestras opciones, sí, nos ha impactado y puede haber un impacto futuro porque nos atrasa los aviones que habíamos ordenado.
Por su parte, Nicolás Ferri, dijo que analizan con el fabricante “la ayuda” que les pueda proporcionar.
Sin mencionar una cifra sobre las pérdidas económicas por mantener en tierra los aviones, comentó que tenerlos en óptimas condiciones aún sin operar, a la aerolínea le representa gastos significativos.
En su reporte trimestral mencionaron que su capacidad disminuyó 3 por ciento, derivado de la ausencia de sus MAX, además, espera que la falta de esos aviones genere reducción en ingresos.
Sarvis explicó que dicha medida representa gasto adicional a la aerolínea, ya que se deben de tener los seis 737 MAX- 8 listos para su operación, por lo que se deben realizar trabajos de preservación de la aeronave, proceso que se contrarrestará una vez que vuelva a volar.
Adicionalmente, los pilotos deben de llevar a cabo entrenamiento nuevo para responder a los cambios que llevará a cabo Boeing en dicho modelo.
“Tenemos gran fe en esta nave, tenemos fe en Boeing, el Dreamliner es un sueño para volar y el 737 que es parte de nuestro futuro, tenemos más de 60 en orden. Fueron 14 mil horas, no se habían tenido problemas en el desempeño del avión, los pilotos del MAX son lo que apoyan este avión, y nos llevan a nosotros que no somos pilotos a tener fe en ese avión”, señaló James Sarvis
De igual forma, mencionó que hasta el momento no hay fecha exacta para el regreso a operaciones de los 737 MAX, sin embargo, se espera que sea a partir del próximo mes. La aeronave no comenzará a volar si no están ‘150 por ciento” seguros que es avión que cumple con los niveles de seguridad.
En este sentido, comentó que trabajarán en “educar” al pasajero para que tengan gran confianza al hacer uso de este modelo, y aseguró que de “hecho ya estoy apuntado para el primer vuelo con mi familia, porque nosotros hablamos con ejemplo”.
En marzo pasado, Aeroméxico decidió suspender temporalmente la operación de sus seis equipos Boeing 737 MAX en tanto se cuente con información contundente sobre las investigaciones del accidente del vuelo de Ethiopian Airlines.
Sobre los trabajos que se llevan a cabo en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM, Sarvis, mencionó que es positiva la inversión que se realice, así como la construcción de una tercera terminal, ya que abonaría al crecimiento de la alianza con Delta.
“Eso nos vendría muy bien, ya que se haría verdad la promesa de expandir los vuelos a través de la frontera”, sostuvo.
Aunque, afirmó que en la Terminal 2, ya no cabe una aerolínea más y que junto con Delta tiene la mayor parte de las posiciones remotas, por lo que ,en los próximos tres años, se visualizan como retadores porque hay demasiadas líneas aéreas en dicha infraestructura.
De la celebración los directivos comentaron que fue en mayo de 2017 inició operaciones el Acuerdo de Colaboración Conjunta transfronterizo más grande del mundo, entre Aeroméxico y Delta, que hoy celebra dos años con la cifra de 14.4 millones de pasajeros transportados.
De acuerdo con Nicolás Ferri, gracias al joint venture entre ambas compañías, en dos años se ha duplicado el número de viajeros transportados entre México y Estados Unidos, en los más de mil 100 vuelos semanales en 33 rutas, que ofrecen en conjunto.
Ferri destacó el incremento de 11.3 por ciento de operaciones a tiempo, gracias a las sinergias del Centro de Operaciones México del ACC y “el manejo de equipaje que ha mejorado 19 por ciento interanual”.
Ambas aerolíneas operan en la misma terminal, en 12 aeropuertos de ambos países, 10 de estos son centros de conexión de las dos compañías aéreas y algunos considerados de los más importantes del mundo, como Atlanta, Detroit, Nueva York y Seattle, entre otros, así como Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey en nuestro país.
El principal aporte de la alianza entre estas importantes líneas aéreas es su servicio homologado, que facilita la experiencia del viajero, sin importar en qué aerolínea viajes. Las familias tarifarias, la venta de ancillaries y servicios complementarios, alimentos a bordo en rutas seleccionadas, Free Messaging y Wi Fi a bordo, son parte de estas bondades.
También, atención personalizada a clientes corporativos, y del programa de lealtad Elite y Elite Plus pueden disfrutar ascensos y seleccionar su asiento sin costo, además de usar puntos o millas en vuelos de ambas compañías aéreas.
✰✰✰✰✰ El Aeropuerto Internacional de Campeche, operado y administrado por Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), obtuvo la certificación de “Calidad Ambiental”, otorgada por la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa), ya que ASA se encuentra inscrito en el Programa Nacional de Auditoría Ambiental (PNAA).
Para obtener la certificación, la administración del aeródromo instrumentó acciones diversas para cumplir a cabalidad, normatividad ambiental vigente, además del registro del aeropuerto ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), como empresa micro-generadora de residuos peligrosos.
La auditoría ambiental es una vía voluntaria y diferente a las acciones de inspección y vigilancia, promueve la identificación de oportunidades de mejora, así como la instrumentación de proyectos que reducen la contaminación.
“El Ángel de la Fama tiene sus alas hechas de papel… periódico”.
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