Seis meses, sólo para ganar tiempo
¬ Arturo Ríos Ruiz miércoles 24, Abr 2019Centro..!
Arturo Ríos Ruiz
- De Carlos Salinas a Peña Nieto se consolidó el hampa
“Abrazos no balazos” el primero de diciembre, y “Oficialmente ya no hay guerra. Nosotros queremos la paz”. Dijo el Presidente de la República el último día de enero, tres meses después ha quedado demostrado que, al hampa le vale y sigue matando por montones.
Después del terrible hecho de Minatitlán, Veracruz, la cosa ha cambiado, ya no hay la contundencia como lo ofreció en campaña, como es natural, prometió mucho y por ahora, parece que tiene que concentrarse en dos flagelos indispensables, corrupción y seguridad. Con eso tendríamos.
Minatitlán es simbólico, muestra de la exigencia, necesidad y determinación para pensar en serio respecto a la seguridad; los discursos de abrazos, de paz, de la amnistía, del amor, del ejemplo… quedaron borrados; delincuencia del calibre que tenemos en México, se acaba combatiéndola, no con perdones.
No sólo es batallar con la fuerza al crimen que actúa como si fuera superior al propio Ejército, pues, en los años que tiene en el combate no ha podido y en cambio, muchos elementos de alto nivel terminaron formando parte de ellos por su opacidad al dejarlos actuar a cambio de dádivas nada despreciables.
Si tomamos en cuenta que la beligerancia de la delincuencia organizada tomó vigor desde Salinas a Peña Nieto, se suman 30 años, para casi apoderarse del país; pues bien, esos se necesitan, para equilibrar a la nación:
a).- Educación desde niños, a futuros padres y si es posible, ahí sí, adoctrinarlos en esas cuestiones.
b).- Ataque al patrimonio de los líderes del hampa, hay por centenas acaudalados; así como cerrarles las puertas a sus inversiones, amén de incautarles sus negocios en prosperidad; en esto, ya se dan pasos.
Y c).- No hacer lo que propuso Alfonso Durazo en agosto de 2018, “No detener a sus cabecillas”. Se equivocó, tienen que ser encarcelados; justicia sin castigo, no lo es. Más bien es faramalla.
Seis meses para empezar, pero bien, olvidándose de lo que no hicieron los que ya no están, ahora les toca resolver lo viejo y lo nuevo.
Seis meses se van volando, asimismo el sexenio, no debe haber descanso en esta cruzada, la inseguridad mata en México, ya basta, todos estamos inmersos en el problema.