Prueba detecta riesgo de infarto a través de la saliva
Salud viernes 29, Mar 2019Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- Terapia transdérmica para el control de la menopausia
Ya está disponible en México Cardio inCode, la primera prueba genética que a través de una toma de saliva puede determinar el riesgo que una persona tiene de sufrir un infarto, angina de pecho, ictus y otras enfermedades cardiovasculares en los próximos 10 años.
Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en México, con 141 mil decesos anuales (INEGI, 2017).
Dos de cada 10 mexicanos mueren a causa de ellas, principalmente por eventos relacionados a la aterosclerosis, una acumulación de grasa y colesterol en las arterias que estrecha el paso de la sangre.
Cardio inCode es un test que establece el riesgo genético a padecer un evento cardiovascular analizando 12 variantes genéticas y la información del paciente sobre su estilo de vida y sus factores de riesgo. La prueba busca proporcionar información precisa al médico y paciente a fin de tomar medidas preventivas para la mejoría de su salud cardiovascular.
La prueba fue desarrollada por la compañía biotecnológica Gen in Code y está disponible en México a través de Grupo SOHIN, la primera empresa mexicana de servicios integrales de salud enfocada en medicina personalizada.
Gracias a esta hoy es posible predecir enfermedades mucho antes de que se presenten, a fin de tomar medidas al respecto.
Es el inicio de una nueva era en la prevención y tratamiento de padecimientos donde SOHIN tiene mucho que aportar, afirmó Juana Ramírez, CEO y Fundadora de Grupo SOHIN. También presentó Lipid in Code, un test que a través de la saliva determina las causas genéticas de la hipercolesterolemia familiar, una condición hereditaria caracterizada por el aumento de colesterol LDL (colesterol malo).
De esta forma, el médico podrá evaluar el tratamiento más adecuado para cada persona.
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Una de las etapas en la vida de las mujeres que trae cambios radicales es la menopausia, un proceso biológico natural que marca el final de los ciclos menstruales, afirmó Imelda Hernández, especialista en ginecología endocrina y menopausia.
La edad promedio en la que se presenta la menopausia es alrededor de los 49 años. Adicionalmente está el climaterio, que es el conjunto de cambios físicos y emocionales que se producen en la mujer antes y después de la menopausia. Algunos de los síntomas son: irregularidades en el ciclo, sofocaciones acompañados por sudoración, trastornos en el sueño, trastornos psicológicos, sequedad de piel y mucosas, dolor durante relaciones sexuales, riesgo de enfermedad cardiovascular e incluso el desarrollo de osteoporosis.
Por su parte, el doctor Juan de Dios Maldonado, presidente de la Federación Mexicana de Colegios de Obstetricia y Ginecología, A.C., dictó la ponencia llamada “La Mujer Invisible” en la que resaltó que, a pesar del estigma que se tiene sobre esa etapa, cada mujer lo vive de manera diferente.
No debe verse como un final sino como un nuevo comienzo. Actualmente la esperanza de vida de las mujeres es de 78 años, lo que muestra que después de la menopausia queda aproximadamente 25 o 30 años para disfrutar de la vida plenamente.
Para el año 2035, una de cada tres mujeres mexicanas estará en etapa de climaterio o menopausia, con una expectativa de vida de 83 años, por ello es fundamental mantener un buen estilo de vida con la práctica de actividad física aeróbica, una dieta adecuada y balanceada, evitar el aumento de peso, no consumir excesivamente tabaco, cafeína o alcohol.
Además existen terapias hormonales que ayudan a aliviar las molestias referidas. Generalmente se utilizan estrógenos tomados o inyectados, aunque la tendencia actual es la aplicación tópica, ya que ofrece mayores ventajas como una rápida absorción, niveles de fármaco estables, no causa irritación, no deja marca y permite individualizar la dosis.
Dicha terapia transdérmica tiene beneficios como el control de los síntomas vasomotores (disminución en frecuencia y severidad, bochornos, taquicardia y sudor nocturno), mejora el estado de ánimo, mejora la función sexual (lubricación), y controla los síntomas urogenitales (dificultad o dolor para orinar y atrofia vaginal).