Sicarios preguntaron por “La Beky” y empezaron a disparar a la multitud
Seguridad lunes 22, Abr 2019- Terror en una fiesta privada
El cumpleaños número 52 de una habitante de Minatitlán, Veracruz, se convirtió el viernes en una noche de terror para decenas de familias, luego de que un comando armado ingresó a la palapa donde se llevaba a cabo el convivio y terminó con la vida de 13 personas, entre ellas, un pequeño de un año.
El evento estaba programado para concluir a las 22:00 horas, sin embargo, una hora antes, por lo menos tres sujetos de complexión delgada (según el relato de testigos), irrumpieron en el recinto denominado “El Potro”, ubicado en el callejón 5 de Septiembre esquina con Primero de Mayo de la colonia Obrera, a un costado de uno de los accesos a la refinería.
El grupo de hombres irrumpió un convivió en la palapa, donde festejaban a una mujer, y cuando preguntaron por “La Beky”, dueña de un bar en Minatitlán, comenzaron a dispararle a los asistentes, entre ellos a un bebé de un año.
“Era el cumpleaños de mi hermana, cumplía 52, yo venía del baño cuando comenzó la tronadera, no vi cuántos eran porque ya no salí. Perdí a mi hijo, mi único hijo, ya se imaginará el dolor que tengo de ver a mi único hijo muerto. Dios es tan grande que aquí estoy parada, con mi dolor, porque no se puede decir otra cosa, tenía 32 años”, dijo una sobreviviente.
En el relato que une el rompecabezas de esa noche de confusión, los sobrevivientes narran que incluso fueron apuntados en la cabeza y obligados a mirar cómo otros asistentes a la fiesta eran asesinados.
“Al bebé lo remataron”
Otra de las asistentes, que también perdió a su hermano, describió que al pequeño de un año, que vestía playera amarilla, short de mezclilla y tenis negros, le dispararon a quemarropa.
“Seguía más, yo dije, fue un balazo, pero fue una rociadera porque estaban muertos y ahí mismo le seguían dando. Al bebé lo siguieron rematando, le dieron en el corazoncito, cómo no se van a dar cuenta si lo traía la mamá cargando. A la mamá también le dieron. Yo creo que el papá lo quiso cubrir, pero le dieron en la cara”.
Las versiones indican que, en efecto, los pistoleros buscaban a alguien, sin embargo, pese a que mataron a más de una decena de personas, todavía se dieron el lujo de torturar psicológicamente a quienes sobrevivieron, pues los obligaron a observar cómo los acribillaban.
“A los que estaban agachados les decían que voltearan a ver a los muertos, les volvían a dar. Que los miraran, volteabas a verlos y te decían volteate. Creo que buscaban a alguien, te apuntaban a la cabeza o la espalda con armas largas. Eran como seis personas, yo solo vi al que me estaba apuntando, solo decía: en tus manos encomiendo mi espíritu, perdóname, perdóname, me cubro con tu sangre preciosa y grité: la sangre de Cristo tiene poder, el hombre se dio la vuelta y ¡pam! le dio al que estaba a lado; ¡pam! le dio al que estaba del otro lado y dije, me va a tocar en la espalda, pero se fueron. Luego vi a mi comadre, yo le decía párate manita, párate, pero no, ya la habían matado”.
Algunos otros sobrevivieron porque se fueron temprano, indicaron que estas fechas son para “guardarse”
“Dios me sacó a mi y a mi hijo, es una desgracia tan grande, yo presentía algo muy feo, por eso me fui también. Son días sagrados. Esto es un llamado del Señor para que no lo abandonen”, expresó otra mujer arrepentida.
El salón de fiestas, que consta de un patio con techo de palma bajo el cual se instalaron sillas y mesas, estaba acordonado el sábado.
Aún estaba adornado con el multicolor papel picado de la fiesta, y en el suelo estaban esparcidos restos de comida, sillas tiradas y aparentes manchas de sangre.
Mientras los familiares de las víctimas hacían los preparativos para los funerales, convoyes de soldados patrullaban las calles de Minatitlán.
Para mañana martes, los habitantes del municipio preparan una “marcha por la paz”.
Dan tiro de gracia a 7 ejecutados
Siete de las 13 personas acribilladas en el ataque a una fiesta en Minatitlán, Veracruz, fueron rematadas con el tiro de gracia, de acuerdo con informes periciales.
La Fiscalía del Estado de Veracruz realizó el levantamiento de los cuerpos para después practicarles la necropsia de ley.
De acuerdo con testimonios, al menos seis hombres armados irrumpieron en la fiesta de cumpleaños en una palapa, buscando a un individuo. Tras ubicarlo entre la gente accionaron sus armas contra los asistentes al convivio, incluido un bebé de un año. “Fueron a rematar a quienes se encontraban aún con vida”, declaró una mujer.
Fuentes de la Fiscalía confirmaron que siete cuerpos presentaban el tiro de gracia.
El inmueble donde ocurrieron los hechos quedó asegurado por los ministeriales, quienes recabaron 18 entrevistas a familiares y vecinos del lugar y realizaron tres inspecciones oculares.
Peritos también realizaron los dictámenes de balística para determinar el tipo de armamento utilizado.
“La FGE reitera su compromiso de brindar una procuración de justicia expedita para los veracruzanos y continuará realizando todas las investigaciones necesarias que permitan dar con los responsables de este cobarde hecho”, expuso la Fiscalía en un comunicado.
El sábado, el gobernador Cuitláhuac García también se comprometió a dar con los responsables del ataque.
“Vamos a dar con los responsables y hacer prevalecer el Estado de Derecho, a pesar de la política de indolencia y brazos caídos de la Fiscalía General del Estado. En el Veracruz de hoy no habrá impunidad”, aseveró.
Tanto García como Winckler sostienen una diferencia política que les ha llevado a lanzarse acusaciones sobre la inseguridad en la entidad.