En 8 meses, la 64 Legislatura ha remodelado al Estado
Roberto Vizcaíno lunes 29, Abr 2019Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
Quizá no todos los mexicanos son conscientes de los cambios de Régimen, o del rediseño del Estado, pero hoy México vive ya otro modelo institucional, y la transformación va a fondo.
La evolución surge de reformas legislativas que se han tramitado dentro del Senado y la Cámara de Diputados durante dos períodos ordinarios, del 1 de septiembre del año anterior al día de hoy.
En estos 8 meses, se ha reformado la Ley General de la Administración Pública para revivir a la Secretaría de Seguridad Pública y rediseñar a la secretaría de Gobernación; reorientar los alcances de la Secretaría de Desarrollo Social, que hoy es Secretaría de Bienestar y cuyos programas sociales y asistenciales se modificaron sustancialmente en su filosofía y objetivos.
Se reformó a la secretaría de Hacienda que concentra hoy todo el control del gasto y compras de todo el gobierno en una sola ventanilla.
Se institucionalizó el funcionamiento de sólo 32 delegados generales en los estados y hace apenas horas se aprueba la Estrategia Nacional de Seguridad que crea un nuevo esquema de presencia policial-militarizada inicialmente en 150 cuadrantes de 266 en que fue dividido el país.
Esto permitirá una presencia continua de Guardias Nacionales militarizados en prácticamente todos los puntos geográficos de la República, estrategia con la cual López Obrador cree que abatirá sustancialmente violencia e inseguridad en los siguientes 6 meses.
Claro, para ello el Congreso creó la Guardia Nacional, con una fuerte presencia militar en los cuerpos de seguridad pública y en sus objetivos y programas.
Sólo ya con estas reformas y creación de nuevas instituciones, se da un cambio del modelo ideológico, político, social y económico del Estado Mexicano.
Se deja atrás al Estado Social-Democrático, o neoliberal, creado por los gobiernos de Miguel de la Madrid, Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
Y entramos de lleno al modelo del Estado social-asistencialista-populista con la preservación de importantes remanentes del Estado neoliberal anterior: destacadamente el Banco de México, la misma política e instituciones fiscales –donde hoy a los impuestos se les llama “contribuciones, como en las administraciones castristas o chavistas–; una convivencia renegada, ríspida, con el sistema financiero privado al que se le amenaza constantemente con reformas y mecanismos de contención y sometimiento, y la preservación y defensa del nuevo Tratado de Libre Comercio que significa la permanencia de la larga y profunda dependencia comercial de Estados Unidos, una dependencia absolutamente neoliberal.
En este camino el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha sometido a una fuerte contracción a la banca e instituciones financieras del Estado (Nafinsa, etc) desparecido Proméxico y ha nacionalizado o confiscado en los hechos el multimillonario Fondo de Promoción Turística. Ya ni qué decir del impacto de la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México.
Con la creación de importantes programas de becas y bonos, supuestas pensiones, reparto de dinero a adultos mayores, jóvenes sin empleo ni estudio, a estudiantes, niños y niñas, discapacitados, madres solteras, etc. se ha creado una importante base de apoyo y contención social.
Estos programas los anuncia, aplica y desarrolla directamente el presidente López Obrador.
Fin de segundo período
En este contexto concluye mañana el segundo periodo legislativo de la 64 Legislatura.
En el Senado, dice Ricardo Monreal, coordinador de la mayoría de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política (el personaje más sobresaliente de la política de la 4ta Transformación luego del propio presidente López Obrador) queda pendiente y para período extraordinario la aprobación del T-MEC, que (se negocia) se realizará al parejo de su aprobación en los Congresos de EU y Canadá.
“Estamos en comunicación con los parlamentarios de aquellos países, para intentar sacar simultáneamente la aprobación del T-MEC en los tres países”, indica.
La lógica del alcance trinacional y regional del T-MEC lo reclama así.
En resumen, de logros indica que en estos 8 meses, desde el 1 de septiembre al 30 de abril, el Senado y la Cámara de Diputados habrán sacado adelante un buen tramo de la remodelación de la Administración Pública y va por la remodelación del poder Judicial Federal.
En las últimas horas del segundo período seguro aprueban la nueva reforma laboral o quizá, la nueva reforma educativa aprobada por diputados a fines de la semana anterior.
En el cajón de pendientes quedan: las leyes secundarias de la Guardia Nacional, la despenalización de la Mariguana, el Plan Nacional de Desarrollo, la Ley de Austeridad Republicana, la reforma del 35 Constitucional, las reformas para disminuir las cuotas de servicios bancarios, la reforma al Poder Judicial y la reforma para que el gobierno fije directamente el precio de medicinas.
Pero en los 8 meses anteriores han sacado adelante: la Ley Orgánica del Fiscalía General de la República y el nombramiento del Fiscal General; la Ley del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas; la reforma constitucional en materia de extinción de dominio; reformas al 19 Constitucional en materia de delitos graves; la aprobación del Convenio 98 de la OIT para la libre sindicalización y negociación colectiva de las condiciones de trabajo.
Reformas a las leyes del IMSS e ISSSTE en las que se reconoce el derecho a la seguridad social para parejas del mismo sexo, y la Ley para Trabajadoras Domésticas.
Se sacaron adelante nombramientos de ministros de la Suprema Corte; de bancos y consejeros del Banco de México, y de organismos autónomos, embajadores y cónsules, así como de nuevos integrantes de la Comisión Reguladora de Energía, la CRE; del Tribunal Electoral, el INAI, de Acceso a la Transparencia, Acceso a la Información.
Vamos requetebien… ¿neta?
Y mientras todo lo anterior camina, ayer, desde Juchitán, Oaxaca, el presidente López Obrador afirmó que, bajo su mandato, México va “requetebién” y que ello es porque se mantiene bajo control a la inflación, porque hay una recaudación fiscal en aumento y porque el peso se ha fortalecido.
En Juchitán, una región ancestralmente atrasada, el mandatario echó a andar su programa de Bienestar y el de Reconstrucción para los afectados de los sismos septiembre de 2017.
Del Olmo, ¿lider charro?
En un escenario al viejo estilo del charrismo sindical que se hubiera llevado el aplauso de Fidel Velázquez, y bajo el padrinazgo del presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, del zacatecano Ricardo Monreal, el senador Pedro Haces, líder de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México, dio posesión de la secretaria general de la Federación Autónoma de Trabajadores y Empleados de la Ciudad de México, a José “Pepe” Del Olmo.
Ahí, en medio del Lienzo Charro –escenario de otros muchos eventos de líderes sindicales de la vieja escuela–, Del Olmo dijo que a pesar de su querencia por lo charro, él ejercerá un nuevo sindicalismo, correcto, de cara al trabajador, sin corrupción, que sustituirá viejas formas establecidas por la CTM.