Contaminación ambiental ¿sin remedio?
¬ Augusto Corro viernes 17, May 2019Punto por punto
Augusto Corro
Hace varios días que el Valle de México se encuentra sometido a la contaminación ambiental.
A la polución propia de la excesiva flota vehicular deben sumarse los incendios y, claro, la ubicación geográfica.
La Ciudad de México no cuenta con un sistema de trasporte público de disminuya el uso del automóvil.
Las autoridades en vez de construir más líneas del Metro se fueron por lo fácil: instalar líneas de Metrobus.
Dichas líneas seguramente paliaron, relativamente, las necesidades de transporte, pero volvieron lenta la circulación por avenidas principales.
Es decir, tapan un hoyo y destapan otro. No se sabe de políticas prácticas y efectivas en la lucha contra la contaminación ambiental en la Ciudad de México.
La corrupción siempre tuvo un papel importante para que continuemos golpeados por el aire enrarecido con las repercusiones negativas en nuestra salud.
Por ejemplo, en los llamados verificentros con una suma de dinero se podía conseguir la calcomanía de aprobado para el coche, aunque emitiera smog. Instalaciones como fábricas, gaseras, puestos de comida al aire libre, etc., funcionan sin ningún problema.
El problema eterno de los camiones con placas federales también contaminan y quién sabe por qué influencias nunca sometidos a verificaciones, para decidir si se encuentran o no en condiciones de circular.
En fin, la contaminación ambiental es una realidad. Estamos expuestos a respirar partículas pequeñas que se encuentran en el aire enrarecido y que van a alojarse en los pulmones.
Vivir en la Ciudad de México nos lleva a niños, adultos y ancianos a pagar un precio muy alto.
Cabe preguntar si tiene remedio, solución, el problema de la contaminación ambiental en el Valle de México. Como se ve la situación, se podría pensar que es más que imposible. ¿Usted qué opina amable lector?
Violencia en la capital
Ante la incapacidad de las autoridades para frenar la delincuencia en la Ciudad de México, los grupos de delincuentes incrementan sus acciones.
Los hechos violentos se registran por todos los rumbos de la capital y la respuesta de la policía no se nota. En Tepito los integrantes de las bandas de La Unión Tepito y la Anti-Unión se disputan ese territorio de la colonia Morelos, sino también otros sitios de la capital.
A esos dos grupos deben sumársele otras doce bandas, por lo menos, que son generadoras de violencia y que se disputan las calles de la metrópoli.
Esos delincuentes se dedican a la venta de drogas al menudeo, extorsión, secuestro, robo a casas habitación e, incluso, a la trata de personas. Se sabe, pues, que la Ciudad de México se convirtió ya en una zona de violencia y es notoria la incapacidad de las autoridades para brindar seguridad.
¿Y los cuerpos policiacos? ¿Cuál es su función?
Es posible que las autoridades no cuenten con una policía capacitada que permita luchar contra la delincuencia organizada y logre resultados positivos.
Los uniformados están mal entrenados y no son pocas las veces en que son cacheteados o golpeados por ciudadanos inconformes con el actuar de los representantes de la ley. Se tienen que hacer ajustes en el gobierno de la Ciudad de México para controlar el problema de la violencia y de los crímenes que van al alza.
Urge que el gobierno local actúe con energía y sin demora. ¿O esperan a la Guardia Nacional para que venga a salvarnos? Ojalá y alguien nos responda.
Periodista asesinado
Continúan las agresiones contra los periodistas.
En la mañana de ayer (jueves) fue ejecutado el comunicador Francisco Romero, del portal Ocurrió Aquí. El cuerpo sin vida fue encontrado en la avenida 115 casi esquina con calle 41 de la colonia Ejidal, municipio de Solidaridad (Playa del Carmen).
Más de ciento cuarenta comunicadores fueron asesinados del año 2000 a la fecha. México es considerado como uno de los países peligrosos para la práctica del periodismo.
Según cifras extraoficiales, durante el presente gobierno son ocho asesinatos cometidos contra periodistas. En Playa del Carmen se perpetraron alrededor de 86 ejecuciones en lo que va de 2019. Son constantes los hechos violentos en la zona.
Ante la muerte de Francisco Romero las organizaciones no gubernamentales y los organismos internacionales defensores de los derechos humanos manifestarán su repudio y condena.
Además exigirán una mayor protección a los periodistas. Siempre hacen esos pronunciamientos. Solo que nadie los atiende ni los toma en cuenta.