Fallas gubernamentales, con y sin protocolos
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 20, May 2019Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
- Claudia Sheinbaum puso en riesgo salud de capitalinos
- Bellas Artes rinde culto a la iglesia La Luz del Mundo
- Miguel Torruco, titular de Sectur, en espera de sanción
Están por cumplir medio año en el gobierno y algunos funcionarios se empeñan en eludir responsabilidades en algunos temas, so pretexto de que autoridades de administraciones pasadas no les dejaron protocolos de actuación y lejos de enviar un mensaje que calme las aguas entre los gobernados, lo único que han logrado es dejar ver ridículamente su pobre desempeño.
“El gobierno anterior no nos dejó un protocolo”, se escudó la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, al referirse al grave problema de contaminación ambiental que capitalinos y vecinos del Valle de México padecieron al grado de que el otrora Distrito Federal y localidades de la zona metropolitana fueron prácticamente paralizadas por la contingencia, la más severa de los últimos años.
Por lo general, los protocolos surgen a partir de experiencias y problemas ambientales y en el tema de la contaminación ya no son una novedad, ya que un año sí y otro también estos protocolos se aplican, sea por las bajas temperaturas que provocan inversiones térmicas o por calores excesivos combinados con falta de vientos que impiden la dispersión de los gases que se emiten en fábricas y vehículos automotores, incluso estas medidas existen en diversos temas de atención, como son casos de vialidad, transporte, incendios, salud, y muchos otros etcéteras.
Entonces cuando se escuchan las palabras de Claudia Sheinbaum al denunciar la inexistencia de protocolos en materia de contaminación esto es cierto, pero miente cuando echa culpas a administraciones anteriores, ya que ante un hecho inédito como el vivido en días pasado, contaminación por partículas PM2.5 (producidas principalmente por incendios forestales), pues parece razonable que no existan protocolos y en esos casos sonaba hasta lógico aplicar las restricciones que cuatro días después de iniciada la contingencia se aplicaron.
A todos nos sorprendió la contingencia, es cierto, lo malo es que a las autoridades les llevó todo un fin de semana en buscar un protocolo que no existía y en lugar de buscar soluciones inmediata se les ocurrió echar culpas o, como comentó a un grupo de periodistas el diputado local, Jorge Gaviño Ambriz, “escupieron para arriba”, sin darse cuenta que administraciones anteriores, en la capital, fueron quienes hoy son gobierno. O será que a Sheinbaum Pardo ya se le olvidó que ella encabezó la cartera de Medio Ambiente cuando Andrés Manuel López Obrador fue jefe de Gobierno y que cuenta con grado de doctora en ingeniería ambiental, así que su respuesta lejos de ayudarla, la dejó ver como una gobernante con falta de oficio, donde lamentablemente su inacción puso en riesgo la salud de millones de ciudadanos.
En el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), hasta hace algunos meses sólo INBA, también se cuecen habas, en lo que a falta de oficio de gobierno se refiere y no es precisamente por haber permitido la concentración de gente frente al Palacio de las Bellas Artes en medio de la contingencia ambiental que vivía la Ciudad de México, que también fue un error, sino porque las instalaciones de dicho recinto fueron utilizadas para la celebración de un evento de carácter religioso.
Resulta que el miércoles pasado el auditorio principal de este complejo cultural abrió sus puertas a seguidores de la iglesia La Luz del Mundo y como no queriendo los asistentes festejaron el 50 aniversario del líder espiritual de esa agrupación, y lo hicieron bajo el disfraz de un concierto operístico denominado “El Guardián del Espejo”, evento que, según se observó en algunas imágenes públicas, se extendió hasta la explanada principal del recinto.
Quienes conocen el ambiente de la difusión cultural saben que los protocolos para hacer uso de las instalaciones del Palacio de Bellas Artes son más que estrictos y en más de una ocasión las salas del instituto han sido negadas a quienes no cumplen requisitos para la presentación de sus eventos, como también se les ha negado la difusión si no cumplen con protocolos de imagen institucional, donde son observados tonos de color, letra, imágenes, calidad de papel y textos.
Así, en tanto que por un lado hay quienes aducen falta de protocolos de actuación en temas gubernamentales, en el INBAL los protocolos al parecer se han aligerado, y no precisamente por falta de conocimiento y experiencia, sino para cumplir con compromisos de campaña con algunos grupos como es el caso de La Luz del Mundo. Al menos eso parece.
VA MI RESTO.– Ya entrado en el tema de protocolos, quien en estos días hace estragos en espera de sanción es el titular de la Secretaría de Turismo, Miguel Torruco Marqués.
Hay que recordar que la dependencia en cuestión, en febrero pasado, puso en el aire mediático de las redes sociales un promocional con supuestos fines turísticos, pero que aducía fines políticos-electorales, ya que aparecía la imagen del presidente Andrés Manuel López obrador y frente a él el logo de Morena.
El spot, así lo resolvió hace unos días el Tribunal Electoral, violó la ley y eso merece una sanción administrativa. En este caso puede que se diga que se desconocía la existencia de un protocolo institucional, pero los abogados dicen que el desconocimiento o ignorancia de la ley no sirve de excusa, y hasta ahí porque como veo doy.