Gobernantes chindinguas
Alberto Vieyra G. viernes 17, May 2019De pe a pa
Alberto Vieyra G.
El término chindinguas es un barbarismo o modismo mexicano que se usó de manera profusa durante los siglos IX y XX, y su significado tiene que ver con otros modismos como chambón, mediocre, inútil, traga de gorra y mil acepciones más que tienen que ver con el tontuejismo.
¿Acaso les ve usted a los gobernantes aztecas alguna de esas cualidades? ¿Serán chindinguas para gobernar, pero no para el saqueo y el pillaje nadie les gana, que históricamente ha sido el deporte de los sinvergüenzas?
La degradación política y social que vive la patria mexicana me recuerda la degradación que vivió el imperio romano que fue capaz de crucificar a Jesucristo mediante uno de los métodos de castigo más salvajes: La crucifixión.
Esa degradación de valores universales contenidos en uno de los tres libros más fantásticos de la humanidad: La biblia, es extraordinariamente peligrosa para cualquier cultura o sociedad en el mundo, porque pareciera que están por cumplirse los tiempos del fin del mundo, según la misma biblia escrita por 40 sabios desde mil años antes de Jesucristo.
Por ejemplo, cuando el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ordena ilegalmente con un memorándum cancelar la reforma educativa peñista, automáticamente lo exhibe como un gobernante que privilegia lo extralegal, es decir, que renuncia a respetar la Constitución de la República que juró cumplir y hacer cumplir, pero también cuando miente diariamente en “las mañaneras”, porque según el politólogo mexicano, Luis Estrada, AMLO ha pronunciado casi 600 mentiras –él les llama no verdades-, pero que en sencillo castellano son mentiras, ello nos dice también, que el llamado mesías de Macuspana del mismo modo viola los ordenamientos divinos porque uno de los 10 mandamientos tiene que ver con el no mentiras.
Pero no solo él, la mayor parte de los politicastros en México, además de chindinguas son mentirosos, como es el caso de doña Claudia Sheinbaum, la flamante gobernadora de la Cuidad de México que engaña a los ciudadanos de la contaminada megalópolis con el cuento de que la maestra Mónica García Villegas fue capturada “por la eficiente policía”, cuando que Ciro Gómez Leyva y el abogado Javier Coello Trejo han demostrado con pruebas de comunicación telefónicas y WhatsApp que la dueña del Colegio Rébsamen se entregó, mediante un pacto secreto en el que curiosamente aparece un diputado de Morena ligado con mafias criminales del sur de la Cuidad de México.
Pero ¿dónde está el mérito de ese chindinguas gobierno de la Cuidad de México, en la mentira? ¿Por qué tratar a los ciudadanos como retrasados mentales o como niños que todavía se chupan el dedo?
Hoy sabemos que incluso eso de la recompensa de 5 millones que el gobierno de Claudia Sheinbaum y la procuradora capitalina, Cristina Godoy. ofrecieron por la captura de Mónica García podría ser el Waterloo de la señora Claudia Sheinbaum, aunque su padrino político sea el Presidente de la República, pues a todas luces se ve que hay un nauseabundo enjuague con el medio hermano de la dueña del colegio Rébsamen, quien supuestamente fue el contacto para que se entregara la maestra que tendrá que ser juzgada por delitos de homicidio culposo de 28 personas, entre ellos 17 niños que perecieron en el derrumbe del Colegio Rébsamen durante el terremoto del 19 de septiembre del 2017.
¿Verdad que a todas luces se ve que hay gato encerrado?