Terror, flagelo de hace 2 sexenios
¬ Augusto Corro viernes 10, May 2019Punto por punto
Augusto Corro
En México nunca nos acostumbraremos a vivir en el terror derivado de la inseguridad que nos flagela desde hace dos sexenios.
La estrategia para combatir a la delincuencia organizada sólo provocó más violencia, mayor número de muertes y una impunidad galopante.
El miércoles a las 10.15 horas se registró una balacera en Cuernavaca, Morelos, en el que perecieron el empresario Jesús García Rodríguez y el dirigente cetemista, Roberto Castrejón Calderón. Dos personas más resultaron lesionadas.
El presunto homicida Maximiliano o Max Hernández fue capturado cuando intentaba huir.
El doble homicidio ocurrió en presencia de los periodistas que cubrían una manifestación de vendedores ambulantes a pocos metros de distancia de Palacio de Gobierno.
Sin duda, los videos de esa acción violenta volvieron a mostrar que vivimos en la violencia, el terror y el temor que provocan los sicarios, extorsionadores y secuestradores.
Lo grave del problema es que las autoridades encargadas de velar por la seguridad de los ciudadanos no saben cómo cumplir con su responsabilidad.
El estado de Morelos desde hace varios sexenios padece la mala suerte de contar con gobernadores ineptos, incluido el actual, Cuauhtémoc Blanco, un ex futbolista que ya fue alcalde de Cuernavaca.
Ahora en su condición de mandatario estatal las cosas marchan igual o peor que en la época del gobernador perredista Graco Ramírez.
Morelos, por su cercanía con Guerrero, la Ciudad de México y el Estado de México, pasó a formar parte de las entidades tocadas por la delincuencia organizada en su rama del narcotráfico.
El gobernador Cuauhtémoc Blanco lamentó los hechos y dijo que se necesita el apoyo del gobierno federal para acabar con la delincuencia organizada.
La realidad es que al ex futbolista le quedó grande el cargo de mandatario y no se ve cómo se resolverá el problema de la violencia en su entidad.
No faltó quien le dijera al autor de la “cuauhtemiña” (jugada de habilidad con el balón) que si no puede con su responsabilidad que renuncie.
La inseguridad en la capital
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, se reunió con los 16 alcaldes para hablar sobre el problema de la inseguridad.
Dijo la funcionaria que revertir esa situación le llevará más tiempo del que se planteó y que requerirá de su apoyo y colaboración.
Les pidió a los alcaldes no bajar la guardia (¿cuál?) en ese renglón con el fin de evitar acciones como las del fin de semana pasada, en el que se contabilizaron 17 homicidios dolosos.
Dijo la jefa de Gobierno que se cambiará la estrategia de la lucha contra la inseguridad.
En este espacio señalamos en repetidas ocasiones que la población sufre desde hace varios años los embates de la delincuencia.
Los asaltos a transeúntes, extorsiones, secuestros, robos de coches y asesinatos se multiplican cada día ante la impotencia de autoridades para poner freno a esos delitos.
Ni hablar. Por ahora seguiremos inmersos en la seguridad. ¿Hasta cuándo?
El ex gobernador suertudo
No todo es mala fortuna para los ex gobernadores en México. Ayer en este espacio nos referimos a los pillos que sacaron las arcas de sus estados.
Señalamos a Javier Duarte y a Roberto Borge, de Veracruz y Quintana Roo, respectivamente. Ambos en la cárcel por meterle mano ilegal al erario. También informamos que el ex mandatario de Tabasco, Andrés Granier Melo, fue absuelto del delito de peculado y puesto en absoluta libertad.
El tabasqueño fue condenado en febrero del 2018 por la juez Guadalupe Cadena Sánchez a 10 años, 10 meses y 15 días de prisión por el desvío de 196 millones de pesos.
Le fue bien a Granier Melo porque durante el tiempo que pasó “detenido” no salió del hospital donde lo atendieron de un problema del corazón.
A nadie extrañó que el ex mandatario resultara absuelto del o de los delitos que cometió cuando fue gobernador. En cuanto dejó el cargo, sus adversarios lo acusaron a él y a su equipo del desfalco de 20 mil millones de pesos al erario.
Esa cifra inicial se redujo considerablemente y llegó a los 2 mil 817 millones de pesos.
Parte del dinero robado, alrededor de 88 millones pesos, fue recuperado en cajas de cartón que estaban guardadas en un taller mecánico.
Las maniobras de las autoridades para defender a los ex gobernadores corruptos tuvieron una manifestación ejemplar en el caso de Granier Melo. Saqueó a Tabasco y poco faltó que le dieran las gracias.
Feliz fin de semana.